La Secta del Rey del Sol

En la Muralla del Este de la Ciudad del Norte Azure.

¡La batalla había estallado otra vez!

Todos los cultivadores humanos estaban extremadamente exhaustos, este también era el caso de los cultivadores de los Tres Continentes.

Todos los nativos de este mundo atacaban siempre con todas sus fuerzas para poder salir rápidamente de esta horrible situación.

Solo matando al enemigo podrían recuperar su paz y tranquilidad...

La batalla entre ambos bandos se mantuvo activa durante cinco días y cuatro noches.

En estos cinco días y cuatro noches, los cultivadores de la Ciudad del Norte Azure controlaron la enorme y antigua formación para abrir brechas en diferentes puntos y direcciones de la ciudad, turnandose entre ellos, cultivadores de las diferentes murallas, Este, Oeste, Norte y Sur para retener al enemigo mientras los cultivadores de las otras tres murallas descansaban y recuperaban sus fuerzas.

En este día, los cultivadores de la muralla del Este se encontraban descansando al igual que los cultivadores de las murallas del Norte y Oeste.

En el interior de la Muralla del Este.

"Mierda... simplemente no tienen fin... esos malditos demonios son imparables... ni siquiera parecen ser seres vivos..."

"No... sería más exacto decir que lo son, sin embargo, parecen estar siendo controlados o manipulados e impulsados desenfrenadamente por alguien..." Suspiro y se quejo un cultivador de los Tres Continentes.

"Títeres..."

"¿Hm?" Al escuchar las palabras que susuraba Feng Yang, casi todos los cultivadores de los Tres Continentes dirigieron su mirada hacia él.

"Títeres... desde mi punto de vista, cada que lucho y asesino a un demonio. Es como si luchara y asesinara a un simple títere, algo vivo lo cual no es consciente de sus ataques o de siquiera haber perdido la vida..." Suspiro Feng Yang mientras reflexionaba.

Había matado al enemigo incesantemente en el campo de batalla, pero nada absolutamente nada había cambiado.

La situación no solo no mejoraba, sino que incluso parecía estar empeorando...

Los demonios que antes morían una vez que los mataban, como debería de ser. Ahora incluso si eran decapitados, podían atacar una o varías decenas de veces más antes de que se quedarán completamente quietos, como títeres los cuales se habían roto o como sí los "hilos" con los que los controlaban, hubieran sido cortados, cortando la conexión entre el manipulador y manipulado.

"Eso no es posible... estas insinuando de cierta forma que podría haber alguien como un Titiritero... ¿Quién podría controlar a tantos demonios...? Incluso si alguien tuviera tal poder... difínitivamente, podría asegurar que no estaría solo en el Reino Refinamiento de Qi." Dijo Tuoba Baixian.

"Yo no he dicho exactamente eso..." Sonrió y respondió Feng Yang.

Naturalmente él sabía en su corazón, que aunque no lo dijo específicamente eso era lo que realmente creía, pero como quería saber las opiniones de los demás, no lo dijo tan directamente...

"Dejando de lado eso, si hubiera una entidad o persona que controlará a todo ese ejército de demonios, donde estaría el o ella en este momento...?" Pregunto Yang Ying Feng con curiosidad.

"La parte más profunda del Sur, en la Secta del Rey del Sol, donde comenzó la rebelión de los demonios y desde donde corrían los demonios... tiene la mas alta probabilidad de ser una guarida... por lo que es muy posible que en ese lugar donde todo comenzó, se encuentre dicha persona... si es que en verdad existe..." Dijo Tuoba Heixian.

"¿Cómo podremos saber si existe o no tal ser si ni siquiera lo intentamos?" Resoplo Yang Ying Feng, podía ver que ninguno de los dos hermanos Tuoba creía en la posibilidad de que en verdad existiera dicho ser.

Naturalmente no le importaba sus pensamientos, pero al ser los dos más fuertes el resto naturalmente compartiría su pensamiento, lo que llevaría a que ninguno realmente creyera que existiera dicho ser.

