Capítulo 355 - Me duelen las pelotas

—Ejem.

Cheng You se dio cuenta de que probablemente había dicho demasiado. Si su jefe se enteraba de que lo había traicionado, se aprovecharía de ella, sin duda.

—Bueno, señora Li, por favor, no le diga que se lo he dicho. Considérelo un secreto entre nosotras.

Su Qianci sonrió.

—De acuerdo. Adiós.

—¡Adiós!

Su Qianci colgó y dejó escapar un suspiro de alivio. En su anterior vida, Cheng You la había llamado "señora". Después de su divorcio, la llamaba "señorita Su". "Señora Li" no sonaba tan mal. Condujo hacia una salida de la autopista. Resulta que estaba muy cerca de la empresa de Li Sicheng. Condujo de memoria y vio el edificio de arquitectura única en menos de dos minutos. El edificio del grupo Li era un ícono de Kingstown.