Osiris, el dios de la muerte

Tercera persona POV:

Nos situamos en las afueras de la ciudad de Esparta, en donde encontramos a unos 20 minutos un bosque frondoso, que expulsaba un aroma a naturaleza, dando a entender que la primavera ya había empezado, pero el bosque también inspira un aura de peligro, la cual, intimidaba a muchos de los aventureros que pasan por sus inmediaciones.

No obstante, parece ser que no a todos les afecta esta sensación de peligro, dado que en los adentros del bosque ,hayamos a un joven que se encuentra sobre el cadáver de un oso.

Ese joven aparenta tener 10 años, pelo negro, una estatura de 1,50 metros (4,9 ft), vestido con la típica vestimenta de un hombre espartano, un simple Chito, con unas sandalias. No obstante, lo que más llamaba la atención de este joven, eran su ojos color violeta. 

El joven se situaba rodeado de lo que parecían capullos negros, mientras él propio joven se sentaba tranquilamente sobre el cadáver del oso, y sacaba de lo que parecía ser su sombre, una guadaña negra.

Deo POV

En estos últimos dos años han sido lo que muchos llamarían entretenidos y peligrosos. Dado que desde que volví de mi primera caza, he conseguido que Astoria y Deacon, me permitiesen salir a cazar una vez por semana. El lado negativo es que a partir de ese día, deje de salir con Deacon a cazar, por el motivo, de que Deacon no conoce mi verdadera fuerza, y según él, solo iríamos a cazar conejos. Por lo que me negué rotundamente, con la excusa que todo joven les pone a sus padres. Que ya no era un niño que necesitaba que me cuidasen.

He de admitir, que aceptaron muy rápido mi motivo, aunque Astoria solo pudo a regañadientes. Sabía que en la época actual, los niños eran obligados a madurar más rápido de lo que era normal en el futuro. De ahí que en dos años, tenga que presentarme a las pruebas de los espartano. 

No obstante, durante estos años, he conseguido controlar y masterizar, sobre las habilidades que obtuve en la caza de hace dos años, que son tres. 

La primera y más fácil es la habilidad de intercambiarme con una de mis sombras, pero el rango no es muy largo. La distancia máxima era de 100 metros pero tras entrenarla estos años, ha llegado a unos impresionantes 7 kilómetros

El poder de poder moldear mi sombras para que tomen la forma del arma que desee. Por supuesto, nada más descubrir lo que podía, empecé a crear varias armas para ver con cual notaba mayor afinidad, empecé con el arco que era mi arma principal y noté que no estaba mal, pero tampoco me convencía. La siguiente, fue el cuchillo, aunque tenía un poco más de afinidad, no me terminaba de convencer.

Este proceso me llevó varias horas, debido a la creación y que tenía que descansar debido al consumo de manar de crear tantas armas y la falta de control y maestría sobre la habilidad. 

Y por fin, llegue a mi arma actual, una guadaña. En cuanto la sostuve en mis manos, pude notar que mi sincronía. No pude evitar sonreír tras ver el arma que me iba a acompañar durante el resto de mi vida. Obviamente también entrenaría con otras armas, pero mi principal enfoque estaría en la guadaña. 

Aunque cuando cree la guadaña no aparentaba tener buena calidad, no me preocupe tanto como esperaba, debido que al ser parte de mi sombra, se iría reforzando y ganando poder cuanto más absorbiera.

Mi segunda habilidad, que es la que más tarde en perfeccionar y bajar su consumo, era la creación de un área, donde el poder de mi ejercito aumentaba un 50% en un rango de 50 metros. Una habilidad que estaba rota, pero también constaba mucho mantenerla, dado que gastaba mana por cada segundo que la actividad estuviese activa. 

Tras descubrir el gran desgaste de mana, solo pude suspirar, dado que la única manera de ganar mana es por el paso del tiempo. 

Por supuesto, durante estos años, mis habilidades han aumentado al igual que mis sombras. 

