Capítulo 766: Voldemort es tan estable (Editado)

Mansión Malfoy.

Los mortífagos estaban reunidos aquí, escuchando el informe de Snape a Voldemort sobre el "estado" de Dumbledore.

"Las heridas de Dumbledore deberían haber durado años con la ayuda de Fish, pero hace un tiempo, sus heridas se deterioraron repentinamente..."

Snape miró al inexpresivo Voldemort y continuó: "Mi suposición es que le quedan menos de dos meses de vida, y aunque Fish haga todo lo posible por mantenerlo con vida, no durará más de tres meses."

"¿Sabes la razón exacta por la que ese viejo Dumbledore se está deteriorando?". preguntó Voldemort, con los ojos escarlata mientras miraba fijamente a Snape.

"Fish dijo que Dumbledore bebió una poción verde brillante, por qué y dónde la bebió Dumbledore, no lo sé, fue detenido por Potter cuando intentó continuar, y Dumbledore no me contó los detalles". El rostro de Snape permaneció inmutable, y luego dijo.

"Si Dumbledore acudió a ti para que lo trataras, ¿por qué no lo envenenaste sin más? No podría haber sido más fácil para ti, ¿verdad?". preguntó Bellatrix con severidad, "¡¿O tienes tanto miedo de hacerlo como de salvarte a ti mismo?!"

Snape la fulminó con la mirada y luego la retiró con indiferencia, sin molestarse en perder el tiempo dando explicaciones a aquella loca.

Su actitud despectiva, sin embargo, enfureció aún más a Bellatrix, pero antes de que pudiera presionar más a Snape, el pequeño Barty tomó la palabra.

"Con Fish McGonagall cerca, no tiene sentido que Snape lo envenene". Dijo con voz ronca, mientras miraba agudamente a Snape. "Entonces, incluso sospecho que la lesión de Dumbledore no es necesariamente cierta".

"¡No, no lo son!" Sonó una voz maltrecha parecida a la de una sirena, y en el extremo opuesto de la mesa, una mujer con cara de sapo asintió: "¡Incluso Veritaserum no tiene efecto en ese pequeño bastardo!"

Después de que los dementores salieran de Azkaban, Umbridge había escapado y se había unido a los mortífagos sin problemas.

De hecho, la mayoría de los fugitivos habían pasado a estar bajo el ala de Voldemort, aunque la mayoría de ellos no podían asistir a las reuniones de los mortífagos, y Umbridge pudo participar gracias a su paso tanto por el Ministerio de Magia como por Hogwarts.

"Sólo te digo lo que sé, es el Maestro quien debe decidir". Snape volvió a mirar a Barty con calma, e ignoró a Umbridge como si no existiera.

Voldemort no reconoció directamente la información de Snape, aunque pensara que era cierta en su mayor parte... porque no quería que los mortífagos supieran que había sufrido otra derrota a manos de Fish y Harry.

De hecho, Voldemort ya había percibido que algunos de los mortífagos pensaban retirarse y, aunque había usado algunos tipos obvios para hacer un ejemplo de ellos, aún no había podido disuadir al resto.

La razón de esto, por supuesto, fue que el propio Voldemort tuvo que huir, y aquellos mortífagos a los que el viento había mantenido fuera de Azkaban, naturalmente, se lo pensaron mejor.

No fue hasta que Voldemort encontró una forma de contrarrestar el Encantamiento Patronus en un antiguo libro de magia negra, y lo perfeccionó hasta convertirlo en un hechizo contrapatronus que podía realizarse con una varita, que los ansiosos mortífagos se calmaron un poco.

Si supieran que fue derrotado una vez más por Fish... para ser precisos, por Harry Potter, esos tontos definitivamente comenzarían a vacilar de nuevo, pero Voldemort no podría matarlos a todos como había hecho antes.

"Pius, ¿qué ha pasado con lo que te pedí que hicieras?". Voldemort miró a Thicknesse, el actual Ministro de Magia.

"No he podido ver a Dumbledore, mi señor". Thicknesse se levantó y contestó respetuosamente: "Visité Hogwarts con el pretexto de buscar dementores y fugitivos de Azkaban, como usted me ordenó, pero las únicas personas que me recibieron fueron la vicedirectora Minerva McGonagall y el decano de Ravenclaw, Filius Flitwick, y según su respuesta, Dumbledore tenía cosas más importantes que hacer y no se encontraba en el colegio en ese momento. "

"¿Eso significa que lo que dijo Snape es cierto?" Murmuró Barty sorprendido mientras miraba al aún inexpresivo Snape.

"O podría ser un truco de ese viejo Dumbledore". Voldemort acarició a Nagini, aún inseguro de la información de Snape...

Más bien, estaba fingiendo que aún no estaba convencido de la información de Snape.

Voldemort confiaba en los hechizos que había preparado, incluso en Dumbledore, no creía que pudiera sobrevivir a la maldición de dos Horrocruxes, de hecho, para Voldemort era increíble que Fish pudiera mantener a Dumbledore con vida durante tanto tiempo.

Y la razón por la que fingía no creerlo todavía era simple... porque si no averiguaba por qué su varita había explotado cuando su magia choco con la de Harry Potter, aunque Dumbledore estuviera muerto, Voldemort seguiría sin sentirse lo bastante seguro.

Después de todo, además de Dumbledore, también estaba Fish McGonagall, un ser que desafiaba constantemente sus conocimientos de magia, y quién sabía qué cartas se guardaba Fish en la manga aparte de un Patronus gigante y un calamar gigante a su entera disposición.

Por supuesto, Voldemort no creía que fuera capaz de derrotar a Fish después de aprender el hechizo Anti-Patronus, así que volvía a la cuestión de cómo enfrentarse a la inexplicable contención de Harry Potter.

Aunque Voldemort no sabía que Harry era en realidad su propio Horrocrux, seguía haciendo suposiciones similares a las de Dumbledore a través de su propia resurrección con la sangre de Harry, su absorción del poder del antiguo hechizo de protección y el hecho de que habían utilizado varitas gemelas antes.

Por supuesto, Voldemort tenía una solución, y era la que mejor se adaptaba a su carácter: encontrar una varita lo bastante fuerte.

En la tradición de los magos, había una varita que podía hacer invencible a su amo, y él había confirmado de labios de Ollivander que tal varita existía.

Fuera o no la varita de sauco realmente fabricada por la Muerte, no era menos poderosa, y ¿no era natural que él, el Señor Tenebroso, usara la varita más poderosa de todas?

Por supuesto, mientras buscaba la legendaria varita de sauco, Voldemort no dejaría ociosos a sus sirvientes, y además de seguir permitiéndoles reunir y controlar hombres para reforzar sus fuerzas, tenía que pedirles que averiguaran qué le había pasado a Dumbledore, aunque fuera fingiendo.

Mientras Voldemort dirigía a los mortífagos para que cumplieran sus órdenes, y la Orden del Fénix se ponía manos a la obra después de la reunión, Dumbledore ya había salido de Inglaterra con Fish y había llegado a Austria, frente a una torre oscura e intimidante.

Era una torre lúgubre, muy antigua, con oscuras y duras baldosas de piedra cubiertas de musgo y telarañas blancas en los rincones, y llevaba abandonada mucho, mucho tiempo.

La puerta principal de la torre está abierta de par en par, pero aunque estuviera cerrada sería inútil, ya que la puerta de madera se había podrido por muchos sitios y los clavos y el hierro estaban cubiertos de una gruesa capa de óxido.

Sobre la entrada de la puerta principal hay una inscripción: "Por el bien mayor"