32. Me gusta ajustado

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—Después de que Jake eyaculara otra vez dentro de Riri, follándola mientras cargaba su menudo cuerpo, fue el turno de Diana.

Los ojos hechizantes habían hecho desaparecer los odiosos pensamientos de Diana hacia él. Ahora parecía todo lo contrario a su yo anterior.

Con las manos extendidas sobre el respaldo, Jake estaba sentado en el sofá con su pene erecto apuntando al techo. Riri yacía en una cama mientras Diana se paraba frente a Jake.

En comparación con la chica follada, esta mujer tenía proporciones más definidas. Forjada por diversas batallas, Diana tenía un cuerpo en forma. Su tono de piel era más oscuro que el de Riri y ciertamente parecía una guerrera.

Sin embargo, a pesar de ser así, tenía rasgos femeninos y atributos maravillosos. Jake podía entender por qué aquel mago se interesaba en ella. La estética de Diana era encantadora. Al acercarse, él tocó su vientre, sintiendo sus no tan visibles abdominales.

Con unas vacías iris marrones, Diana sonrió a Jake. Presionó sus palmas en su pecho y se sentó en su regazo. Agarró su pene y lo alineó con su orificio. No tan nerviosa, Diana no era virgen. Si no fuera una aventurera, ya habría tenido una familia, considerando que tenía 27 años.

—Ah~ —gimió—. Abrazándolo, comenzó a cabalgar sobre el grueso miembro del demonio.

Jake podía sentir cuán elásticas eran sus nalgas cuando se presionaban sobre su regazo. Él podía sentir el calor de su entrepierna, la fricción creada entre sus muslos y la dureza de sus pezones.

—Ah~ Annhh~ Ah~

—¡Phat! Phah... Phah! ¡Phat!

Ella hizo todo el trabajo en esa posición de vaquera mientras Jake se relajaba sentado en el sofá. Con el paso del tiempo, ella inclinaba más y más su cintura, adoptando una posición realmente sexy.

Jake agarró sus rebotantes nalgas y empujó hacia arriba y hacia abajo, martillando su coño mientras hacía sonidos crujientes.

Si Riri era linda, Diana entraba en la categoría de caliente. Tener sexo con una mujer totalmente madura después de follar a Riri se sentía bien. Sin embargo, Jake sentía que algo faltaba.

—Aaannnhh!

—No estás gimiendo mucho —Jake la dedeó en el ano mientras bombeaba.

—Hah... hah... —Diana jadeaba mientras él iba más y más profundo.

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—Jake acarició su curvilíneo cader y sentía todo más resbaladizo por dentro. Su vagina acomodaba su pene con poca tensión, y Diana duraba mucho más que Riri antes de correrse.

—Sin embargo, Jake no estaba satisfecho, así que se salió y astutamente penetró el orificio superior.

—¡Annhhh~ Ese es el lugar equivocado!

—No, este es el lugar correcto. ¡Me gusta apretado! —Sonrió y se levantó mientras la cargaba.

—Riri vio cómo el demonio doblaba las caderas de Diana y empujaba su monstruosa cosa en su ano.

—Pah! ¡Pahh! Pah!

—Los testículos de Jake golpearon el coño de Diana mientras hacía que su trasero temblara. Él podía sentir la estrechez similar al coñito de Riri. Ahora esto era lo que quería.

—¡Annhh! ¡Annhh! No seas tan brusco... ¡Aaaannnh!

—Jake la llevó a una cama y se tumbó sobre ella, martillándole el culo mientras le daba por el ano. Diana nunca había pensado en algo así. Nunca lo había probado. Sin embargo, sintió una profunda necesidad primaria de quedarse allí y dejar que Jake destrozara su ano.

—Maldita sea... esto se siente diferente... —Jake agarró las muñecas de Diana y movió su abdomen más y más rápido.

—Mirando abajo, podía ver su pene estirando su anteriormente pequeño agujero.

—¡Annh~ Annh~ —Diana gimió mientras Jake empezó a frotar su coño. Sintiendo sus lomos golpeándole su suave trasero, sintió su cuerpo hormiguear.

—¡Se siente bien! —Empezó a disfrutar de este placer prohibido.

—La cama crujía y se movía hacia adelante y hacia atrás. Las caderas de Jake se movían por su cuenta y él se corrió directamente en su culo.

—¡Aaannnh! —Diana también se corrió simultáneamente.

—[¡Ding! Has cometido un pecado lujurioso. ¡Ganas 1500 Puntos Malignos!]

