webnovel

19

 

Un mes entero paso después de ese aterrador evento, Kym logro finalmente esquivar preguntas incomodas de sus amigos, y al final lograron grabar el video que tenían planeado, además de planear la idea de otros sitios. Aunque la vida parecía comenzar a volver a la normalidad para el rubio, el no pudo evitar sentir que Raira andaba preocupado, incluso tardo varios días en verse recuperado, notándose cansado y pálido por casi una semana entera en la cual no salió a ningún trabajo, en lugar de eso rondando la enorme propiedad.

 

Kym no entendía muy bien que era lo que le preocupaba, cuando intento preguntar este solo le aseguro que no tenía que preocuparse por lo pronto, solo pidiéndole en algunas ocasiones, por ejemplo, cuando tuvieron tomar prestado la camioneta de Jackes para ir a conseguir algunas cosas de construcción, y hacer un encargo de piedras para el muro. También la reja de entrada finalmente fue cambiada, por una enorme puerta de madera gruesa y con tallados increíbles con claramente la figura de Mictlantecuhtli que era bastante imponente, y no imaginaba cuando costo comprar eso.

 

-Alguien me debía de un trabajo, y es bueno con tallado en madera, acepte que en vez de dinero me pagara con este trabajo -explico el mayor mientras observaba vigilante como instalaban el portón.

 

-es increíble -murmuro suavemente Kym observando el trabajo.

 

Luego eso Kym se vio arrastrado por el mayor a varios puntos del muro donde ayudo a rellenar los huecos en el muro con las piedras que compraron, era un trabajo pesado aun con ayuda de la carretilla que también compraron, mientras que Raira con su cabello atado en un moño alto en pantalones viejos de mezclilla y camiseta de tirantes mesclaba rápidamente una especie de cemento con algunas hierbas mescladas en este le fue dando indicaciones sobre cual piedra primero y entre los dos fueron llenando los huecos o reforzando zonas, un trabajo duro, pero Kym debía admitir fue impresionante como es que el muro no se derrumbó antes con tantos huecos que tenía.

 

-Apenas aguantara, la verdad sería mejor tumbarlo todo y reconstruir, pero eso lleva más dinero, y quedaríamos muy desprotegidos en este momento -murmuro pensativo Raira observando el muro buscando más puntos débiles para reforzar.

 

- ¿desprotegidos? -repitió confuso Kym mientras se ataba mejor la pañoleta en su cabeza para alejar el sudor de sus ojos deteniéndose un momento para ver al otro. Raira agito una mano llena de cemente en su dirección como quien quisiera alejar a un mosquito molesto.

 

-olvídalo no te preocupes -repitió como siempre que intentaba sacarle más información. El menor hizo una mueca, pero no siguió insistiendo y siguieron con sus arreglos.

 

 

 

 

Esa noche sintiéndose adolorido por todo el trabajo físico de esa última semana Kym fue despertado por el gran estrepito de un trueno afuera segundo por un fuerte viento que abrió su ventana mandando a volar varias cosas. Kym callo de la cama por el susto y se apuró a ir a la ventana intentando cerrarla, pero tuvo que esquivar el protector de madera que casi le atrapa los dedos, todas las puertillas de madera de la casa estaban azotándose por la tormenta, y luego de lo que pareció una eternidad las atrapo cerrándolas primero y asegurándolas antes de cerrar también las puertas de cristal, jadeando salió ya que escuchaba las demás ventanas azotándose y a Raira corriendo por la casa para cerrarlas.

 

Pronto entre los dos fueron de ventana en ventana intentando cerrarlas para que la tormenta no fuera a romper los cristales, aun que Kym tuvo la impresión por algunos aterradores minutos que el viento parecía empezar a mecer la casa como si quisiera levantarla también.

 

Cuando Kym se estiro para cerrar la ventana grande de la sala entre los truenos, viento y pesada lluvia que lo cegaba creyó escuchar el aullido de un perro. Estirándose para atrapar la puertilla de madera se apartó los cabellos húmedos con su mano libre entornando los ojos en dirección a la entrada cuando vio extrañado dos siluetas entre la pesada lluvia. Cerro en la protección y el cristal.

