webnovel

¿Quién eres?

—¡Oh! Entonces, eso es bueno. Aquí estamos seguros —dijo Anastasia aliviada, dejándose caer. Miró la chimenea y sintió el calor del fuego calentando su piel helada.

—No, querida. Necesito encontrar la forma de salir de aquí lo antes posible —respondió Íleo mientras sacaba las espinas del pescado y le pasaba un pedazo.

—¿Por qué Al? —preguntó ella frunciendo el ceño al tomar el pedazo de su mano. El salmón sabía bien.

Bab Terkunci

Dukung penulis dan penerjemah favorit Anda di webnovel.com

Bab berikutnya