La cita con las chicas continuó de maravilla, Kurama las había llevado a lo más profundo de su lugar de entrenamiento donde irónicamente había causado tantos estragos que tuvo que arreglar el lugar más de una vez, con la clara diferencia de que ahora había un pequeño lago en el lugar.
Las chicas estaban emocionadas por pasar un lindo tiempo en este lugar que estaba repleto no solo de árboles frutales, sino también de cientos de flores, una escena fascinante si no estuvieran en el Bosque de la Muerte, aunque para prevenir problemas, Kurama puso un sello para que solo animales inofensivos pudieran entrar.
El tiempo continuó avanzando y ya estaba oscureciendo. Kurama había dejado a las chicas en sus casas pero no sin antes escapar de Inoichi, quien lo salió persiguiendo por al menos 30 minutos antes de que apareciera su esposa y lo noqueara... otra vez.
En estos momentos Kurama se estaba dirigiendo hacia su hogar mientras miraba el oscurecido cielo.
"Mañana es el día..." - murmuró el joven pelirrojo mientras negaba con la cabeza. Él sentía que algo malo estaba por pasar pero no comprendía muy bien el qué - "Si recuerdo bien... pasó algo parecido con lo de Nami no Kuni..."
Kurama decidió dejar todo a un lado al notar que por fin había vuelto a casa - "¡He regresado!"
"¡Estamos en el living!" - gritó Kushina desde dentro de la casa. Kurama caminó con calma hacia donde estaban las mujeres reunidas y notó que además de las habitantes de la casa, también estaba Mikoto.
La matriarca Uchiha tenía una expresión preocupada mientras Kushina mantenía una gran sonrisa en su rostro.
"¿Sucede algo?"- preguntó Kurama al notar lo erráticas que eran las emociones de la bella mujer Uchiha.
"Y-Yo..." - murmuró Mikoto mientras miraba al chico con incomodidad.
"Será mejor que yo se lo diga" - dijo Kushina con una feliz sonrisa - "Kuro-chan, tenemos un gran noticia que darte"
"?" - Kurama solo les dio una mirada confundida mientras Kurenai sonreía con felicidad y Anko parecía estar esperando que empezara el espectáculo - "¿De qué se trata?"
"Será mejor que te sientes, esto será algo fuerte" - dijo Kushina con una media sonrisa.
"¿Ok?" - Kurama solo siguió las instrucciones de la mujer pelirrojo pero cuando lo hizo, sintió algo extraño en las dos mujeres. Él no sabía que era exactamente pero se sentía familiar, como si lo pudiera reconocer pero no sabía como explicarlo - ". . ."
Él no se había dado cuenta antes porque estaba pensando en otras cosas pero ahora que se concentraba un poco más, notó la diferencia.
"¿Te diste cuenta?" - preguntó Kushina con emoción.
Kurama abrió la boca pero ninguna palabra salía de ella. Él seguía sin poder comprender la situación pero su corazón estaba latiendo con fuerza como si instintivamente le dijera que lo que estaba a punto de escuchar era algo extremadamente importante.
"Será mejor que vayas directo al punto, Kushina-san" - dijo Anko con una sonrisa en su rostro - "Tengo que ir a preparar unas cosas y no quiero perderme esto"
Kurenai solo negó con la cabeza pero no dijo nada porque ella también estaba interesada.
"Ok..." - asintió la pelirrojo mientras miraba a sus dos estudiantes - "Aunque tenía pensado que fuera Mikoto-chan la que le contara"
"Ok... dame un segundo..." - murmuró Mikoto mientras intentaba calmar su corazón. Ella estaba preocupada por la reacción que tendría el chico cuando escuchara la noticia que estaba a punto de darle.
"No te preocupes, no importa que me digas no cambará nada" - respondió Kurama con seriedad al notar la ansiedad de la mujer Uchiha.
"Estoy segura de que cambiará muchas cosas" - dijo Anko mientras le daba una mirada divertida.
"No creo que Mikoto-san esté lista para decirlo" - dijo Kurenai al ver como la mencionada estaba hiperventilándose.
"¿Quieres que lo haga yo?" - preguntó Kushina con preocupación.
"No... yo soy la que tiene que hacerlo" - respondió Mikoto mientras se intentaba calmar poco a poco. Luego de unos pocos minutos, ella le dio una mirada seria al chico y le dijo de forma rápida como una bala - "Estoy embarazada"
". . ." - Kurama se quedó en silencio unos segundos mientras procesaba lo que acababa de escuchar pero no importaba lo mucho que lo intentara, sus pensamientos eran un caos.
"¿Esto es normal?" - preguntó Anko con curiosidad.
"Cuando Minato recibió la noticia, se quedó congelado por media hora" - dijo Kushina mientras asentía.
"Yo... no sabría decirlo" - dijo Mikoto mientras negaba con la cabeza - "Cuando le dije a Fugaku que estaba embarazada, él solo me dijo 'buen trabajo'..."
"Ahora tengo ganas de golpear a ese bastardo" - murmuró Kushina con el ceño fruncido - "Debería de agradecer que está muerto porque si todavía estuviera vivo, lo mantendría encadenado en el sótano mientras dejo que Anko practique sus nuevas técnicas con él"
"¡Me gusta como suena eso!" - exclamó la bella encantadora de serpientes - "¿Puedo tener a un traidor en el sótano?¿Por favor~?"
