Advertencia: Posible contenido para adultos. ~ Sus sueños nunca se hicieron realidad pero cuenta se encuentra en un mundo paralelo al suyo, los sueños ahora podrían finalmente volverse realidad para el nuevo Thomas King. [Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, o con eventos de la vida real es pura coincidencia. Si bien aparecerán personas conocidas en este fanfic, su representación es puramente ficticia y no pretende representar sus vidas o acciones reales.]
Canción: Thinking Out Loud - Ed Sheeran.
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En el Centro comercial en Santa Mónica, California. En un lugar concurrido pero que no molestaba a nadie, se paró un joven rubio de ojos azules, con una guitarra en sus manos y mientras la afinaba llamaba la atención de las personas en el lugar, sea locales o turistas.
Algunos se detenía por curiosidad, y otros con expectativas, era usual que hubieran cantantes que quisiera hacer algo de dinero para perseguir sus sueños y los locales habituales, que eran los que más se detenían, era la primera vez que veían al chico en el lugar por lo cual tenían cierta curiosidad de que podía llegar a cantar.
El Joven cerró los ojos un breve momento, tomando una suave respiración para dejar de lado su nerviosismo. Finalmente abrió los ojos y comenzó a tocar los primeros acordes, en una suave y tranquila melodía que atrajo más la atención.
Se acercó al micrófono, y su suave voz llenó el lugar. —When your legs don't work like they used to before— Hizo un breve pausa, y tocó uno de los acordes y continúo. —And i can't sweep you off of your feet—
Hubo algunos ojos abiertos e impresiones de sorpresa cuando escucharon la voz del chico frente a ellos, algunos tomaron sus cámaras o teléfonos con cámara para grabar. Algunos más se acercaron al escuchar la voz suave y la tranquila melodía que tocaba el chico rubio.
—Will your mouth still remember the taste of my love?—Cerró los ojos un breve momento, y continúo. —Will your eyes still smile from your cheeks?— Y al abrirlos su voz tomó un poco más de fuerza que sorprendió a los oyentes. —DarlIing I will be loving you till we're seventy—
Las personas alrededor guardaron silencio. Había algo en la voz del joven que los atraía a escuchar, ya sea su suavidad o la emociones que transmitía a través de la canción. O quizás su suave melodía, sea lo que sea, atrajo mucha atención y continúo cantando transmitiendo en su voz felicidad y amor.
—And baby, my heart could still fall as hard at twenty-three~
—And I'm thinking about how
—People fall in love in mysterious ways
—Maybe just the touch of a hand
—Well, me, I fall in love with you every single day
—And I just wanna tell you I am
Las parejas presentes, no pudieron evitar sonreír mientras envolvían a su pareja en sus brazos balanceándose suavemente con la suave melodía. La canción les hacía recordar momentos buenos, cómo se conocieron, sus primeros besos, sus citas y todo aquello que los había llevado a la actualidad, el amor se convirtió en un sentimiento palpable a través de las parejas presentes.
—So honey now~— Para darle más efecto a su voz, se alejó un poco del micrófono pero su poderosa voz había logrado causar un escalofrió por sus cuerpos mientras lo miraban con asombro. —Take me into your loving arms— Mientras continúa cantando varios se acercaron a dejar algo de dinero en el estuche de su guitarra, cosa que agradeció con una pequeña sonrisa y un asentimiento de agradecimiento. —Kiss me under the light of a thousand stars—
—La canción es tan linda— Le susurró una chica a su amiga.
—¿Y su voz?— Cuestionó en un susurro a su amiga. —Es hermosa—
—Shhh... estoy grabando— Las callo su tercera amiga con su cámara en alto grande al chico lindo frente a ella.
—Place your head on my beating heart— A pesar de algunos susurros que se extendieron rápidamente entre los oyentes, la voz y la melodía era clara para todos. Y miraban con asombro la forma en que vocalizaba y forzaba su voz sin desafinar en las notas altas. —I'm thinking out loud, Maybe we found love right where we are—
Aquellos que no habían tenido suerte en el amor y en la forma de encontrar una pareja, la letra les llenó de una nueva esperanza y motivación para encontrar aquella persona especial.
