Destinados a la masacre.

Kyla Hopkins pertenece a una familia adinerada. Es la hija menor de un hombre poderoso e influyente. Tiene dos hermanos: Tayler y Kimberly. Tayler trabaja en la empresa de su padre y su objetivo es suceder e heredar el puesto más alto de la compañía, sino el puesto será cedido a su hermana Kayla. Kimberly es la típica chica fiestera. Su padre le pide que siente cabeza con un millonario que la pretende: Gabriel Bernard. En el momento en que Gabriel Bernard ve a la menor queda flechado por sus encantos. En la boda de su hermana, ella aparece despierta en un lugar desconocido con personas desconocidas, sin sus recuerdos del pasado y con tres niños pequeños. Ella no puede entender nada, pero está aterrada. Quiere saber quiénes son esas personas, las cuales no se comportan como personas civilizadas. El hambre los enloquece y no descansarán hasta saciarla. Ella quiere descubrir por qué despertó ahí sin recuerdos, pero al mismo tiempo tendrá que arreglárselas para no ser devorada.