Pecado 150: La princesa de agua y el shinobi errante [Lemon +18]

Este capítulo es lemon por lo tanto habrá escenas para mayores de edad... realmente no se en que puede afectar a las personas pero dejo el aviso de todas maneras, si no quieres nada lemon te invito a pasar al siguiente capitulo, no te pierdes de nada debido a que no hay información importante sobre la historia.

Con amor Anon20K

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La habitación que antes había sido exclusiva para visitas donde antes estaba un paciente en estado crítico, donde antes estuvieron todos los líderes de las facciones ahora mismo estaba envuelta en un lascivo ambiente con la temperatura más elevada de lo normal.

Haru había atrapado a Sona entres su besos, las lenguas de ambos estaban entrelazadas y parecían danzar, cada vez que se quedaban sin oxígeno ambos se separaban un momento, se miraban y volvían besarse. Ninguno de los dos llevaba la cuenta de cuántas veces había hecho lo mismo y no tenían por que llevar la cuenta.

La mano de Haru instintivamente se movió hacia abajo donde estaban los broches del uniforme de Sona, no hubo impedimento del lado de la heredera Sitri y luego de un momento todo su pecho estaba expuesto, fui allí cuando ambos se detuvieron.

Sona se cubrió con sus brazos aun cuando tenía su falda y su ropa interior, su cara estaba roja y miraba a un lado.

"No voy a hacer nada que tu no quieras..." dijo Haru en voz baja "Solo tienes que detenerme"

Haru acercó su mano hacia Sona cuando esta abrió la boca otra vez "s-son pequeñas..."

"¿eh?"

"Son pequeñas si las comparas con Rias y Momo.... te decepcionaras" la voz de Sona temblaba y dejaba que Haru viera otra faceta de Sona que jamas antes habia visto, frente al pelirrojo estaba la Sona insegura y temerosa, era la primera vez que veía esta faceta pero de alguna manera le pareció tierno verla así.

Haru acercó su cabeza hacia Sona y dijo "No me importa el tamaño, eres perfecta tal cual eres... no me importa tu familia, no me importa tu facción, no me importan tus cargos ni tus defectos y mucho menos tu físico. Solo me importas tú tal cual eres"

"Haru yo..." El pelirrojo volvió a silenciar a Sona usando su boca, mientras la besaba las manos de Haru ayudaron para finalmente dejar a Sona expuesta al mundo.

Pero el pelirrojo no se detuvo allí, no había forma que se detuviera en ese momento. Las manos del pelirrojo recorrieron el cuerpo de Sona al mismo tiempo que le besaba el cuello dejando algunas marcas para el futuro.

Debido a la práctica como shinobi las manos de Haru tenían más agudeza y el lugar que seleccionaron se transformaría en una zona erógena debido al chakra en los dedos de Haru.

Los pezones de Sona estaban duros para cuando llegó la boca de Haru, como inexperta Sona jamas habia sentido las sensaciones de este momento mucho menos esperaba que Haru fuera la primera persona en llegar hasta ese punto.

"Ahhh..."

Aquellos gemidos llenaron la espaciosa sala mientras Haru se entretenía con los pechos de Sona. La mano derecha del pelirrojo finalmente había llegado a la zona más baja y aquel lugar que nadie antes había visto, el lugar más privado para la joven princesa de la familia Sitri.

En cuanto los dedos de Haru tocaron los labios inferior de Sona esta tuvo una reacción natural y cerró sus piernas haciendo que Haru riera levemente.

"¡No me culpes!" exclama inocente Sona con una expresión inundada de vergüenza

"¿puedo?" pregunto el pelirrojo con educación

"No te burles..." Sona comenzó a abrir levemente sus piernas cuando se fijó en un único detalle "soy la única desnuda"

"ah..." Haru miró hacia abajo y pronto lo comprendió, había olvidado la ropa interior que tenía cuando despertó de su profundo sueño, pero aquello no fue un problema ya que solo demoró un segundo y su miembro ya no estaba en restricción.

La boca de Sona se abrió cuando noto el tamaño del miembro de Haru "e-es mi primera vez" mencionó Sona

"Tendre cuidado"

Las piernas de Sona se abrieron levemente mostrando así su rosado coño, no hubo palabras pero este fue uno de los momentos por los cuales Haru agradeció haber muerto y llegar a este mundo.

No había necesidad de lubricar más a Sona, no había necesidad de seguir esperando. Haru puso la punta de su pene en la entrada de Sona, allí se detuvo un momento antes de comenzar a entrar lentamente.

El pelirrojo no buscaba hacer daño en el cuerpo de Sona, no buscaba un momento de diversion, esta vez no era solo sexo y Sona definitivamente no era solo una amiga en su corazon, esta vez era diferente a todos los momentos anteriores.

Sona se quejaba pero no dejaba que Haru se detuviese, no había necesidad ella lo dijo más de una vez ante el preocupado Haru.

El pelirrojo en un principio llegó a preocuparse pero luego comprendió que Sona tenía tanta o más determinación que él mismo en este momento.

Cuando Haru ya había insertado la cabeza de su pene en el interior de Sona cuando lo noto, allí estaba la pared que demostraba la experiencia de una persona, había resistencia pero no fue suficiente al fin y al cabo Haru no se detendría con solo eso.

Pero aun con la determinación de ambos fue imposible para Haru avanzar más allá de la mitad del camino, allí estaba el límite para Sona.

Sona intentó explicar pero Haru la detuvo, el pelirrojo no necesitaba explicaciones y no necesitaba decir nada. Haru simplemente se limitó a moverse en el interior de Sona, las caderas de Haru se movían lentamente haciendo que Sona gimiera pero al cabo del tiempo Haru se metió en ello y en cada embestida su pene entraba más en el interior de Sona.

'¡Ella está realmente apretada!' exclamó Haru en su cabeza mientras se sentía cada vez más presionado pero nada de eso una prueba final.

Los gemidos de Sona fueron cada vez más agitados a medida que Haru aumentaba la velocidad y pronto el pelirrojo sintió las uñas de la demonio enterrarse en su espalda pero no había dolor que lo detuviese "ya viene..." murmuró Sona en voz baja antes de llegar al clímax envuelta en un gemido.

Para Haru aquella fue la señal dejando salir todo dentro de Sona llenando su interior hasta el borde 'No estoy ni cerca de estar satisfecho pero creo que es suficiente para ella' dijo Haru en su interior al ver que Sona descansaba con los ojos cerrados en la camilla

Haru se puso de pie y miró la camilla lentamente "necesito una similar para hacer que esto pase desapercibido" Haru era ignorante del cartel fuera de su sala y como todos los doctores y enfermeras sabían que había sucedido en esa sala pero es una historia de otro momento.