El Joven sonrió suavemente, y recorrió la multitud que se acomodo a su alrededor para escucharlo cantar, feliz de haber llamado la atención puso más pasión y sentimiento en su voz para continuar cantando. —When my hair's all but gone and my memory, And the crowds don't remember my name— La letra saco algunas sonrisas divertidas, y algunas bromas a sus novios u esposos. —When my hands don't play the strings the same way, I know you will still love me the same—
—Te amo— Sintiendo cautivado con la canción, y el mundo desapareciendo a su alrededor mientras se mecía suavemente con la mujer que había captura su corazón, no podía expresarle cuanto la amaba pero la canción realmente era cómo él se sentía a su lado.
—Y yo te amo a ti— Aseguró la mujer con su corazón latiendo mientras ponía sus manos alrededor de su cuello y se acercaba para compartir en su suave beso.
—'Cause honey your soul could never grow old— Hizo una breve pausa, y agregó. —It's evergreen— Su sonrisa se ensancho al ver como las personas parecían cautivadas y algunas parejas no despejaban los ojos de su amante, incluso algunos se balanceaban con la suavidad de la melodía. —Baby, your smile's forever in my mind and memory, And I'm thinking about how—
—People fall in love in mysterious ways
—And maybe it's all part of a plan
—Well, I'll just keep on making the same~ mistakes~— La voz del joven se suavizo aun más y se volvió más fina con las dos últimas palabras, logrando cautivar a la población femenina e impresiones a la masculina. —Hoping that you'll understand—
—But baby, now!— Su voz resonó con fuerza, por unos segundos se alejo del micrófono mientras rasgaba las cuerdas de su guitarra con suavidad y volvió para continuar la canción. —Take me into your loving arms—
—Kiss me under the light of thousand stars
—Place your head on my beating heart
—I'm thinking out loud
—Maybe we found love right where we are
Todos se movieron con la suave melodía, y las cámaras apuntaban al joven que se movía cerca del micrófono mientras tocaba su guitarra con una melodiosa suavidad.
—Oh, dios. Parece un cantante profesional—
—Seria su fan si lo fuera. Su voz ya me atrapo— Respondió a su amiga, mientras veía al joven acercarse al micrófono una vez más y soltaba un suave: "La-la-la-la-la~".
Muchas chicas jóvenes con su grupo de amigas, quedaban encantadas por la voz y la suave melodía, casi sonrojadas mirando al chico guapo frente a ellas que cantaba una canción tan romántica que hacía acelerar sus corazones.
Se acercó al micrófono una vez más y continúo. —So baby, now~— Hizo una breve pausa, y prosiguió. —Take me into your loving arms, Kiss me under the light of a thousand stars—
—Oh, darling, place your head on my beating heart
—Im thinking out loud
—Maybe we found love right where we are~
—Baby, we found love right where we are~
—We found love right where we are~— La última línea terminó con suavidad y ternura que se transmitió al corazón de todos los presentes.
La sorpresa había logrado convertirse en algo más para los presentes, los recuerdos, las memorias de momentos importantes y que tenían en sus corazones, relaciones actuales y pasadas, aquellas olvidadas y aquellas que podrían surgir. La finalización de la canción, consiguió una oleada de aplausos y suaves gritos de apoyo mientras una sonrisa se reflejaba en el joven con emoción.
—Muchas gracias— Agradeció, con una pequeña inclinación educada de su parte para todas las personas que se reunieron a su alrededor y a su vez, le habían donado dinero mientras tocaba, realmente se encontraba agradecido por eso.
Había pasado una hora completa desde que tocó "Thinking Out Loud", y después se tomó el tiempo para tocar algunas más, suaves y conocidas. Terminó de guardar sus cosas, y se sentó en un asiento cercano a beber algo de agua mientras esperaba que lo vinieran a recoger.
—Las cosas han ido bien...— Murmuró para si mismo. —Aunque todavía no puedo creer que estoy en el 'pasado'...—
El que alguna vez fue Thomas King, un niño esperanzado en reencontrarse con su padre y poder conocerlo. Dicha visita había terminado en una terrible reunión, donde se vio echado de la casa de su progenitor y su familia, esto había llevado al niño a una gran tristeza que rápidamente se convirtió en depresión, con el solo deseo de morir.
