—Sunny sintió que habían tenido una suerte increíble.
Siempre existía la posibilidad de que la Inmortal Matanza y la Bestia Devoradora se enfrentaran entre sí, pero no se había atrevido a depender de esa posibilidad. Pero ahora, una de las Plagas estaba muerta.
Dicho esto, la situación no era ideal. Sunny habría preferido que fuera la Inmortal Matanza la que hubiera perecido... el mejor resultado posible, sin embargo, habría sido si hubiera llegado justo antes de que su batalla terminara y le hubiera robado la matanza al espectro de la niebla.
Luego, no solo uno de los Santos Profanados habría muerto, sino que también se habría privado al otro de absorber su esencia. Matar a la Inmortal Matanza entonces habría sido mucho más fácil.
Pero aunque su suerte fue buena, no fue tan buena.
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