—En la cámara, las voces y aplausos resonaban una y otra vez. Las dos mujeres gemían repetidamente mientras el miembro de placer de Jake devastaba sus agujeros.

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—A la entrada de la mazmorra, Alex miró la oscura escalera de caracol y se dio la vuelta.

Las cosas que el demonio le hizo recitar antes de comer el gusano dejaron a Alex sin escapatoria para traer gente poderosa.

No podía ni ver a sus compañeros de equipo, pero no tenía más opción que hacer la tarea del demonio. Esa era su única esperanza para salvar a sus amigos.

Lo que haría podría parecer egoísta. Alex estaba esencialmente tratando de sacrificar aventureros inocentes a cambio de la vida de sus compañeros de equipo.

Él lo sabía y aún así eligió esa opción. Un hombre debe de ser despiadado a veces.

Con un destello frío en sus ojos, Alex dejó la cueva y se dirigió hacia un pueblo cercano. No sabía que las mismas chicas que pretendía salvar estaban siendo folladas una por una.

—Aproximadamente dos horas después, Jake se abotonaba la camisa mientras estaba parado en el piso de la cámara.

Abrazando su cuerpo inferior, Riri le estaba chupando sumisamente su pene. Sin embargo, no le cabía del todo en su pequeña boca y tenía que sacarlo de vez en cuando.

'Hmm.' Después de terminar de abotonarse la camisa, Jake agarró el cabello de Riri y le hizo dos coletas con sus manos.

Luego, movió sus caderas con desgana y folló su linda cara.

Su gorda polla estiraba sus suaves y húmedos labios al límite. Al mirar su rostro, podía ver su resbaladizo miembro marrón entrando y saliendo de su boca.

—¡Mmffhh...! Slurp... ¡Slurp...!

De repente, el pene de Jake latió y él se corrió en su garganta. Con tal carnoso miembro tapando su boca, Riri no tuvo más opción que tragarse todo.

[¡Ding! Has cometido un pecado lujurioso. ¡Ganas 74 Puntos Malignos!]

Jake disparó largos chorros de espeso semen blanco en su boca y la hizo chupar un poco más antes de parar.

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—Ve a limpiarte —se subió los pantalones y se vistió.

Algún tiempo después, Jake estaba sentado solo en su cámara personal mientras comía una pierna de pollo.

—Lo encontré.

Estaba desplazándose por la tienda del sistema, buscando un pergamino de habilidad que había visto anteriormente. En ese momento, era demasiado caro. ¡Pero ahora, esta habilidad parecía que estaba hecha para él!

[Habilidad: Corrupción]

[Nivel: Único (Medio)]

[Descripción: Mientras los atributos mentales del usuario, es decir, Inteligencia y Voluntad, sean más altos, corromperá la mente y el cuerpo del individuo en el que se use. Los poderes y la mentalidad de esa persona se convertirán, torciéndose para pasar a ser de una alineación maligna. El individuo permanentemente corrompido estará subyugado al usuario. Sin embargo, las cosas podrían revertirse si los atributos mentales del usuario son más débiles.]

[Coste: 3880 Puntos Malignos]

A pesar del riesgo que tenía y el precio ridículamente alto, Jake compró la habilidad de inmediato.

Anteriormente, había logrado corromper a Perry. Pero eso fue porque todo sobre ella cumplía con los requisitos para una corrupción natural.

[¡Ding! Felicidades, has aprendido una nueva habilidad {Corrupción}.]

Con esta habilidad, sin embargo, no importaba a quién apuntara. ¡Mientras su mente fuera superior, podría corromperlos!

—Je, realmente quiero follar con un grupo de monjas corrompidas... —Jake pensó. Sería bastante divertido, ¿no es así?

En ese momento, Perry, Yunna y Erin entraron en sus cámaras. Comenzaron a desplegar un gran mapa sobre la mesa rectangular en el centro de su habitación. Después de haber terminado, se sentaron en sus respectivas sillas y miraron hacia él.

Vin llegó un poco después y nerviosamente se colocó al lado de Jake. Cuando los demás la miraban, rápidamente se sentó en su silla y ocupó sus ojos en la mesa.

—Ella es nueva aquí, así que no sean demasiado insistentes. Muéstrale la mazmorra más tarde —dijo Jake.

Luego miró el pergamino en el que se mencionaban varias ubicaciones y se recostó en su silla. —Comencemos la reunión.