Actualmente, mi ejercito consistía en 300 de conejos que evolucionaron para obtener aumentos de poder y un pequeño cuerno, que puse bajo el control de mi general Ruby, que antiguamente era conocido como Aston, hasta que volvió a evolucionar donde aparte de incremento de poder, le crecieron un par de cuernos parecidos a los de un ciervo en la cabeza, pudo hablar por fin, y cuando escuché su voz femenina, no tuve más remedio que cambiarle el nombre. 

Luego tenemos 100 serpientes, que evolucionaron para aumentar su tamaño y poder, llegando algunas a medir más de 3 metros. Obviamente los puse bajo el control de Nag, el cual ha aumentado de tamaño.

Luego tenemos 50 lobos que evolucionaron para aumentar su tamaño y poder, que los puse bajo Bolt.

Tras los lobos, tenemos unos 25 jabalís que son perfectos tanques dado que cada evolución se centras en fuerza y defensa. Su general era Pumba.

Por último, tenemos las ultimas adiciones, 10 osos, que aún no han podido evolucionar, y su general es un oso que ha tenido su primera gran evolución, ganando una fuerza y defensa enorme. Obtuvo para mi sorpresa, un pequeño control sobre el elemento de planta. Aunque estuve tentado a llamar a mi nuevo general Yogi, Nag y Ruby me convencieron para buscar otro, y al final decidí llamarlo Udyr. 

Gracias a todas las cazas y animales que he cazado, Astoria y Deacon pudieron ganar bastante dinero, mientras que yo también empecé a ahorra parte de lo que ganaba de esos animales. 

Nunca olvidare la cara de Deacon cuando le enseñe el cadáver de uno de los osos. 

Nunca había visto una mandíbula bajar tanto.

' Mi señor, estamos todos listos'

Tras escuchar la voz de Ruby, me di la vuelta para ver a mi ejército. 

"Perfecto, preparaos porque hay que ir recogiendo y volviendo ya. Antes de que se haga más tarde."

Atrás de mí, se podía ver como el sol se iba poniendo, dando a entender que se acercaba la noche.

"Entendido"

"Así será "

Respondieron Nag y Ruby.

Pasaron unos minutos, y por fin llegue a la puerta de la ciudad.

Tengo que admitir, que una de las cosas que aun no puedo aceptar de esta época, es el uso de esclavos. ¿Y por qué menciono esto?

Porque, nada mas entrar, pude ver lo que parecía un carruaje que era una jaula portátil, con todo tipos de personas dentro. Mujeres, hombres y niños. Dentro habían 25 esclavos.

Como es lógico, no habían ancianos, debido a que nadie los querría como esclavos. 

Cuanto mas me acercaba a la jaula, que se encontraba en el camino hacia mi casa, pude ver las miradas de todos las personas que se encontraban en su interior. Esa miradas solo inspiraban un sentimiento. Pura desesperación.

'Mi señor, solo necesita decirlo, y nos ocuparemos de toda esta ciudad'

No pude evitar reflexionar si esto era posible, tras escuchar las palabras de Nag. Aunque se que mi poder esta muy por encima de mi edad, nunca he podido comprobar que tan fuerte soy comparado con un espartano. Y mucho menos aun comparado con toda una ciudad de espartanos.

'Aun no es el momento Nag, pero no te preocupes. Ya llegara.'

'Como desees' 

'Pero ponles una sombra de conejo a cada uno Ruby'

'Entendido'

Y sin que nadie se diera cuenta, 25 sobras salieron de la mía y se dirigieron hacia la jaula.

Dejando el carruaje detrás, por fin llegue a mi casa. Que tras haber ganado un poco de dinero de los animales que les mostraba de mi cacería a Astoria y Deacon. La casa había mejorado un poco, pero no demasiado.

Aunque no me importaba en lo absoluto, dado que en el interior, estaban las personas que podía considerar familia. 

'Mi señor, ¿no ha pensado en decirles a sus padres sobre sus poderes?'

'Aun no Ruby, quiero que vivan tan tranquilamente como puedan hasta que no haya otra opción que mostrárselos.'

Y tras terminar la conversación con Ruby, entre con el saco en la mano. Justo al entrar, se encontraba Astoria con los brazos entrecruzados sobre su pecho.

