Más villanos de Robbota

La batalla entre héroes y villanos estaba casi terminada cuando, de repente, en las sombras de los callejones oscuros de Central Nickol, apareció Lámina Sombra, un supuesto maestro de artes marciales con habilidades extraordinarias de camuflaje y agilidad. Su cuerpo estaba envuelto en una piel delgada que le confería la capacidad de mezclarse perfectamente con el entorno, haciéndolo invisible a los ojos no entrenados.

Lámina Sombra apareció sin previo aviso, sus afiladas cuchillas listas para cortar a cualquiera que desafiara a Robbota. Sus movimientos eran rápidos y su habilidad para camuflarse en las sombras lo convertía en un adversario formidable incluso para los héroes más experimentados.

"Tessala y sus aliados...", murmuró Lámina Sombra, su voz un susurro fantasmagórico. "No escaparán de mis cuchillas."

Junto a Lámina Sombra apareció Sombra Fantasma, una figura etérea envuelta en una niebla oscura que distorsionaba la luz a su alrededor. Su presencia era un enigma, ya que tenía la habilidad de moverse a través de las paredes y volverse intangible a cualquier ataque físico.

"Iron Clash, sigue adelante! Imai Noah y Blake Ardonius, ustedes perdedores, aléjense de ellos, ahora es nuestro turno de jugar", gritó Lámina Sombra en voz alta.

"Entonces déjame participar en este juego también", dijo Mister Imán, llegando tarde pero trayendo algo de alivio a sus compañeros luchadores.

"Sombra Fantasma...", murmuró Tessala, su voz reflejando preocupación. "Él parece ser un buen desafío y parece tener poderes genuinos. Debemos mantenernos enfocados."

Sombra Fantasma no dudó en usar sus habilidades para desorientar a los héroes. Pasaba a través de las paredes, atacaba desde ángulos inesperados y se desvanecía en la oscuridad antes de que cualquiera pudiera reaccionar. Sus ojos brillaban con malicia mientras observaba a los héroes luchar contra sus compinches.

La lluvia cesó y la noche había caído hace mucho sobre Central Nickol cuando los héroes finalmente confrontaron a Lámina Sombra y Sombra Fantasma. La batalla fue intensa y equilibrada, con los villanos mostrando una coordinación y estrategia que comenzaban a desafiar a los héroes.

Blake avanzó con sus puños de acero, lanzando golpes poderosos contra Lámina Sombra. Sin embargo, la habilidad del villano para camuflarse y evitar ataques directos lo hizo un adversario esquivo y peligroso. Blake tuvo que confiar en sus instintos y habilidades de boxeo para prever los movimientos de Lámina Sombra.

"¡Maldición, es rápido!", exclamó Blake mientras esquivaba un golpe giratorio proveniente de su dirección invisible.

Mientras tanto, Máster Imán enfrentaba a Sombra Fantasma, usando su poder magnético para intentar atraparlo. Pero el villano era demasiado rápido, desapareciendo y reapareciendo en las sombras, lanzando ataques rápidos y precisos contra Máster Imán.

"¡Maldición!", gritó Máster Imán mientras un golpe de Sombra Fantasma lo golpeaba de lado. "Necesito encontrar una manera de atraparlo."

Tessala coordinaba los esfuerzos y dio el primer paso, disparando ráfagas de energía controlada contra los villanos, tratando de debilitarlos lo suficiente como para que sus aliados pudieran neutralizarlos.

Con una ráfaga de energía dirigida hacia Lámina Sombra, la batalla comenzó nuevamente con furia, cada héroe enfrentando a su adversario designado. Máster Comando, siempre estratégico, observaba los patrones de ataque de los villanos, buscando una brecha en sus defensas. Centurión Dorado, por su parte, continuaba enfrentando a la versión metálica de Super-Ultra, amplificada y distorsionada de un tipo que nunca le cayó bien realmente, creada por Robbota para ser más poderosa e implacable. La batalla entre los dos era una prueba de fuerza y resistencia, cada uno tratando de superar al otro en una demostración de poderes sobrehumanos.

Aco Blake, con sus puños de acero, enfrentaba a Lámina Sombra. El villano usaba su agilidad y habilidad de camuflaje para evitar los poderosos golpes de Aco Blake. Cada intento de golpear con un puñetazo era frustrado por la velocidad del adversario.

"¡Necesitas ser más rápido, Blake!", gritó Tessala, mientras disparaba otra ráfaga de energía contra Sombra Fantasma, quien se volvía intangible en el último segundo.

Máster Imán usaba su poder magnético para intentar contener a Sombra Fantasma, pero la habilidad del villano para atravesar paredes y objetos sólidos hacía la tarea casi imposible. Cada vez que Máster Imán lograba atraer al villano, simplemente se desvanecía, reapareciendo en otro lugar.