Pero al mismo tiempo, Thomas Rossi moría desangrado con el único deseo de vivir.
Este nuevo Thomas había transmigrado de alguna manera misteriosa al cuerpo de Thomas King. Recordaba lo desorientado que se encontraba, en un momento estaba al borde de la muerte y luego estaba acostado en una cama en Santa Mónica con recuerdos que no eran los suyos y un nuevo entorno... pero sobre todo, siendo joven una vez más.
Teniendo solo dieciséis años en este momento, se tomó su tiempo para acostumbrarse a su nuevo cuerpo e investigar todo su nuevo entorno.
Por un momento temió que estuviera en un mundo repleto de peligros, quizá héroes y villanos por ahí o invasiones extraterrestres a las puertas de una invasión. Aunque hubiera sido interesante ver a los superhéroes, se alegro de que fuera este un mundo tan normal cómo el anterior y uno que podía explotar para conseguir la vida que había soñado en su 'primera vida'.
Había tomado una forma de denominar ambos mundos como Tierra-1 y Tierra-2, algo... friki de su parte pero era fan del multiverso de DC y sus cómics.
Estuvo un año entero de 'sabático', seguía estudiando y se le hizo muy fácil debido a que era mayor de lo que aparentaba. Esto lo ayudo a familiarizarse con sus nuevos recuerdos, su entorno social y sobre todo pensar en las futuras posibilidades de estar en el pasado.
Resultaba ser que era hijo de Nicholas King un reconocido productor de Hollywood en este nuevo mundo y Tatiana Esposito una hermosa mujer que aspiraba a ser actriz o modelo. No sabía cómo se habían conocido exactamente, y tampoco quiso investigarlo demasiado, lo que sabía era que cuando tenía dos años se mudaron con su tía y, en ese entonces, prometido. Esto debido a la dificultad de su madre a conseguir un nuevo trabajo y criarlo. A los cinco años volvieron a Argentina con sus abuelos maternos donde vivió un tiempo de más tranquilidad pero se vio abruptamente interrumpido cuando su madre había sido diagnosticado con cáncer y no pudo sobrevivir para morir cuando el tenía nueve años.
A los diez se había mudado junto a su tía Sofia y su, ahora, marido Robert Miller. A los trece había descubierto quien resultaba ser su padre y fue a visitarlo, con la esperanza de que pudieran congeniar y tener a alguien con quien compartir su dolor. Esto terminó terriblemente mal, y le causo su posterior depresión.
Finalmente su tía Sofia, a los catorce, le había entregado el diario de su madre, y se había enterado de las razones detrás de la abrupta separación de sus padres. Siendo que su padre en todo momento la había engañado y tenía una doble vida con otra mujer, con la cual ya tenía dos hijos mayores a él.
Eso había destrozado al Joven Thomas, y le había creado un resentimiento contra su padre. El nuevo Thomas era consciente por los recuerdos del viejo que su madre era un verdadero ser de luz, tragándose todo su dolor para darle una buena vida y hasta el final no dejo de sonreír en un intento de que él no sufriera su perdida.
El Viejo Thomas se había mantenido distante con la familia de su tía, incluso con su prima más joven. Finalmente cuando el nuevo Thomas tomó posesión del cuerpo a finales del 2006, se volvió más abierto con ellos, ya que le habían demostrado apoyo incondicional en sus deseos, siendo sabios consejeros, ofreciéndoles un hombro para llorar y ayudarlo a tomar lecciones para que se distrajera del dolor que tenía por todo el evento con su padre.
Ciertamente no podían reemplazar a su madre. Pero ninguno lo estaba intentando, y solo querían lo mejor para él... tanto en sus logros como en sus fallas.
Por eso el nuevo Thomas se abrió a ellos, aun teniendo el disgusto por su padre y el palpable resentimiento del viejo Thomas. Pero decidió dejar esto de lado y concentrarse en su futuro próximo, había talento de ambas almas en un solo cuerpo y con cientos de posibilidades.
