La gran puerta se abrió y entramos al gran comedor, bastante grande la verdad. El lugar no era como en el viejo castillo, sin mesas de madera antigua, sin antorchas en las paredes, no había velas volando en el techo pero si estaba bien iluminado y, a pesar de ser de dia, en el techo se reflejaba un cielo estrellado claro solo visible durante el atardecer.
El lugar no tenía cuatro largas mesas, sino que había muchas mesas divididas en grupos, 7 grupos que representaban cada año, sin distinción de casas. Al final del salón también había una mesa larga donde se podía ver a los profesores y directivos.
Seguimos avanzando hasta estar en el medio del gran salón, a una cierta distancia de cada grupo de mesas. En el asiento de los profesores, una mujer de mediana edad se levantó de la silla central y se preparó para decir las siguientes palabras.
"Este es otro año, otro año donde no podemos comer bajo el techo de nuestro antiguo gran salón, pero eso no nos detendrá. Vivimos por mejorar y, en un mañana, poder recuperar lo que nos pertenece. Aun si no estamos en nuestro verdadero hogar y ya no sigamos las tradiciones tal y como eran debido a ello, aun así conservaremos las costumbres otro año para no olvidar de donde venimos" Su voz era clara y profunda, con cierta carga emocional pero a la vez también se notaba que este discurso se ha dicho muchas veces y se ha vuelto casi mecánico.
El preceptor que nos acompañó se adelantó para encontrarse con una alumna de los años mayores que llevaba en sus manos un almohadón morado donde yacía un viejo sombrero con una boca que se movía levemente como si murmurara.
"Ahora pasaré lista, cuando escuchen su nombre pasen al frente" Dijo sacando un anotador mientras la muchacha se colocaba a su lado con el sombrero en brazos.
"Abbott, Abel" Fue el primer nombre en aparecer y un niño rubio con algo de nervios avanzó hasta ponerse entre el preceptor y la alumna con el sombrero.
No había una silla para sentarse, por lo que el niño se quedó parado, mirándonos mientras el sombrero era colocado sobre su cabeza. El sobrero que había estado en silencio hasta el momento pensó por un leve momento antes de gritar.
"¡GRYFFINDOR!"
Al escucharse, varios alumnos de distintas mesas aplaudieron y el niño llamado Abel se dirigió hacia un grupo de mesas vacías que fue señalada por la muchacha que sostenía el sombrero.
"Abbott, Hannah"
...
...
Los nombres empezaron a pasar y varios niños se adelantaron para tener su turno. Yo estaba a un lado de mi hermana, escuchado lo que me contaba y acompañándola a las miradas hacia Boris, Ron y su grupo. Hermione aún se sentía mal por lo que hizo, tal así que no se dio cuenta cuando se dijo.
"Black-Granger, Hermione"
Cuando lo escuché no pude evitar congelarme y mirar a mi hermana, la cual no pareció darse cuenta de lo que se acababa de decir. Y no era solo yo quien se quedó mirando a Hermione, en el grupo de niños había otras dos personas haciendo lo mismo, un niño con una cicatriz en su ojo y una niña de lentes.
"Black-Granger, Hermione" Se repitió al ver que nadie aparecía.
"Hermione... creo que te llaman" Le di unos golpecitos, aun dudando de lo que escuchaba.
Mi hermana por fin reaccionó y al igual que yo no pudo evitar quedarse congelada al escucharlo, era como un balde de agua fría que no esperabas recibir... nunca. En su mente no podían estar tranquila...
'¡¿Black?! ¡¡¡¿BLACK?!!! ¡¿Soy una Black?! ¡¿Soy la hija de Sirius?! ¡¿Sirius violo a mi mamá y la de Luna?! ¡¿O quisas fue Regulus?! ¡¿QUÉ MIERDA?!' Grito en su mente, casi al borde del colapso.
Quedo paralizada al punto de que cuando la llamaron por tercera vez no reacciono, por lo que pasaron al siguiente nombre aun sabiendo que ella estaba aquí. Mi hermana se recuperó pero no podía dejar de pensar en lo que el nombre mencionado significaba, quería discutirlo conmigo teniendo en cuenta que se trataba de nuestro padre, pero su nombre fue llamado otra vez luego de que otro niño hubiera pasado.
Esta vez ella estaba mas despabilada y decidió posponer nuestra charla, por lo que avanzó y susurró un breve "lo siento" al acercarse al preceptor y la chica. El sombrero fue colocado sobre su cabeza y en vez de pronunciarse directamente la casa a la que pertenecía pudo escuchar su leve voz diciendo "interesante".
