Excursión al país del agua parte 3

A la noche, todo el mundo estaba en sus respectivas habitaciones descansando plácidamente, excepto Boruto, el cual estaba pensando sobre la nueva función de su sistema.

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-¿Por que el sistema no me habrá dado esta opción antes?. la pregunta fue en voz alta, dirigiéndose a nadie en particular, lo cual no esperaba ninguna respuesta, pero contrario a lo que pensaba, llego acompañada de una voz robótica y un cartel azul que desprendia pixeles blancos y azules.

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Portador, el sistema no había activado esta opción debido a que no tenía ningún enemigo al que enfrentarse, y antes de que pregunte, Sumire no es considerada un enemigo a los ojos del sistema, ya que es amiga del portador y haciéndole un favor a este mismo. Mis ojos se tornaron blancos en un instante. Supongo que al menos tienes corazón. No pude evitar pensar con algo de sarcasmo y cerrando aquella ventana con solo mi pensamiento y yéndome a dormir.

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Al día siguiente, el mizukage nos llamó a su oficina, en la cual nos esperaría con una sonrisa en el rostro. Al estar todos, el mizukage asintió y comenzó a hablar.

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-Nuestras aldeas antes eran enemigas, me atrevería a decir a un nivel mortal. El mizukage cerro los ojos con pesar y empezó a recordar aquellos viejos tiempos de guerras y conflictos políticos, todos al escucharle se sorprendieron, ya que los incultos pensaban que en esa era todavía había paz. Incluso nos llamaron la aldea de la niebla sangrienta, un apodo algo tenebroso a mi parecer. Una pequeña sonrisa apareció en su rostro, así aliviando el ambiente y nos miró fijamente a todos. Por suerte vosotros no tendréis que experimentar esa época, así que salir a fuera, y explorar mizu no kuni, y lo más importante, divertíos. Las sonrisas de los estudiantes no esperaron a faltar, rápidamente todos salieron de la oficina sino antes despedirse del mizukage como acto de respeto. Antes de que pudiera salir con mitsuki y shikadai, el mizukage me detuvo, poniendo su mano en mi hombro, y preguntándome si podíamos hablar un momento, a lo que yo asentí y mitsuki y shikadai se retiraron.

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-¿Eres boruto verdad?. Su pregunta llegó a mis oídos con un tono suave, su mirada cálida que anteriormente se la estaba dando a todos los estudiantes, ahora estaba mirando fijamente a mis ojos.

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-Si, soy yo. Mi respuesta fue breve, pero fue lo único que necesitaba el mizukage.

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-No te pareces en nada a tu padre, si no fuera por tu pelo dorado como el sol junto a tus ojos azulados y esas marcas distintivas en tu rostro, me costaría imaginar que eres hijo de aquel tozudo que conocí en antaño. Una sonrisa dentuda apareció en su rostro, mientras solo pude rascarme la cabeza con algo de nerviosismo, pero la mirada cálida del mizukage cambio a una seria y siguió hablando. He podido observarte un poco boruto, y puedo decir con certeza que tienes un gran potencial, y que tengo ganas de ver en los exámenes chunnin dentro de 8 meses. Mirándole fijamente, sabía que quería algo.

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-¿Qué es lo que necesitas de mí, mizukage?. El mizukage se rascó la cabeza con pesar y me miro con timidez.

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-¿Era tan obvio?. un asentimiento se llevó de mi parte haciendo que una gota de sudor le cayera. Tos, Tos. Aclarándose la garganta el mizukage me comenzó a contar lo que necesitaba de mí. Necesito que cuides a kagura por mí en tu estancia, presiento que pasara algo malo, pero no puedo estar pendiente de el mientras tengo que cuidar de la aldea.

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Alerta. Nueva misión establecida. El mizukage tiene sospechas sobre una posible rebeldía en su aldea, necesita que cuides de kagura por motivos no dichos, ¿qué harás?. Opción 1, mata a todos los de la aldea sin dejar a nadie con vida para evitar ninguna rebeldía. Recompensa. Una bola de la verdad de los seis caminos. Opción dos. Vigila a kagura de cerca y derrota/elimina a los rebeldes. Recompensa. Maestría con la espada. Plazo de finalización de la misión, el tiempo que estés de estancia en mizu no kuni.

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Viendo las opciones solo pude suspirar y elegir la segunda, este sistema es bastante raro, pretende que haga masacres sin sentido, pero al menos esta recompensa es más llamativa.

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Asintiendo con la cabeza, el mizukage que había estado nervioso en su interior por el silencio tan repentino, se alegró y me despido de su despacho.

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Al llegar donde todos estaban pasando el rato, kagura ya estaba por llevarlos a la academia ninja de mizu, al solo faltar yo, tuvo que esperar pacientemente y al verme, fuimos directos a la academia.

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En la academia, estaban haciendo combates sobre el agua con espadas de madera, las cuales estaban equilibradas tanto en peso como en tamaño, siendo estas, perfectas para practicar. El mizukage llego y mirándome con una sonrisa me llamo junto a kagura, el cual estaba extrañado.

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-¿Qué es lo que necesita mizukage dono?. Kagura, el que estaba algo confundido, le pregunto al mizukage, el cual nos estaba mirando con una sonrisa dentuda.

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-¿Que os parece si tenéis un combate con espadas? sería muy entretenido para tus amigos boruto, ¿no crees?. después de convencer a kagura el cual se estaba negando al principio, acepto y agarramos una espada de madera cada uno.

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Al estar en posición, todos los estudiantes de la academia de mizu no kuni estaba animando a kagura, mientras los de konoha me animaban a mí. Al estar preparados una nueva alerta apareció delante mío, haciendo que mis ojos se crisparan.

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Alerta. Misión establecida. Derrota o dale una buena batalla a kagura. Recompensa. Instinto asesino. Esta habilidad de permitirá sacar tu instinto asesino a flote, haciendo que rivales más débiles que tú o con mentalidad débil se asusten, tengan mareos y ganas de vomitar, y podría llegar a desmayarlos, pero sin un buen control, los compañeros cercanos también lo sentirán, siendo afectados por los síntomas anteriormente mencionados.

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Mirando esta alerta junto a la recompensa me sorprendí. Que raro que no sea de opción. Pensé en mi interior mientras me ponía en pose de batalla y suprimía mis sellos al 50 porciento haciendo que mi cuerpo sea más liviano. Para esto necesitaré ponerme bastante en serio.