Por lo cual estaba dispuesto a lograr todo eso y no fallar nuevamente en sus sueños.
Miró el dinero que había recolectado en su billetera y estaba sorprendido de haber conseguido unos 231 dólares, ya que era más que el salario mínimo actual. Sinceramente le alegró y estaba agradecido con las personas que le dejaron dinero. Tenía un pequeño trabajo de lavaplatos en el restaurante de su tía, y estaba feliz de recolectar casi el mismo dinero que cobraba desde que comenzó a trabajar.
—Sí, sin duda fue un buen día— Sonrió para si mismo.
—¡Tommy!.
Parpadeando, volteo y vio a su tía Sofia acercarse haciendo que su sonrisa crezca. Su tía era una mujer hermosa, diferente a su madre pero ambas compartían el mismo color de ojos que él había heredado. Sofia es una mujer atractiva de cabello castaño claro y ojos azules, vestía de una manera practica pero elegante cómo la dueña de un restaurante y cocinera, podía ir a ayudar en la cocina en cualquier momento.
Su restaurante se encontraba cerca de su ubicación actual pero no lo suficiente para sentirse seguro de dejar sus cosas en viajes de ida y vuelta.
—Hola— Saludó Thomas con una sonrisa, se levantó en su asiento y fue abordado por un suave abrazo maternal que duro unos segundos.
Al separarse, Sofia preguntó. —¿Cómo te fue?—
—¿No deberías saberlo?— Cuestionó Thomas con una ceja levantada con diversión. —Creo haber visto a Alison entre la multitud— Recordando haber visto a una de las camareras que trabaja en el restaurante de su tía,
—Quizá pero prefiero escucharlo de ti— Contestó Sofia con una sonrisa.
—Fue... mejor de lo que yo creí— Dijo Thomas feliz del dinero que había hecho pero sobre todo con la aceptación y los elogios que había recibido de aquellos que se acercaron a él entre canciones.
—Eso es bueno. Ven llevemos tus cosas al auto y me cuentas en el camino a casa—
Llevaron sus cosas a la camioneta de su tía, y partieron a la casa mientras charlaban tranquilamente de lo acontecido en el centro comercial. Sofia era consciente del talento de su sobrino, ella junto a su marido habían apoyado su creatividad ya que lo vieron desde el momento que fue a vivir con ellos, y lo apoyo para que tomara clases sobre actuación y canto.
Aunque tuvo miedo en su momento por la reunión con su padre, finalmente el año pasado parecía haberlo superado y se había vuelto a abrir a ellos para su felicidad. Y así mejoro mucho, siendo más abierto en la escuela y haciendo amigos nuevamente, tanto así que se unió a unos hermanos que crearon una pequeña banda, hasta el momento sin nombre.
Al llegar a la casa, y al entrar Thomas se encontró con su prima, Emilia. Una joven de cabello oscuro y ojos café claros. Tuvo una breve conversación con ella entre bromas, y luego fue a guardar su guitarra y las demás cosas que había llevado al centro para tocar un poco de música.
Se aseguró de guardar su dinero en una caja que se encontraba abajo de su cama, debajo de cables y otras cosas que tenía como repuestos.
Thomas se acostó en su cama, y miró hacia el calendario en la pared, y se fijo en que la fecha actual era 7 de Agosto del 2007.
Agarró su celular, y puso algo de música. Hace poco había salido al mercado el primer iPhone, y había gastado una parte significativa de sus ahorros en comprar, aunque en esta nueva vida había decidido mantenerse alejado lo más posible de las redes sociales, o al menos lo intentaría hasta que fuera totalmente necesarios tenerlas en el futuro para auto-promocionarse.
Quería una vida alejada de ellas, y más centrada en la música y la posibilidad de actuar en el futuro.
—¿Tom?.
—¿Mmm?— Abrió los ojos, y miró hacía la puerta donde estaba su prima. —Oye, ¿Qué pasa?—
—Te ha venido a buscar tu amigo, Jon— Le dijo Emilia. —Dice que tiene buenas noticias— Añadió.