Ella sabía el porqué, ya que la primera vez también tuvo problemas con ser seleccionada. Estaba entre Gryffindor y Ravenclaw, pero pensó que esta vez no habría tanto problema y sería puesta rápidamente en el grupo de los leones debido a su ya formada personalidad. Pero las cosas tampoco fueron como esperaba, puesto que, en solo un instante luego de escuchar el 'interesante', el sombrero gritó:
"SLYTHERIN"
Se escucharon aplausos pero todo fue un sonido sordo a los oídos de mi hermana, se congeló nuevamente tratando de entender. Desde que se puso el sombrero hasta que se seleccionó no fueron mas que unos segundos, ni siquiera tuvo tiempo de discutir con el sombrero a qué casa iría.
La muchacha que sostenía el sombrero tuvo que empujarla en dirección a la mesa para que empezara a caminar. Con lo de antes había dado la sensación de ser una psicópata agresiva y con lo de ahora hizo pensar a todos que era un poco 'lenta', dos adjetivos que la dejaron bastante mal para el primer dia.
Hermione caminó hasta la mesa donde ya había algunos niños, pero ninguno se le acercó, como si ella fuera una desequilibrada mental peligrosa. Hermione no estaba tan shockeada por el hecho de estar en Slytherin, era principalmente por la gran cantidad de diferencias que tenía con su antiguo mundo, como si toda su realidad desapareciera poco a poco.
Primero consideró que este no era su cuerpo y si ella era una Black en este mundo entonces tenía algo de sentido la probabilidad de estar en esta casa, pero esto aún le sentaba algo mal... no es quien era... Hermione Black...
"Bellwood, Bastian"
Fue el siguiente nombre en ser nombrado y un niño de cabello oscuro algo largo estaba por adelantarse pero antes de que pudiera avanzar mucho recibió un golpe en la cabeza que lo dejo tumbado en el suelo aturdido.
"Creo que se desmayó, tal vez un bajón de presión o falta de nutrición... debieron servir algo de comida en el tren, vean como esté ahora el pobre chico, desfalleciendo por el hambre" Dije frotando mis adoloridos nudillos, la próxima vez debería transformarlos en algo mas duro "Como él no puede pasar creo que me adelantaré para no retrasar las cosas" caminé hacia el frente.
Mi acción había traído la risa de varios alumnos de los alrededores. El pobre chico aturdido y adolorido no entendía lo que paso y solo podía ser levantado por sus compañeros que no dejaban de pensar que serian compañeros de un par de locos, y que estos eran hermanos.
Me coloqué en posición bajo el sombrero, recibiendo el ceño fruncido del preceptor y la risa contenida de la chica. Mi acción no fue correcta pero actualmente no se es tan formal y aunque algunos me regañaban en secreto, otros solo admiraban el show. La fuerza y el ingenio son cosas valoradas, no me detendrían, pero quisas recibiría una advertencia luego.
Mi hermana solo pudo golpearse la cara con su mano al ver lo que hice. Ella sabía el porqué de tal acto, era solo para venir a sentarme junto a ella antes. A este punto no dijo nada, ella ya cometió errores y solo esperaba que todo esto terminara para empezar a enmendar todas estas fallas.
"Liryuz" Mencioné y para que tacharan mi nombre de la lista.
Pusieron el sombrero sobre mí y pasó un tiempo, no podía escuchar la voz del sombrero hasta unos segundos después, pero cuando lo hice todo lo que oí fueron murmullos inentendibles. El sombrero pareció inhalar como para poder gritar el nombre de la casa a la que me asignarían y cuando por fin abrió su boca...
"¡SIGUIENTE!"
"..."
"..."
"¿Qué?"
"¿Siguiente?"
"¿Esa es otra casa?"
"¿Se puede hacer eso?"
El murmullo empezó por todo el salón, nadie entendía qué pasaba y se preguntaban entre ellos si escucharon mal la voz del sombrero.
"¿Qué quiere decir con siguiente?" Le preguntó el preceptor al sombrero.
"Que venga el que sigue, este niño está muy difícil. Esto es solo conmemorativo, no hay casas en las que distribuirlos y todos terminaran en el mismo lugar hasta que se recupere Hogwarts, así que no importa si le asigno o no una casa. No planeo seguir hurgando en su cabeza, hay algo muy malo dentro de él... pasen al siguiente, quiero terminar rápido para poder ir a ver mis novelas" Respondió el sombrero.
Dejó pasmados a todos, no era mentira lo que decía, pero era la primera vez que se presentaba una situación como esta. Recibiendo una indicación de parte de la directora se dispuso que la ceremonia siguiera, me indicaron que fuera a la mesa y avancé felizmente hacia mi hermana. Me senté a su lado y quedamos los dos solos apartados de los demás.
