Capítulo 533: Caminos separados (Editado)

"¡Un momento! ¡Peter Pettigrew murió hace mucho tiempo! ¡Fue asesinado por Black hace trece años! ¡Eso es algo que deberías saber!"

Volvió a gritar Fudge cuando Fish dijo que Peter había aparecido sosteniendo a Voldemort en estado de bebé.

(?ω?)

Fish frunció el ceño descontento por la interrupción, iba a decir algo sobre que Peter no estaba muerto, pero entonces recordó que era algo que la profesora McGonagall no parecía permitirle decir...

Así que giró la cabeza para mirar a la profesora McGonagall, y cuando ella negó suavemente con la cabeza, dijo: "No es que Fish lo haya visto antes, pero le falta un dedo de la mano derecha, y así es como lo llaman Harry y Voldemort."

El pequeño gesto entre Fish y la profesora McGonagall, sin embargo, fue malinterpretado por Fudge, que miró a uno y otro lado entre los dos, luego volvió su atención a Dumbledore y de repente hizo una mueca de desprecio.

"Sobre eso, te lo explicaré más tarde, Cornelius". Dijo Dumbledore en voz baja, moviendo la cabeza con impotencia.

Pero Fudge, ahora plenamente convencido de que Dumbledore estaba detrás de lo que Fish decía, hizo una mueca de desprecio una vez más, luego cruzó las manos y se hizo a un lado y lo miró fríamente.

Fish no tenía idea de lo que Fudge estaba pensando, bostezó y continuó hablando apáticamente, lo que reforzó la certeza de Fudge de lo que tenía en mente...

Pues la narración apática de Fish sonaba demasiado a recitado.

"... Entonces Voldemort huyó, y después Severus encontró a Fish y a Harry y nos trajo de vuelta nya... ha~~~yawn~~"

(?′Д`?)

(?—ω???)

Somnoliento, Fish bostezó una vez más, y se frotó los ojos que estaban casi cerrados.

"Minerva, ¿puede Fish volver a dormir nya? Estoy tan cansado después de transformarme en un gran gato..."

"Bueno, puedes dormir".

Dijo suavemente la profesora McGonagall mientras acariciaba la cabeza de Fish.

Con su consentimiento, Fish volvió inmediatamente a su forma de gato y saltó a los brazos de la profesora McGonagall y cayó en un profundo sueño.

Mirando angustiada el pelaje quemado del cuerpo de Fish, la profesora McGonagall lo peinó suavemente, luego palmeó y acarició su espalda suavemente, haciendo que el gato durmiente ronroneara cómodamente.

Fudge se congeló visiblemente al ver el pelaje lleno de baches en el cuerpo de Fish, y su expresión antes despectiva se volvió vacilante, pero pronto, se recuperó y miró a Dumbledore con rostro severo.

"Una historia muy buena". dijo fríamente: "Si no hay nada más, creo que debo marcharme, y volveré mañana a... para celebrar la ceremonia de entrega de premios a Fish. Vamos, Bagman". Saludó a Ludo Bagman.

"Esto no es un cuento, Cornelius". Dumbledore detuvo a un hosco Fudge y a un abrumado Bagman y les dijo: "Voldemort ha vuelto, ha recuperado su carne y su poder, tú y el Ministerio deben estar preparados y dar los pasos necesarios para que aún sea posible salvar la situación. El primer paso, y el más importante, es liberar Azkaban del control de los dementores...".

Pero Fudge no escuchó y gritó furioso: "¿Liberar a los dementores? ¡Me habrían echado de la oficina por sugerir eso! La mitad de nosotros sólo podemos dormir por las noches porque sabemos que hay un Dementor de guardia en Azkaban!".

Dumbledore aún trató de convencerlo, e hizo una segunda sugerencia: "Enviar un mensaje a los gigantes".

Por supuesto, esta sugerencia también fue rechazada por Fudge.