—Oh, ya veo. Gracias, iré en un momento—
—Por cierto, ¿Cómo te fue en tu pequeño concierto?— Preguntó Emilia con curiosidad, ella era consciente de la voz para el canto que tenía su primo.
Usualmente le pedía escucharlo cuando practicaba, y le encantaba oírlo tocar y cantar.
—Me fue bien. Te dije que deberías haber ido conmigo— Respondió Thomas con una sonrisa.
Mientras lo seguía escaleras abajo, contestó. —La próxima vez iré, sabes que tenía que cuidar a Ryan— Ya que tenía un pequeño trabajo cuidando al niño de los vecinos de al lado.
Thomas asintió, sabiendo lo que ella estaba haciendo. Al salir se encontró con su amigo, Jonathan Wood de cabello oscuro y ojos verdes.
—¿Qué hay?— Saludó Thomas, y acercaron sus palmas para chocarlas y luego golpear sus dorsales, cerrando sus puños los chocaron dos veces arriba y abajo para golpear sus dorsales y abrir el puño al final.
—Tengo buenas noticias, amigo— Dijo Jon con una sonrisa emocionada.
Thomas sonrió ante su emoción. Ellos se habían conocido a través de la hermana de Jon, Jade. Quien era su compañera de clases y los presento una vez que lo había escuchado cantar por coincidencia en la escuela, y lo invito a su casa a conocer a sus hermanos ya que los tres querían formar una banda pero les faltaba un vocalista principal.
—¿Qué pasa?— Preguntó Thomas con curiosidad.
—Jason grabo algo de nuestro último ensayo y se lo enseño a un amigo, y resulta que es hijo de un hombre que dirige un club. Estaba buscando bandas novatas para dar un show y habló por nosotros— Contó Jon con emoción en su voz. —Y su padre acepto hacernos tocar, ¡¿No es genial?!—
—¡Es... genial!— Respondió Thomas, y no pudo evitar reír un poco y compartir un abrazo amistoso con Jon.
—¡Es una gran oportunidad!— Dijo Jon, y añadió. —Aunque solo podemos tocar dos canciones, ya que hay otras tres bandas de novatos que tocaron con nosotros. Pero no deja de ser increíble, es una gran oportunidad para nosotros—
—Dos son mejor que nada, Jon. ¿Cuándo se supone que vamos a tocar? Debemos prepararnos y ensayar un poco más para estar listo para nuestro primer show oficial— Cuestionó Thomas, aunque sabía que tocaban de una manera bastante buena.
Nunca estaba demás prepararse un poco más.
—Bueno... eso es lo malo. Es el sábado, y tenemos tres días para practicar un poco más— Respondió Jon algo inquieto y nervioso por la falta de tiempo.
Pero Thomas negó suavemente, sin preocupaciones. —No es mucho tiempo pero tampoco es tan malo, además venimos ensayando mucho. Estaremos bien, no te preocupes— Le aseguró con confianza.
—Dios, no puedo entender cómo estas tan tranquilo— Se cuestionó Jon con una risa nerviosa. —Me puse tan feliz y pronto apareció la ansiedad—
—Por que confió en nosotros, hombre. Nos haz escuchado, sonamos muy bien y se que lo haremos igual de bien—
Jon sonrió, y asintió con más confianza por las palabras de su amigo. —De todas formas, íbamos a reunirnos para celebrar un poco esta oportunidad y quizás empezar a practicar un poco ahora. ¿O tienes algo que hacer?—
—No tengo nada que hacer. Déjame le aviso a mi tía, y podemos ir a reunirnos con los demás—
—De acuerdo— Asintió Jon.
Mientras Thomas entraba a la casa para informarle a su tía que iría a reunirse con la banda. No pudo evitar pensar en la oportunidad que se le había puesto en el camino, ciertamente no era muy grande pero era un comienzo para ir en la dirección correcta. Aunque su sueño más importante es llegar a ser actor, la música podría ayudarle a ser conocido y además, ser músico también le agradaba.
Hace un tiempo había decido que iba a ser ambas cosas.
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¿Qué les pareció?.