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2004

Tenia 6 años en ese momento así que bañarme sola no era algo que ya solía hacer, mi mama me esperaba afuera de la ducha con la toalla para secarme y poder pasar a la habitación para vestirme, nunca he sido cariñosa, no me gusta dar abrazos, aunque ese día fue la excepción, o quizá fue aquel día en el que decidí no volver a abrazar a nadie más

Mi mama me saco de la ducha y me puso encima del retrete mientras me ayudaba a secar mientras yo, cerré mis ojos y abracé a mi mama, ¿el problema? El problema fue que ella no estaba frente a mí, pero al tener los ojos cerrados no lo note y caí de cara contra el piso, solo sentí un dolor muy fuerte en mi boca, pensé que tendría un montón de sangre saliendo de ella, pero realmente no recuerdo eso, solo recuerdo escuchar a mi mama regañándome y luego ver a mi papa y mi hermana llegar a mi lado para ir al hospital, al llegar me ingresaron para revisarme y luego de eso me empezaron a hacer muchos exámenes y radiografías, afortunadamente no me quebré ningún diente pero mis encías quedaron completamente moradas, lo único bueno del día fue que les dijeron a mis papas que me debían comprar muchos helados para mantener mi boca fría ya que no sabían que tan flojos habían quedado mis dientes con el golpe, Por cierto, esas encías moradas fueron la primera señal.