Pensando en ello, dirigió su mirada hacia un joven que estaba en silencio desde hace unos momentos, como si está conversación hubiera dejado de estar relacionada con él.

Al ver su expresion, Yang Ying Feng confirmó en su corazón que este tipo compartía su pensamiento de que en verdad existía una entidad que manipulaba a los demonios, pero de hecho esto no era extraño.

Después de todo, él fue quien sugirió indirectamente al principio que había un ser que controlaba a los demonios como títeres...

Al sentir la mirada de Yang Ying Feng en él, Feng Yang lo miro y sonrió.

Al ver su sonrisa Yang Ying Feng se sintió bastante incomodó en su corazón y justo cuando estaba por hablar, vio los secos labios de Feng Yang moverse.

"Hermano mayor Heixian, ¿la Secta del Rey del Sol no sería la zona más peligrosa para nosotros, los humanos? Después de todo, se podría decir que es la guarida de los demonios y seguramente los demonios en dicho lugar no son pocos..." Dijo Feng Yang con un tono algo preocupado.

Al escuchar sus palabras Tuoba Heixian lo miro y respondió: "Creo que el Hermano menor Shi ha olvidado que todos los demonios del Reino de la Nube Ascendente están atacando incesantemente la Ciudad del Norte Azure..."

Al escuchar esto Feng Yang abrió bastante sus ojos con sorpresa, como si realmente se hubiera olvidado y sorprendido.

"Heh... nose si es más estúpido o ignorante de tu parte el siquiera pensar que el llamado manipulador no tendría a demonios que protejan su propia guarida..." Se burló Yang Ying Feng con desdén.

Antes de que Tuoba Heixian respondiera, alguien más respondió por él...

"Jajaja... creo que es mucho más estúpido el pensar que existe un ser capaz de controlar a tantos demonios." Respondió Tuoba Baixian con el mismo desdén.

"Tsk... no solo estas insinuando indirectamente que tu propio hermano mayor él cual en cierta forma comparte mi mismo opinión, es estúpido..."

"Sino que incluso niegas la existencia de aquel que podríamos matar y completar rápidamente nuestra misión... realmente eres alguien que solo trae negatividad para nuestro equipo y misión..." Resoplo Yang Ying Feng mientras se ponía de pie y desenvainaba su larga espada, claramente no tenía buenas intenciones hacia Tuoba Baixian.

Al ver sus acciones y escuchar sus palabras, el rostro de Tuoba Baixian se oscureció...

"Compañero daoista Yang, debería de sentarse y hablar las cosas en lugar de tratar de resolver todo luchando..." Sugirió Feng Yang mientras sonreía extrañamente al mirar a Yang Ying Feng.

Aunque Yang Ying Feng no le temía a los hermanos Tuoba, se sentía bastante incómodo ante el desconocido y misterioso Feng Yang. Por lo que al ver su extraña sonrisa y escuchar sus aparentes tranquilas palabras, el desconfiado Yang Ying Feng no tuvo más opción que obedecer de mala gana y sentarse.

La razón de que actuará tan obedientemente era por la extraña sensación de desconfianza en su corazón... sentía que si atacaba al misterioso Feng Yang no sucedería nada bueno.

Al ver esto, Tuoba Heixian dirigió su mirada de apreció y agradecimiento hacia Feng Yang, aunque no le temían a Yang Ying Feng, si éste quisiera luchar solo dañaría los intereses de todos y posiblemente arruinaría la misión.

Esto era algo que ninguno de los cultivadores de los Tres Continentes quería que sucediera...

Feng Yang fingio no ver la mirada agradecida de Tuoba Heixian y dijo; "Como todos ya sabrán, la Ciudad del Norte Azure no puede ser protegida. Según el impulso del ejército de demonios, incluso si la Ciudad del Norte Azure se resiste con todas sus fuerzas sin descanso, no aguantara por más de otros cinco días. Por lo que naturalmente cuando llegue el momento, sino queremos compartir su destino y ser erradicados por los demonios, debemos dejar la Ciudad del Norte Azure y resolver el problema desde su origen para completar la misión..."