"Si el mundo mágico se entera de mis tratos con gigantes... la gente odia a los gigantes con pasión, Dumbledore... ¡Mi carrera habrá terminado!". Fudge jadeó sorprendido, sacudiendo la cabeza mientras daba un paso atrás.

"Cornelius, estás tan obsesionado de tu posición oficial que te ha robado el juicio adecuado".

Dumbledore miró a Fudge con gran decepción, y dijo con voz seria.

"Si sigues mi consejo y haces algo al respecto, el Ministerio y todo el mundo mágico te recordarán siempre como el más valiente y más grande Ministro de Magia que jamás haya existido. Si no actúas... la historia también recordará que fuiste tú quien se quedó de brazos cruzados y dejó que Voldemort tuviera una segunda oportunidad de destruir el mundo que tanto nos ha costado reconstruir."

"¡Tú eres quien está destruyendo todo lo que tanto nos ha costado construir en los últimos trece años!". El tono de mando de Dumbledore hizo que Fudge se sintiera como si lo hubieran apuñalado con una aguja, y se volvió duro nuevamente: "¡No sé a qué clase de juego estás jugando, Dumbledore, para conseguir que un niño ingenuo como Fish mienta!".

"¿Crees que yo le enseñé a Fish lo que acaba de decir?". Dumbledore rió furioso, "¡¿Quieres decir que hasta el secuestro de Fish y Harry, fue planeado por mí?!".

"Yo no he dicho eso..." Fudge se estremeció un poco al ver la ira de Dumbledore, murmuró, "Tal vez sólo fue algún mortífago loco que lo planeó todo en nombre de Ya-Sabes-Quien, y Fish y Harry fueron engañados por él".

"¡No nos engañó!" Harry gritó: "¡Fish y yo vimos regresar a Voldemort! Vi a los mortífagos de rodillas besándole la túnica!".

"Ya se lo he oído decir a Fish una vez, iban todos enmascarados ¿no?". Fudge agitó la mano con impaciencia, mientras seguía inventando excusas. "Quizá ni siquiera eran mortífagos, sólo un puñado de lunáticos adoradores de Ya-Sabes-Quien gastando bromas".

Snape dio un paso adelante, pasando junto a Dumbledore, y al hacerlo se levantó la manga izquierda de la túnica. Extendió el brazo para que lo viera Fudge, que retrocedió horrorizado.

"Mira "dijo Snape con voz ronca: "Mira, la Marca Tenebrosa. Creo que sabes lo que significa, y nadie más que Voldemort podría haber provocado su cambio".

"¿Por qué crees que Karkarov huye esta noche? Ambos sentimos la marca ardiendo. Ambos sabemos que ha vuelto. Karkarov temía que Voldemort se vengara de él. Había traicionado a muchos de sus compañeros mortífagos, y seguramente nadie le daría la bienvenida de nuevo entre ellos."

Snape miró fríamente a Fudge y dijo: "Yo estaba allí, camuflado con la capa invisibilidad, y ese hombre era Voldemort, no podía estar más equivocado."

Pero el preconcebido Fudge no creía, o más bien no quería creer, lo que Snape decía, seguía negando con la cabeza y decía: "Basta, ya he oído suficientes locuras tuyas, no quiero decir nada más. Mañana me pondré en contacto con usted, Dumbledore, para discutir la forma de dirigir este colegio. Debo regresar al Ministerio de Magia".

"Si vas a ser tan terco e insistente, Cornelius", dijo Dumbledore, "Tendremos que seguir caminos separados. Tú haz lo que creas conveniente y yo haré lo que haga falta".

No había ningún atisbo de amenaza en la voz de Dumbledore, sonaba como una mera declaración.

En cambio, Fudge actuó como si hubiera pillado algo: "Vaya, vaya, Dumbledore" señaló a Dumbledore con el dedo: "¡Por fin has revelado tus verdaderas intenciones! No dejaré que te salgas con la tuya".

Dumbledore no discutió, sólo observó con ojos decepcionados cómo Fudge arrastraba a Ludo Bagman fuera del despacho.