 

- ¡Raira, hay alguien en el jardín! -le grito al mayor que sabía estaba arriba luchando con otra ventana, escucho la voz del mayor algo ahogado, pero estaba seguro que era una maldición lo que soltó, antes de verlo bajar las escalones de a varios escalones de golpe antes de caer en el recibidor y salir corriendo de la casa. Kym apenas alcanzo a atrapar la puerta antes de que se estrellara contra la puerta por no solo el impulso del mayor al abrirla si no también por el fuerte viento, atorándola para que no se azote corrió detrás de Raira luego de eso.

 

Para cuando lo alcanzo, Raira con el brazo de una de las personas sobre sus hombros intentaba llevarlo hacia la casa, Kym noto con preocupación que la persona estaba lastimada, estaba empapado, pero también su ropa estaba llena de lo que parecía sangre además de agua, y estaba casi totalmente inconciente, al otro lado un adolecente de unos 14 años que apenas le llegaba al hombro intentaba ayudar a llevarlo. El rubio de inmediato parto al menor indicándole que se adelantara mientras se ponía el otro brazo sobre sus hombros y ayudo más rápidamente a llevar con Raira al herido al interior de la casa.

 

-Cierra la puerta -le dijo en voz alta al menor cuando entraron a la casa, pero sin detenerse mientras rápidamente llevaron a la sala al herido, sujeto el peso de este cuando Raira lo indico ya que se apuró este a apartar la mesa de te y los sillones dejando solo el tapete del suelo, y finalmente sobre esa alfombra recostaron al herido.

 

-Kym mi maletín blanco en mi cuarto -le ordeno Raira. Y Kym corrió sin dudarlo a buscar lo pedido, además de tomar algunas toallas y una camiseta y sudadera, cuando bajo le dejo la toalla y la ropa al niño antes de pasarle la maleta a Raira, y con la otra toalla ayudo a secar al herido además de ayudar al mayor a apartar la ropa mojada.

 

-Ve y cámbiate estas empapado -le dijo Kym al niño al verlo no moverse de la entrada, este dio un respingo y se fue al baño de abajo para quitarse la ropa mojada. Este chico le daba un aire familiar, como si lo hubiera visto antes, pero de momento ignoro eso, mientras ayudaba a Raira a maniobrar al herido a quitarle las ropas mojadas y a checar sus heridas, miro horrorizado cuando el pecho y vientre quedaron al descubierto dejando ver lo que parecían 5 largas cortadas que viajaban desde su hombro derecho hasta su cadera, eran profundas y sangraban y se podía ver incluso en un área lo que parecía ser un hueso. Kym apretó los labios cuando sintió un poco de nauseas.

 

-Ve a cambiarte también Kym, checa que todo esté cerrado, creo no termine de cerrar todo arriba, y pon a hervir algo de agua -le indico Raira ya sacando varias cosas de su maleta entre estas varias gasas selladas que abrió y con cuidado comenzó a limpiar la herida tenía que inmediatamente checar que no hubiera cosas que pudieran causar infección en las heridas antes de cerrarlas.

 

Kym acepto la oportunidad de agarrar aire, salió del sitio, y fue a quitarse la ropa mojada, luego de checar que todo estuviera cerrado y asegurado. Bajo a poner una gran olla de agua a hervir, y preparo también un té caliente relajante que llevo al niño a quien encontró en el comedor mirando con temor hacia la sala, pero acepto él te que este le tendió tomando un poco, la sudadera les llegaba casi a las rodillas se veía muy pequeño sentado en la silla.

 

Una vez estuvo caliente llevo el agua caliente a la sala, así como más toallas limpias y siguió ayudando al mayor cuando este se lo pidió. Esa noche seria solo una de las noches más largas que recordaría una vez mirara atrás.

Bab berikutnya