"No trates a las personas como si fueran mascotas" - dijo Kurenai con el ceño fruncido. Si bien ella odiaba a los traidores, no significaba que no les daría el respeto que todo humano se merece.
"¡EEEEEEEHHHHHHHHHHHHHH!" - exclamó el joven pelirrojo.
"Eso fue más rápido de lo que pensaba" - dijo Kushina con sorpresa - "Esperaba que estuviera congelado por al menos otros 10 minutos"
"¡¿Estás embarazada?!" - exclamó Kurama mientras le daba una mirada a Mikoto.
"S-Si" - asintió la matriarca Uchiha - "Hoy fui al hospital porque últimamente había estado con nauseas pero cuando entré una de enfermera que era una sensora de chakra, detectó una pequeña firma de chakra en mi vientre. Cuando volví a casa, tomé una prueba de embarazo y salió positiva..."
". . ." - Kurama solo abrió la boca sin poder decir una sola palabra porque la noticia era demasiado impactante.
"Aunque ella no es la única" - dijo Kushina con una media sonrisa - "Últimamente he estado con mareos y todavía no me llega mi menstruación... así que también tomé un test de embarazo y salió positivo"
". . ." - cuando escuchó estas palabras, Kurama no pudo resistirlo más y cayó inconsciente al piso.
"Lo tomó mejor de lo que pensaba" - asintió Kushina con una sonrisa.
"Que Mikoto-san esté embarazada es una sorpresa pero tú, Kushina-san..." - negó Anko mientras veía con diversión como Kurama estaba en el suelo.
"¿A qué te refieres?" - preguntó Kushina con el ceño fruncido.
"Ustedes dos lo han estado haciendo como conejos en celo y sin protección... es obvio que terminarías embarazada tarde o temprano" - bufó Anko mientras le giraba los ojos.
"Lo lamento, Kushina-san pero concuerdo con Anko" - dijo Kurenai con seriedad - "Usted ha espado como adolescente con las hormonas alborotadas"
"Fufufu" - Mikoto solo soltó una pequeña carcajada al ver como el rostro de su mejor amiga se tornaba de un color similar al de su cabello.
* * * * *
Pasaron otros 15 minutos para que Kurama nuevamente reaccionara, solo que esta vez tomó de la cintura a las dos chicas. Si bien él no sabía como reaccionar en un momento así, no cambiaba el hecho de que de que en lo pronto sería padre.
"¡Voy a ser papá!" - exclamó Kurama con emoción. Si bien parecía forzado, había que recordar que él actualmente tenía la edad mental de 20 años, sin contar que gracias a la influencia de 'Kurama', su sentido de la moralidad no era el mismo que el de una persona normal.
Las dos afortunadas solo sonrieron de felicidad al sentir la emoción que el chico estaba irradiando, en especial Mikoto que no podía contener las lagrimas. Ella siempre quiso tener una familia con el hombre que amaba y por fin estaba cumpliendo su sueño.
"Gracias..." - murmuró la mujer Uchiha mientras abrazaba a su amante y futuro padre de su hijo.
"No tienes que darla" - sonrió Kurama mientras le devolvía el abrazo - "Somos una familia"
"Lo que dijo Kuro-chan es verdad, nosotros somos una familia" - sonrió Kushina mientras abrazaba a los dos.
"Creo que ya vi lo que necesitaba" - dijo Anko mientras negaba con la cabeza aunque se podía notar lo feliz que estaba en estos momentos - "Tengo que ir a terminar unos preparativos par a mañana, así que no volveré esta noche"
"Yo voy a ir a hablar con Yugao, ha pasado tiempo desde que la vi por última vez" - dijo Kurenai con una sonrisa mientras veía a los tres que estaban abrazados.
"Gracias por darnos un poco de tiempo a solas" - dijo Kushina con felicidad.
"Tranquila" - sonrió Kurenai mientras Anko solo se despedía.
"¿Saben que es lo que serán?" - preguntó Kurama con curiosidad y emoción.
"Todavía es muy pronto para saberlo... normalmente lo descubrimos luego del tercer mes de embarazo" - respondió Kushina mientras le daba un beso en la mejilla - "Pero tengo el presentimiento de que será varón"
"Yo... siento que será niña" - dijo Mikoto con felicidad - "Siempre quise tener una princesa"
"¿Y Sasuke qué es?" - preguntó Kurama con una sonrisa bromista, solo para sentir como Mikoto le mordía el cuello - "No molestes a mi hijo"
"Lo siento pero es algo que no puedo contener" - sonrió el joven de cabello rojo - "No importa el momento o lugar, siempre es posible molestar a Sasuke"
Mikoto solo negó con la cabeza, aunque tenía que admitir que la relación de esos dos era mucho mejor a la que Sasuke había tenido con Fugaku.
"Voy a ser padre..." - murmuró el joven Uzumaki con una gran sonrisa en su rostro. Él podía sentir como no solo él estaba feliz, sino también 'Kurama', el viejo zorro que estaba durmiendo en lo más profundo de su mente, después de todo, este era uno de sus sueños, el tener una gran familia.
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