Capítulo 263: La confianza de Hermione

En el Gran Comedor, el ambiente era un poco incómodo.

Ron y Hermione miraron a Harry alejándose, y nadie habló.

Después de un largo rato, Ron dijo con comprensión: "Harry siempre ha sido así, confiando ciegamente en los demás; siempre es demasiado optimista".

Ron se volvió para mirar a Hermione como si esperara algo.

"Como Harry, yo también creo en Ivan." Hermione repitió: "Ha hecho mucho para demostrar que no es como un malvado mago negro..."

"Yo también creo en él. ¡Todos creemos en él!" Ron dijo con tristeza, agitando vigorosamente los cubiertos en sus manos: "Lo sé, Ivan es muy bueno. Ha hecho un montón de grandes cosas que yo no puedo hacer en toda mi vida. Pero el problema ahora es que es una persona común y corriente, y puede que no sea capaz de resistir la tentación del poder. La magia negra es mucho más fuerte que la magia ordinaria, tal vez por eso es fuerte, ¿Entiendes lo que quiero decir, Hermione?"

Cuanto más hablaba Ron, más se inclinaba por esta posibilidad. Si Ivan no estudió magia negra, ¿cómo explicar todo el poder mágico que tuvo a tan temprana edad?

Ivan era un muggle ordinario. Nunca tuvo un encuentro con la magia antes de llegar a Hogwarts. Si no fuera por alguna "razón" especial, no habría podido llegar a ser tan poderoso tan rápido, incluso superando a todos los jóvenes magos de pura sangre.

Ron no negó que Ivan era muy trabajador. Pero con trabajo duro, debería estar a lo sumo en la liga de Hermione, no más.

Esto fue muy anormal. Debe estar estudiando la malvada magia negra en secreto. Al pensar en esta posibilidad, Ron sintió que era más injusto que atemorizante. En su opinión, Ivan estaba haciendo trampa.

Ivan engañó a otros y obtuvo lo que no debía.

Pensando en esto, la respiración de Ron se hizo un poco más rápida. Después de ser salvado por Ivan el semestre pasado, tenía la intención de abandonar todos sus malos pensamientos y decidió ver a Ivan como su verdadero amigo, al igual que Harry y Hermione.

Pero a Ron le incomodaba pensar que Ivan podría estar estudiando magia negra, que todo el mundo estaba ciego y que actualmente lo tenía todo. La idea seguía entrando en su mente de que si él mismo hubiera estudiado magia negra, no sería mucho peor que Ivan.

Inmensa fuerza, gran fama, adoración de los ojos de los demás, gloria suprema, y el afecto de Hermione... Todas esas cosas estaban inicialmente fuera de su alcance, pero de repente hubo un atajo, y sólo tuvo que extender su mano para llegar allí.

Ron tuvo esta fantasía, y luego agitó la cabeza y repetidamente se dijo a sí mismo que no lo haría.

A diferencia de Ivan, no degeneraría en el estudio de la magia negra. Una cosa así debería estar absolutamente prohibida.

Al escuchar las palabras de Ron, Hermione no contestó, negó con la cabeza desconcertada.

"Quiero decir, es posible que Ivan también cometa errores." Ron estaba insatisfecho con la reacción de Hermione, frunció el ceño y continuo: "Tenemos que tener cuidado, y si Ivan está trabajando en las magia negra ahora, tenemos que actuar."

"¿Qué quieres hacer?" Hermione parecía asustada.

"Todavía no lo he pensado, pero al menos debería detenerlo y publicarlo para que todos sepan lo que está haciendo. Es justo, ¿no?", dijo Ron.

"¡Escúchame, Ron!" Hermione respiró hondo y decidió decir: "Si quieres preguntar a otros lo que piensan sobre esto, no creo que el estudio de Ivan sobre la magia negra sea algo de lo que sorprenderse. Otros probablemente pensarían lo mismo, y esa es la razón principal por la que nadie cree ese ridículo rumor. Todos sabemos qué clase de persona es Ivan. Estudia la magia no para usarla, sino para aumentar su poder contra futuros enemigos poderosos".