"Por fin has llegado Deo, un poco más y Deacon tendría que haber salido a buscarte"

"Ya te he dicho que no pasaba nada cariño. Deo es un chico fuerte"

"Mmmmm?"

Astoria se giro hacia Deacon, y tras echarle una mirada que hasta el mismísimo Thanos temería le pregunto:

"¿Has dicho algo cariño?"

"No, nada en absoluto. Justo le iba a decir a Deo, lo preocupados que estábamos y que iba a salir a buscarlo si tardaba un poco más en venir"

"Ya veo"

Para los que luego digan que los hombres espartanos son los mas fuertes. Tendrían que ver esta escena, y darse cuenta de que no hay nada mas peligroso que una mujer espartana enfadada.

"Perdón por la tardanza, pero me entretuve en la caza. No volverá a pasar"

"Muy bien, que así sea. Deja la bolsa sobre la mesa para que tu padre pueda pelarlos y siéntate que la cena esta a punto de estar lista"

No pude evitar sonreír, aunque soy un niño en exterior, en el interior soy un alma de un hombre de 23 años. Pero en mi anterior vida, nunca pude tener una experiencia como esta, debido a que mis padres siempre estaban demasiados ocupados con el trabajo para poder estar en casa.

'No esta tan mal comportarse como un niño de vez en cuando'

"Deo, ¿vienes o qué?"

"Voy mamá" 

Esa noche, aunque la cena eran simples habas y cebada. No pude sentirme lleno viendo el ambiente en el que me encontraba. Y tras terminar la cena me dispuse a irme a descansar.

Una vez tumbado sobre la cama mientras miraba las estrellas que se veían desde mi pequeña ventana.

'Esto es la buena vida'

Y cerré los ojos para disponerme a dormir.

No se cuanto tiempo paso, pero me desperté, tras escuchar gritos desde fuera. 

Me levanté de la cama pegando un pequeño salto, y pude ver como varios civiles entraban en pánico mientras que grupos de espartanos gritaban y se dirigían hacia la puerta de la ciudad.

Sali de mi habitación para encontrarme a Astoria sentada en una silla.

"¿Qué está pasando mamá? 

"Ah? Estas despierto Deo, nada no te preocupes y vuelve a dormir."

"Pero mamá"

"Te he dicho que no te preocupes Deo, solo vete a dormir y mañana estará todo mejor."

"Entiendo, buenas noches"

Cuando cerré la puerta de mi habitación y ver que no había nada extraño convoqué a Nag, que se hizo más pequeño para poder caber y a Ruby.

"¿Y bien, que dicen las sombras que están colocadas por toda la ciudad?"

"Según parece ser mi señor, un gran número de animales extraños, se encuentran en camino a la ciudad"

"¿Todo este caos por unos animales? No tiene sentido"

"Al parecer, estos animales tienen todos un tamaño y fuerza sobrenatural. Y según dicen algunos, uno de esos animales puede escupir fuego y volar."

"¿Un animal que escupe fuego y vuela? ¿Un dragón?"

"Aun no le han puesto nombre al animal, pero cuadra con la descripción, aunque no muchos se creen que ese animal exista. Pero les preocupa el gran numero de animales que se acerca y esta estimado que lleguen en unas pocas horas."

Según me acuerdo, nada de esto sucedió en la historia, así que porque esta ocurriendo. El universo Marvel se supone que no ocurre hasta la segunda guerra mundial o época egipcia si cuentas con Apocalipsis. 

¿Qué me estoy saltando? Solo Asgard estuvo desde el inicio…. Mierda, los Eternals.

*Booooooom*

Se escucho una gran explosión en lo lejos. 

"Ya ha comenzado la batalla mi señor"

"Ya lo he escuchado Nag"

Si son los Eternals, estos animales serían los desviantes. Normalmente los Eternals cazarían y matarían a los Desviantes antes de que esto sucediera. 

Por lo que me deja con posibilidades, los Eternals saben que iba a suceder esto y están en camino o lo saben pero se encuentran en otro lugar y nos han abandonado.

Estuve debatiendo entre si participar en la batalla en caso de que fuese la segunda posibilidad. 

