Una voz me saluda mientras me pierdo en la belleza y en mis pensamientos.
"...Pareces disfrutar mucho del paisaje..."
Era una vos masculina.
La voz transmitía serenidad que pocas veces e escuchado, era como un anciano que ya a visto mucho en la vida y por ello rebosaba de experiencia y paciencia, por lo que la inminente llegada de la muerte no podría sorprenderlo ni un poco.
Era la misma voz de el abuelo de un amigo mío que nos dejó hace poco.
Aunque había una diferencia fundamental.
Y es que está vos no tenía ningún toque de vejez, sino que de un joven adulto como máximo.
"...Quien?"
Miro alrededor.
Realmente es un poco difícil con tantas criaturas nadando por aquí y por allá, me es difícil ver más allá de unos cuantos metros.
Tan rápido como empeze a buscar todas los peces que tapaban mi visión empezaron a moverse de forma extraña.
Dejando un espacio para ver más allá, para ver a un hombre.
(...Es esa persona de allá!?)
No muy lejos de donde estoy un lugar llano con un piso de piedra liso.
Y un hombre con traje y corbata blanco a juego con un sombrero del mismo color, sentado delante de una mesa de color blanco con un par de sillas del mismo color.
El hombre se ve como si tuviera entre 20 y 30 años, con cabello oscuro igual que el yo, y en su rostro una suave y amistosa sonrisa.
"..."
No sé que decir.
El hombre se ve tan fuera de lugar que da un poco de miedo.
Ninguna criatura marina sin importar que tan grande o pequeña se acerca a unos 5 metros del hombre, como si tuviera una especie de campo de fuerza.
El hombre me mirá mientras sonríe y hace una señal para que me siente frente suyo.
(...Me preguntó si el es alguna clase de Dios de la Muerte? O tal vez Dios del Océano? Estoy seguro que no es alguien común...)
Tal vez sea la Parca?
Ya saben, ese ser que juzga si las personas fueron buenas o mala, y dependiendo del resultado, las manda al cielo o al infierno.
(Yo habré sido una buena persona? Al menos creo que no hice nada terrible y que justifique el ser mandado al infierno...)
Creo que en general no soy una mala persona, nunca le hice un mal injustificado a nadie.
Hice algunas idioteces en mi adolescencia, pero nada demasiado alejado del comportamiento de un puberto.
Mientras pienso en mi pasado ( del cual no pienso hablar a detalle), me dirijo hacia aquel extraño hombre, que podría ser Dios.
Camino sobre la arena mientras cuido de no pisar a ningún animal marino( cangrejos, pulpos, peces, conchas de mar, estrellas de mar, etc.), de los hay una interesante cantidad oculta bajo la arena.
Y mientras me concentraba en mis pies, un pez de unos 30 centímetros me golpea la cara con una embestida y tan rápido como apareció, desapareció.
Miró hacía la dirección de dónde se fué el pez maleducado, solo puedo suspirar.
"*Suspiro*...A veces no entiendo mi mala suerte, realmente..."
Esto no es un caso aislado, hay veces donde realmente siento que mi mala suerte es castrosa.
Ese pez tenía todo el camino libre y despidió por alguna razón abofetear mi cara mientras me pasaba rozando por alguna razón, sin provocación ni nada.
(...Tal vez se enteró que me comí un par de sus parientes?...)
No pensemos más en éso.
Miro al hombre que me espera pacientemente, no notó ningún cambio en él.
No sé si se está aguantando las ganas de reírse de mi desdicha, pero de todas maneras es bastante vergonzoso.
En un momento así solo puedo reír también.
"Hahaha...!!"
...
Por fin estoy frente al hombre, con muchas dudas en mi cabeza me siento frente a él.
"... Creo que ya sabes más o menos tu situación no?"
Me hace esa pregunta sin cambiar en ningún momento su expresión facial, todavía es una sonrisa.
"Si... O al menos eso creo"
"Bien, yo soy... llámame Señor T, y soy algo así como la persona que se encarga de decidir a dónde irán las almas muertas, se que tienes muchas preguntas, normalmente no respondo ninguna dado que muere muuuuchas personas a cada instante y sería realmente un desperdicio de esfuerzo dado que al final no se acordarán de haberme conocido, pero tú eres una excepción... tu eres de los pocos a los que "ellos" les han asignado una Misión, y por eso tú y yo debemos tener una laaarga conversación..."
"...Una Misión"
"Si, una la cual me librara del problema de... Bueno eso te lo diré más adelante, por ahora quiero hablarte de la misión en sí..."
El Señor T? extendió su mano y me mostró que dentro de ella habían tres piezas de metal del tamaño de un pulgar.
Una tenía la forma de un Mago, otra con forma de un Caballero, y el último la de un Granjero.