"Qué noble razón. ¿A qué enemigos tiene que enfrentarse?" Ron despreció y dijo: "Pettigrew ha sido capturado. Esto es HOGWARTS. Dumbledore está AQUÍ, ¿Cómo puede haber enemigos?"

"¿Olvidaste la profecía que Ivan nos dijo el otro día en las vacaciones de Navidad?" Hermione dijo: "Voldemort volverá, y será más fuerte que nunca, con la ayuda de un elegido".

"¿Te refieres a la profecía hecha por la profesora Trelawney, pensé que nunca la habías creído?" Ron hizo un gesto con la mano con indiferencia. "Todos sabemos que está fingiendo de nuevo, engañando a Ivan para que la Navidad sea más emocionante."

"La profesora Trelawney puede ser una mentirosa, pero no puedes negar que podría hacer una profecía real." Hermione continuó, tratando de persuadir a Ron, "Además de esto, Ivan mencionó el Tesoro Secreto dejado por los Cuatro Fundadores. Debe haber algo que sabían que venía que les hizo dejar algo atrás"

"Es sólo que el mismo Ivan es el que dijo que lo había visto, o que había regresado a Hogwarts hace mil años. Nadie puede garantizar que sea verdad." Ron dijo con obstinación: "Incluso si los Cuatro Fundadores realmente dejaron algún objeto mágico, es otro asunto si funcionaría correctamente. Después de todo, ha pasado tanto tiempo que cualquier tipo de magia debería ser ineficaz!"

"Pero Ivan dijo que en la colonia de los Centauros en el Bosque Prohibido...", dijo Hermione.

"No cambies de tema, Hermione. Todos estamos hablando de Ivan investigando sobre la magia negra. No se trata de los Cuatro Fundadores o de los centauros en el Bosque Prohibido". Ron miró a Hermione y dijo expectante: "Ven conmigo a buscar pruebas, Hermione. Estoy seguro de que Ivan está trabajando en las Artes Oscuras. Podemos ir y descubrirlo. Siento que estoy a punto de llegar a la verdad".

"¡No, sea lo que sea, yo creo en Ivan!" Repitió Hermione otra vez, con una voz firme.

No había necesidad de ninguna prueba. Lo que Ron dijo, Ivan ya se lo había dicho, y ella también había tomado su decisión.

"¡Lo sé, yo también creo en él!" dijo Ron malhumorado mientras se ponía de pie: "No puedo entenderlo, ¿Qué les pasa a ustedes dos? Mírate a ti y a Harry. Parece que estoy haciendo algo malo otra vez. Sólo soy lo suficientemente amable como para recordarte que si no tienes cuidado, probablemente te arrepentirás en el futuro"

Atraídos por el grito de Ron, todos en el Gran Comedor se giraron hacia él con sorpresa, preguntándose qué había pasado y de qué estaba hablando.

Sintiendo la mirada de todos, Ron se sentó con la cara roja y las orejas rojas.

Unos segundos más tarde, al ver los ojos inalterados de Hermione, se quedó como un globo desinflado, diciendo impotente: "Bueno, tal vez tengas razón, soy demasiado sensible. Sabes, porque cuando se trata de magia negra, quiero ser más cuidadoso"

"¡Entiendo lo que quieres decir, Ron!" Hermione le dio una palmadita en el hombro a Ron y lo consoló. "Deberíamos tener cuidado. Convenceré a Ivan. Pero sigo diciendo que creo en él. Me prometió que nunca me defraudaría"

La esquina de la larga mesa de Gryffindor volvió a estar en silencio, y ni Ron ni Hermione hablaron. Desayunaron en silencio.

Los dos parecían tener sus preocupaciones y no sabían lo que el otro estaba pensando.