Reencarnación

—El tiempo apremia ahora mismo. No sabemos cuándo se cerrarán estas puertas de piedra. Una vez que lo hagan, incluso esta última oportunidad nuestra habrá desaparecido por completo para entonces —dijo la Emperatriz del Fuego y del Agua.

Lin Fan estaba un poco nervioso en ese momento. Sentía como si estuviera haciendo algo importante.

No solo eso, esa gran importante no era una cosa importante corriente.

En un primer momento, quiso afrontar todo con optimismo. Pero cuando vio las expresiones sombrías de todos los que lo rodeaban, no pudo hacer nada y poner solo un rostro solemne también.

En cuanto a Pollito y los demás, no iba a llevarlos para que no se convirtieran en un obstáculo. Después de todo, nadie sabía realmente cómo era el mundo. Si fuera demasiado peligroso, lo pasarían bastante mal.

—Emperatriz del Fuego y del Agua, por favor encárguese de ellos —dijo Lin Fan.

—No te preocupes, los cuidaré bien.