"¿Sabes que lo que hiciste esta mal?" Me dijo, pero ya sin mucho ánimo.
"Estoy contigo ¿Cómo puede estar mal?"(Riuz)
"Golpeaste a ese niño solo por unos minutos mas de tiempo" (Hermione)
"¿Tienes miedo de que se quiera vengar?"(Riuz)
"No, bueno, es probable que también pero... dimos la peor impresión de todas" Suspiró, este dia iba a ser de los mas agotadores de su vida, tanto presente como pasada.
Estábamos sentados, mirando como la ceremonia seguía, y por la cantidad de niños parecía que iba a durar bastante. En la mesa había algunos aperitivos, supongo por el tiempo que se debe esperar por la ceremonia. La cantidad de alumnos nuevos era impresionante, no lo noté tanto antes debido a que estábamos algo dispersos pero ahora que puedo observarlos desde esta posición veo que hay muchos.
Fue algo aburrido y hubo pocos personajes interesantes, por lo que solo me quede comiendo palitos de masa mientras esperaba hasta que terminara. Pensé que mi atención como la de mi hermana no se centraría tanto en la ceremonia hasta que le tocara a Ron o sus camaradas, pero en un momento escuchamos alno inesperado.
"Granger, Diana"
Cuando escuchamos eso, tanto mi hermana como yo giramos nuestras cabezas en simultáneo para poder ver como una chica de cabello castaño no muy oscuro se acercaba hacia el sombrero. Si prestabas atención tenía los dientes algo chuecos y sobresalientes, llevaba un par de lentes redondos muy grandes y gruesos, tenía un poco de acné y su cabello estaba desarreglado.
"¿Tenemos una prima o algo por el estilo?" Le pregunté a mi hermana que debería saber mas sobre el tema.
"No, bueno, si tenemos primos, pero no la conozco a ella en lo mas mínimo. Mama me dijo que luego de que naciéramos corto toda relación con el resto de la familia y que por eso no tenemos contacto con ellos" Me explico y luego se quedó pensativa" Si tenemos en cuenta nuestra concepción y estado actual es entendible, pero sigo pensando que deberíamos dejar que mama vuelva a ver a la familia"
"Tal vez tengas razón" Dije sabiendo que aun si amo a mi madre y nuestro estilo de vida actual incompatible con la mayor parte del mundo, aún me gustaría verla feliz y esta puede ser una buena forma, "¿entonces es una Granger completamente ajena a nosotros?"
"Puede ser, pero no estoy segura. Muchas cosas cambiaron a como lo conocía, muchas personas que conozco ahora tienen hermanos que antes no, por lo que puede que alguno de mis tíos haya tenido una hija y si estemos emparentados... se parece un poco a mí yo anterior y otros familiares así que es posible..."(Hermione)
"Deberíamos tratar de averiguarlo y conocerla, si es un pariente podríamos comenzar desde allí para realizar una reunión familiar para nuestra madre"(Riuz)
"Hhmm"(Hermione)
Vimos como la selección de la chica estaba tardando y luego de casi 4 minutos el sombrero gritó:
"GRYFFINDOR"
La niña vino hacia la mesa pero, al igual que los demás, se sentó lejos de nosotros. Nos la quedamos mirando un rato sin saber si ir en este momento para charlar, pero tenido en cuenta todo lo que hicimos decidimos esperar.
Lo que pasó después no fue tan sorprendente, los nombres pasaron y ninguno llamó nuestra atención por mas de unos segundos. Solo el grupo de Weasley se ganó nuestro interés momentáneo. Ron fue a Gryffindor, Boris, Malfoy y Ruth a Slytherin. Harry también fue con Ron, solo que el sombrero se tomó bastante tiempo para elegirlo.
Una vez pasaron todos los niños, la directora llamada Ándora, luego de decir unas palabras mas, inició el banquete de bienvenida haciendo sonar una campana de mano. De las puertas a los lados del salón vinieron flotando varios carritos llenos de platillos diferentes, los cuales saltaron sobre las distintas mesas.
En la mesa ahora había una gran variedad de alimentos que, según mi hermana, eran mas modernos y variados que en su tiempo. Ahora que la mesa estaba llena, había niños a nuestro alrededor, pero ninguno nos dirigía la palabra. Comí hasta saciarme mientras que mi hermana tuvo mas control y solo comió lo necesario.
