Pasó bastante tiempo en la aldea, riendo y charlando de las aventuras del resto. Al volver a la casa, su cuerpo se ablanda, ha recibido varios golpes, pero solo los siente la parte humana, la cual ahora es la protagonista ahora. No ha visto ni a sus protectores, ni a Ethan. Pero eso se le acabó, hasta que la pilló pasando. Aún con la ropa de Salamandra. No se dio cuenta, su corazón comenzó a latir rápido, quizás la descubran.
_Mary- la voz grave del joven, la llama sorprendido. La chica se detiene. Su pelo está revuelto, algunos manchurrones de barro en la camisa y botas, y su cara pálida como siempre. Se acerca a él lentamente.
_Hola - responde nerviosa.
_¿De donde vienes....? ¿Y esa ropa...?
_Aahh... me la dio una amiga del mercado...Era de su hermano. Me caí y...me manché la ropa que llevaba. Pero... ya me voy a cambiarme - se da la vuelta y decide irse, pero la detiene de nuevo.
_¿Es que no vamos a hablar ? - esta pregunta la hizo retroceder, está cansada, lo que faltaba era hablar, cosa que no quiere.
_Esta bien, hablemos- se acerca a él cara a cara, lo huele, huele a ella- Entindo todo esto. Lo consiguió. Creo que lo mejor será dejarlo, lo nuestro no puede llegar a ser nada - Ethan no dice nada, quiere, pero no puede.
_Mary... No...
_¿Mary qué? Debí hacerle caso a Lourdes, lo nuestro no puede ser - se da la vuelta para irse pero la coge de la mano.
_¿Que te pasa? ¿Por qué estás así? ¿De dónde vienes? Con la ropa de un hombre - le aprieta la mano- ¿Acaso...?
_¿Cómo? - sorprendida se suelta fuerte- Ya te dije que era de una amiga. ¿Y tú? ¿De dónde vienes? Veo que solo huyes ? Mira, solo fue un impulso, me provocó y no lo pude evitar. Pero... -se acerca a él, algo le pasa, parece distinta - Ella se lo buscó. En el fondo...me gustó- le sonríe descaradamente, Ethan se extraña, nuca vio así a Mary, lo normal es que la chica sea tímida y respetable. Pero algo le pasa- Esos segundos, los disfrute a fondo- lo coge de la cadera y le aprienta la camisa, se acerca más a él, como si le quisiera besar. Ethan se deja, no sabe el por qué, pero no puede moverse. Parece que esta paralizado. Mary se deja ver un hombro desnudo y los pechos medio abiertos. Sus labios están muy rojos, sus ojos brillantes, su pelo seductor, lo hacen estar en trance
_Mary que haces ...- no puede evitar caer en su trampa. Es ella, su forma vampírica. Pronto llega su decimonoveno cumpleaños, se esta transformando en una chica nueva. Sus hormonas vampíricas, son lo que provocan esto.
_¿Que pasa? ¿Esque no te gusta? - se acerca a su cuello para besarlo- Pensé que te gustaban este tipo de mujeres - lo mira a los ojos. Gerard los interrumpe de la nada muy enfadado.
_¡¡Mary!! - la espera en el pasillo, está pone una mirada de insoportable, le sonríe por ultima vez a Ethan y se va lentamente, este recupera su postura
normal.
En un pasillo lejano, la regaña bajito.
_Pero que te pasa niña. No puedes hacer esto en mitad de todo. Además de donde llegas con esta ropa.
_Aarrgghh Gerard, estoy cansada, ya te lo contaré. Ahora solo quiero tumbarme y no hacer nada - se dirige a su cuarto.
_Pero...¡Niña! ¡Vuelve aquí! - por más que grite, Mary desaparece - ¿Pero qué le pasa?
La tarde es pesada, más el aire. Una vez en su habitación, se tumbó y se quedó dormida. Después de eso , se disculpó a su protector y le contó la verdad. Lo entendió. Los días pasan. Mary e Ethan intentan evitarse. Los dos tienen cosas y problemas de los que ocuparse. Todas las noches va a la aldea para entrenar, tanto con Salamandra como con Derek. Casansadra le enseña historia, libros y cuentos. Con Galia, la cual no se lleva tan bien, ya que esta odia a Mary por estar tanto tiempo con Trevol, lo que se llama, celos. Esta le enseña cosas de medicina vampírica. Y con Trevol, hace carreras, entrenan en mitad del bosque, le enseña estrategias. Durante esta semana, se hacen buena compañía. Aunque aún sigue Ethan dentro de ella. Alice, viene de vez en cuando a la casa, se ven pero está no hace nada malo a Mary. Esta semana fue extraña. Lo peor, llega mañana, justamente al salir la luna llena roja.