"¿Crees que será suficiente con nosotros, treinta cultivadores?" Pregunto Tuoba Baixian.

"Naturalmente no creo que lo sea... pero es lo que tenemos y debemos de trabajar en equipo para completar la misión, el mismo sistema lo dijo; esta es una misión que debe de realizarse en equipo..." Respondió Tuoba Heixian.

Feng Yang asintió ante las palabras de Tuoba Heixian, expresando estar de acuerdo con sus palabras.

"Suspiro, como todos estamos aquí y la batalla está por comenzar dentro de poco, es mejor escabullirse ahora y dejar la Ciudad del Norte Azure cuanto antes..." Dijo Feng Yang mientras miraba a todos los cultivadores de los Tres Continentes que estaban en una esquina de la Muralla del Este, alejados de todo el ejército de la Muralla del Este.

Nadie se opuso.

Por lo que luego de unos momentos, de uno en uno fueron escabulliendose y desapareciendo todos los cultivadores de los Tres Continentes.

Naturalmente no podían marcharse todos a la vez, eso sería muy obvio y podrían ser rápidamente descubiertos, por lo que era mejor de ésta forma.

Incluso si descubrían que habían desertado, les tomaría bastante tiempo a los cultivadores para darse cuenta, después de todo, todos en la Muralla del Este estaban enfocados en recuperarse.

...

Unas tres horas después, los veintiséis cultivadores de los Tres Continentes, liderados por; Tuoba Heixian, Tuoba Baixian, Yang Ying Feng y Feng Yang, dejaron silenciosamente la Ciudad del Norte Azure por la brecha de turno en la barrera.

A estas alturas, en la Ciudad del Norte Azure ya se debería de haber descubierto que el equipo creado y liderado por los señores Tuoba, había desertado del ejército del Este...

Mientras se dirigian hacia su destino, la Secta del Rey del Sol, el equipo de los cultivadores de los Tres Continentes se encontró con bastantes demonios, los cuales fueron rápidamente aniquilados.

Después de todo, los hermanos Tuoba estaban en el noveno orden, Feng Yang y Yang Ying Feng eran simplemente incomparables en el octavo orden y el resto, eran veintiséis cultivadores en el séptimo orden e incluso la mitad estaba en el séptimo orden picó.

Ante tal grupo conformado por treinta poderosos jóvenes, incluso el abrumador ejército de demonios no tenía oportunidad contra ellos, oleada tras oleada de demonios fueron aniquilados en su camino mientras se dirigian hacia lo más profundo del Sur.

Simplemente por donde sea que pasarán, los cadáveres de los demonios se apilaban en pequeñas montañas y su sangre teñía el suelo de un negro carmesí extremadamente siniestro.

Aunque luego de un tiempo el equipo comenzó a experimentar lo que era realmente el cansancio, siguieron adelante abriéndose ferozmente paso ante el abrumador ejército de demonios.

Luego de un tiempo, Feng Yang y el resto logró finalmente salir del cerco de los demonios, aunque la mayoría de los cultivadores de los Tres Continentes logró sobrevivir, hubieron dos personas que murieron antes de lograr dejar el cerco de los demonios...

Feng Yang no sabía sus nombres ni sus identidades, solo sabía que eran cultivadores de los Tres Continentes en el séptimo orden, por lo que realmente no le importaba mucho sus vidas. Solo que le dio algo de disgustó que murieran tan rápido... todavía ni siquiera habían llegado a su destino y ya habían sufrido bajas.

Sin tiempo para siquiera pensar en lamentarse, Feng Yang y el resto siguió corriendo hacia su destino.

Sin embargo incluso después de romper el cerco, todavía había una cantidad considerable de demonios que los perseguían ferozmente.

Estos demonios parecían simplemente haberse obsesionado con ellos y los perseguían sin importar cuan rápido corrieran, por lo que realmente fue difícil para Feng Yang y el resto librarse de ellos...