Una vez finalizado el banquete, las mesas de alumnos fueron siendo desalojadas por orden de edad, de mayor a menor, hasta que solo quedó la nuestra. Quedamos solos en el gran salón y la muchacha que sostenía el sombrero seleccionador junto con otra chica de su misma edad vinieron hacia nosotros.
Nos pidieron que nos levantáramos y las siguiéramos. Salimos por la puerta y nos dirigimos a una gran cruce de caminos no muy lejos del gran salón y que estaba casi al centro de todo el campus. Éramos un gran grupo y se dificultaba el orden pero uno o dos hechizos mantenían el control de los niños.
Desde este punto, ambas chicas nos enseñaron sobre algunos de los edificios, pero no nos acercamos a ellos, solo dieron nombres y explicaron que aquí la exploración es parte de la vida en Hogwarts. Explicaron detalles importantes sobre la enfermería, el gran salón, los horarios para comer, algunas reglas, etc...
Luego de eso, nos movimos una vez mas hacia el lugar donde estaban las carpas. Frente a ellas había una montaña de maletas... de nuestras maletas. Tuvimos que recoger nuestras pertenencias del montón y luego de eso, llevarlas al campus nosotros mismos.
Gran parte del sendero principal era inclinado y extenso, algunos niños tenían varias maletas y casi se murieron en el camino. Diana fue una de ellas, pues, aunque tenía una sola maleta, esta era muy grande y por lo visto, pesada.
Mi hermana quiso ayudar con un hechizo pero por alguna razón se sintió muy cansada y perdió el control de su magia y la maleta que estaba por empezar a flotar unos centímetros sobre el suelo cayó sobré el pie de la niña que trataba de ayudar. La mirada de los demás sobre ella lo dijo todo, y su expresión solo clamaba 'trágame tierra'.
Caminamos hasta estar frente a la entrada de los dormitorios, y allí tomamos un descanso de 20 minutos, donde algunos niños se recuperaban de esa subida. Los dormitorios estaban divididos por año y por género, estábamos en una pequeña plaza en el centro de la estancia de los de primer año. Desde donde estábamos, a la Izquierda estaban los dormitorios de los niños y a la derecha los de las niñas.
Los dormitorios eran dos largos edificios de dos pisos con varias puertas, una seguida de otra, había escaleras para la parte superior al principio y al final de la sección de puertas. Idéntico para los dos lados, la única diferencia entre ellos eran algunos detalles dejados por algunos alumnos anteriores como, por ejemplo, flores pintadas en las columnas de madera en el dormitorio de las niñas.
"Bien, los números que les dimos son sus dormitorios. No tienen permitido salir de noche durante su primer año, a menos que se indique lo contrario. Tampoco esta permitido que los niños o las niñas estén dentro de los dormitorios del otro durante la noche" (Chica 1)
"Por lo menos hasta que crezcan un poco"(Chica 2) rio en voz baja sobre la última mención. Ella era una de las que suele visitar a su novio por las noches y sabía que estas reglas eran mas aplicadas a los primeros y segundos años.
"El primer dia sería mas explicativo y los llevaría a hacer mas cosas, pero unas ratas mutantes se escaparon del laboratorio y se me pidió que les informaran que por el resto del dia se quedarán dentro del dormitorio. La cena se les traerá aquí, así que aprovéchenlo para conocerse con sus compañeros. Mañana tienen clases temprano, así que descansen bien. Fuera de eso pueden hacer lo que quieran dentro de las reglas, habrá una copia del reglamento dentro" (Chica 1)
"Nos quedaremos aquí en esta plaza o daremos vueltas por los cuartos hasta el anochecer por si tienen alguna pregunta" (Chica 2)
Así nos separamos a ambos lados. Me despedí de mi hermana con la mirada, y si no me equivoco, con sus gestos me dijo 'no causes problemas' pero luego de lo que hizo hoy no tiene mucha autoridad.
Yo llegué a la habitación 24, una de las últimas puertas, pero luego de ver el interior y entender que compartiría mi habitación con otros, volví hacia las chicas para consultarles algo.
Mi hermana, por otro lado, una vez entró a su habitación se quedó adentro. Conoció a sus compañeras que no eran las mismas que en su vida anterior, e intento explicar lo sucedido. Tuvo suerte y la escucharon, dándole otra oportunidad luego de ver que se comportaba tan amablemente.
Charlaron un rato mientras desempacaban y se conocieron brevemente, luego de eso, investigaron el interior del lugar y leyeron las reglas que estaban escritas en un pergamino en la pared. Hermione estaba muy cansada, supuso que era debido al dia que tuvo, así que después de comer la cena que llego temprano, se acostó en su cama y cayó dormida.