El dinero habla

La Asociación de Mercenarios mantenía una presencia importante en Bloodstone. ¿Cómo no iban a hacerlo, considerando que la Tribu Kinner era uno de los principales centros de actividad mercenaria en el sur de Komodo?

Su sede regional consistía en un complejo grande y extenso. En la típica moda mercenaria, las mechas de guardia provenían de varios cuerpos mercenarios, aunque cada uno de ellos llevaba marcas que los identificaban como Kinners.

Incluso los guardias a pie parecían ser manos contratadas. Ves encontró que era una elección admirable. De esta manera, la Asociación de Mercenarios intentaba hacer lo mejor para demostrar que se podía confiar en los mercenarios para guardar lugares sensibles e importantes.

Cuando Kelandra, Ves, Gavin y Afortunado salieron de su autocar, comenzaron a cruzar el amplio patio hacia un centro administrativo.