Las tres piezas parecían pertenecer a alguna clase de juego de mesa o juego de rol.
"Eso es... Una clase de juego"
"No... Bueno, algo parecido"
Pone las piezas sobre la mesa.
De repente y de la nada aparece un mapa muy viejo sobre la mesa, y las tres piezas estaban sobre el mapa, no se movieron en el proceso.
Eso me sorprendió.
Yo sé que estoy respirando debajo del agua, y que antes que esto yo había muerto, pero simplemente no puedo no sorprenderme.
El es...
"Señor T... eres un Dios?"
Eso es algo que tenía girando en mi cabeza por un tiempo, que es realmente el Señor T, es un Ángel, un Dios o un Demonio.
No tengo intenciones de dudar de él, aunque parezca muy extraño, dado que no tiene sentido en este momento, pero al menos quiero oírlo confirmar mis sospechas.
"...mmmm... No sabría que decirte... los seres humanos y otras seres inteligentes, muchas veces tienen diferentes conceptos de seres superiores que controlan sus vidas, y que veneran o temen por diversos motivos"
Señor T se detiene un momento, para mirar hacia arriba.
"No van mal encaminados si lo que intentan es describirnos a nosotros, los que vivimos en otro plano del #@$+-$#@... lamentable sus descripciones de nosotros son demasiado básicas, vagas y tienen muchos errores, es por eso que no soy el Dios que ustedes los humanos describen.. Aunque no estoy muy lejos de serlo... pero no más distracciones, es momento de que te hable de la Misión, está bien?"
(Creo que es demasiado para mí entender uno de los mayores enigmas de la humanidad... Es mejor no molestar al Señor T...)
"...Bueno"
Me preocupa que este mintiendo, no soy tan ingenuo para pensar en qué está sea alguna trampa de algún tipo.
Pero... Tampoco me a dado motivos para desconfiar de él, así que por ahora es mejor escuchar lo que tiene que decir.
El Señor T señala el mapa sobre la mesa y empieza a hablar.
"Este mundo se llama Silva, y para ponerlo simple y en un término que tú entiendas es un mundo medieval de espadas y magia... también hay otras culturas, pero la cultura medieval es la más extendida"
El Señor T hace una pausa para mirar si estoy pillando lo que él está diciendo o no.
Rápidamente asiento con la cabeza, aunque aún me cuesta procesar todo esto.
"Este mundo tiene tres clases de seres humanos... Los Magos..."
Señala a la figura representada con una figura de Mago.
"...luego están los Cultivadores..."
Esta vez señala a la figura de Caballero.
"...y por último tenemos a la persona normales"
Está vez señaló la figura de granjero que estaba más alejada de las otra dos, por alguna razón.
"Creo que entenderás que entre las dos primeras y está última hay una gran diferencia de poder tanto militar como social, no?"
"..."
El Señor T esperaba mi respuesta, así que simplemente asentí.
La verdad es que es bastante fácil imaginar la desigualdad que crearía el tener o no tener magia y...
"Que hacen los Cultivadores?"
El Señor T respondió mi pregunta con su calma característica, aunque obviamente estaba apresurado.
"Los Cultivadores son por definición lo opuesto a lo que son los Magos, los cuales se especializan en ataques a largo distancia, ellos en cambio usan una energía que es comúnmente llamada "Espíritu de Combate", gracias a la cual pueden aumentar su fuerza, velocidad y durabilidad, además que les da ciertas habilidades especiales... espero que no allá más dudas... Y también espero que puedas dejar las preguntas para el final"
"Me quedó claro... Lo siento"
Luego el Señor T siguió con su descripción.
"En todo caso gracias a esa desigualdad que durará algunos siglos, los humanos sin poderes crearán a medida que pase el tiempo, armas que puedan minimizar la brecha de poder, esto desencadenará con la creación y activación un arma... "El Arma del Fin del Mundo"... lo que causará la destrucción misma de todo el universo donde esté mundo se encuentra...
"...la destrucción del universo!?.."
Eso es sorprendente, un arma capas de destruir todo el universo... Y fue creada por nada más ni nada menos que los que desde el principio estaban más abajo en la escala de poder.
Es bastante formidable.
Los humanos de ese otro mundo seguro son formidables.
"...Si se destruye el universo, también afectará a mi mundo de origen?"
"No, ambos están en universos diferentes, y también muy alejados, en diferentes ramas de la realidad, pero... nada, de todos modos lo importante no es la destrucción del mundo y universo en como tal...muchos mundos y universos se destruyen en múltiples ramas de la realidad..."
El Señor T me mira por unos segundos antes de continuar hablando...
"....Lo importante es que este mundo, universo y rama de realidad son especiales, así como el arma que las destruye, es por eso que necesitamos cambiar este evento... O al menos prevenir que pase en unos cuantos milenios más..."
(Cambiarlo...?)