'Si participo, los Eternals sabrán que alguien mas con poderes capaz de cazar desviantes y sospecharán de mí.'

Decidí que necesitaría ver la situación de la batalla para poder decidir mejor, pero antes, moldee mis sombras para hacer una mascara que tapara mi cara y una gabardina negra con capucha que también servía como armadura ligera.

'Exchange'

Me intercambien de lugar con una de mis sombras que actualmente se encontraba en lo alto de la muralla en un lugar sin nadie cercano.

Tras aparecer, pude escuchar y ver la batalla que estaba teniendo lugar justo frente a mis ojos.

Miles de desviantes contra miles de espartanos. Aunque parecía que la batalla estaba igualada, esto no era así, ya que para un desviante, se necesitaban de 3 a 5 espartanos.

"Si esto continua así, perderemos la batalla."

"Eso parece mi señor, pero esto cambiaria si entrásemos nosotros."

"Aun no es el momento Nag, si te fijas bien en el campo de batalla, puedes ver que falta algo por aparecer."

"No entiendo mi señor, ¿Qué falta por aparecer?"

"El dragón. Si el dragón no ha aparecido, significa que la batalla no ha entrado aun en su punto crítico, lo que le da aun un margen de tiempo a los Eternals a aparecer"

"Ya veo"

Tercera persona POV

Y así continuo la batalla, pero daba igual como lo vieses, los espartanos estaban perdiendo. 

Pero todo cambio, cuando de repente la puerta de la ciudad se abrió y salieron un nuevo grupo de guerreros.

Deo no los vio, ya que estaba intentando localizar al general enemigo. El dragón.

El nuevo grupo de guerreros, no estaba solo conformado por espartanos, sino que también había hombres que no habían superado el entrenamiento o jóvenes que estaban en ello.

Este nuevo grupo fue como un trago de agua en un día caluroso para los espartanos, ya que por fin pudieron conseguir una aparente ventaja.

Que no duro mucho, ya que el enemigo parecía haber predicho este movimiento y al ver al nuevo grupo de humanos, un grupo mas grande de desviantes se unieron a la batalla. 

Y fue ahí cuando comenzó la masacre.

Los humanos se vieron abrumados por el numero de desviantes y no pudieron hacer nada mas que luchar hasta la muerte, ya que tras ellos se encontraban sus familias.

Nag POV: 

Los humanos iban perdiendo, y tal y como había predicho mi señor, el dragón estaba escondido controlando las tropas.

La batalla parecía perdida y podía ver como mi señor se iba impacientando con el grupo que él llamaba Eternals.

De repente, recibí noticias de una de las sombras serpientes que mi señor había mandado a patrullar la batalla.

No pude evitar sorprenderme al escuchar la actualización de la batalla.

"Mi señor, ha habido actualizaciones en la batalla"

"Ya lo he visto Nag."

"Ya veo, pero parece ser que en los refuerzos que acaban de entrar en batalla, se encuentra su padre."

Pude notar como algo se quebraba en el interior de mi señor y como su aura iba aumentando y haciéndose visible.

Nunca había sentido esta sensación de mi señor. Era pura ira.

Mi señor se dio la vuelta y me miro con esos ojos violetas que a muchos les había llamado la atención por su belleza. Esos ojos que actualmente se encontraban emanando la sensación de pura ira.

"Repite lentamente tus palabras Nag y mas vale que sean ciertas"

"Como desee mi señor, una de las sombras bajo mi mando, me acaba de informar que su padre acaba de entrar en batalla."

Mi señor siguió mirándome en silencio pero pude ver como su aura se iba desbordando cada vez más.

"Mis generales."

Tras decir eso, los demás generales bajo mi señor aparecieron a su alrededor, mientras todos nos arrodillábamos esperando las órdenes.

"Preparaos, por que hoy es el día, que el dios de la muerte hace su entrada. Y quiero que todos los enemigos que veáis sean aniquilados. Hoy Osiris el dios de la muerte decide quien vive y quien muere.

Osiris era el nombre que había decidido mi señor para hacerse conocer al mundo y pronto todo el mundo sabrá quien es el que domina sobre la vida y la muerte.

"Vamos"