Roctura

Pasos, el sonido de pasos resonó en mi habitación. ¡Mierda! ¡Qué jefe más imbécil! Otra vez me hizo trabajar más de la cuenta y ni siquiera me pagó. El joven en la habitación murmuró esto mientras caía agotado y adolorido en su simple cama. Yan es su nombre. Recostado, pensó en su vida. Yan acaba de cumplir 21 años, sin embargo, su vida era horrible. Al menos para él, siempre ha tenido grandes ambiciones: tener mucho dinero, hermosas mujeres rodeándolo, que sus inventos y teorías que aún estaban solo en su mente fueran reconocidos.

A Yan siempre le gustó la física y la biología, especialmente la modificación genética. Creía que la vida era capaz de todo. Sus más grandes sueños eran, primero, ser más rico que nadie; segundo, alcanzar la inmortalidad por sus propios medios, pero no cualquier inmortalidad, una donde sea inmune al daño y sufrirlo, una regeneración infinita capaz de traerlo de vuelta incluso si solo queda una célula suya, además de nunca envejecer.

Y finalmente, explorar el universo, el multiverso y las dimensiones para convertirse en un dios. ¿Qué más podía pedir Yan? No era un vago, siempre se ha esforzado por su sueño. Sus calificaciones eran las mejores desde los 16 años. Por medio de internet y trabajos en su país, creó muchos proyectos. Si alguno de ellos triunfaba, se alzaría poco a poco. Aun así, todo le salía mal. Sufría accidentes de todo tipo, muchas veces estuvo al borde de la muerte. Sus proyectos fracasaban, a la hora de buscar trabajo no lo contrataban. Solo pudo seguir hasta ahora porque lo contrató un carnicero. Sin embargo, la paga era pésima y el horario muy invasivo. Ocupaba casi todo su tiempo. Además, a veces llegaban a su mente pensamientos suicidas. Pero Yan era duro, para él, su sueño era más grande. Creía que el universo estaba contra él porque temía su potencial. Como sea, se liberó de sus pensamientos y comenzó a dormir.

Fuera del Juego, aún más allá, fuera del universo, un espacio vacío caótico lleno de innumerables burbujas, cada una un universo. De la nada apareció un objeto diminuto, una gota de sangre dorada. En su interior, una cantidad infinita de colores. La gota se movía a una velocidad incomprensible, incluso para la entidad más fuerte. El caos infinito se partía a su alrededor, dejando una estela blanca detrás de ella. Era la existencia misma, desgarrándose. La gota chocó con una burbuja dentro del universo. Se movió a gran velocidad. China, en una habitación, Tian Lon estaba jugando en modo de juego. A pesar de lo extraño del juego, le había gustado. Este juego era simple, tenías que lograr que el protagonista se suicidara. Si no lo lograbas, se convertiría en el villano más roto que había visto Tian Lon. Creía que si el villano en su Prime se encontraba con Saitama, sería la muerte de Saitama. Así de roto estaba este personaje. Claro, el juego no solo era eso, te daban varias opciones para causarle daño, causarle mala suerte y para darle pensamientos suicidas. Si no lograbas el objetivo, el juego cambiaba por completo. Podías crear ejecutores, del cual tú serías uno, con el objetivo de matarlo antes de que llegue a su 100 por ciento. Una lucha dura, pero con esperanza de victoria, porque el límite era hasta el 100, es porque después de que el villano llega a ese nivel, se convertirá en un ser invencible, el temible Modo juego.

Mientras Tian Lon pensaba, un rayo dorado golpeó su computadora. Fue capaz de ver que el rayo golpeaba a Yan en el juego. Sus ojos se abrieron de par en par, gritando "¡Imposible!"

Dentro del juego, un rayo dorado golpeó a Yan. Un dolor terrible golpeó su cuerpo. Revolcándose de dolor, se arrastró por el suelo. De repente, recuerdos extraños vinieron a su mente. Eran los recuerdos de Tian Lon. Al procesar estos recuerdos, se llenó de ira y confusión. "¿Yo solo soy un juego, un npc? Todo mi esfuerzo en vano." Yan cayó a su punto más bajo, la locura estaba cerca de dominarlo. Entonces, un timbre sonó en su mente, seguido de una pantalla que solo él veía y una voz femenina sin emociones sonó en su mente: "Actividad única. Modo juego. Despertado. Inicialmente, taza de despertar al 1 por ciento. Rango de actividad por encima de la entidad." Yan estaba desconcertado. Sabía que era un sistema, no esperaba que existieran. Calmándose un poco, se dio cuenta de que se sentía libre. Al parecer, ya no estoy bajo el control del jugador. "¿Qué puedes hacer y cuál es tu origen?" preguntó Yan, sobresaltado. "El sistema es una habilidad única de su personaje, escrita en su programación debido a la interferencia de una poderosa fuente de energía única. El anfitrión se volvió real y este sistema también. Además de verse potenciado, el sistema es capaz de fortalecer al anfitrión, así como de abrir puertas a otros mundos de juegos. Sin embargo, cada mundo en el que esté el anfitrión se volverá real, como acaba de pasar con el mundo actual." "¿Qué hablas? ¿En serio?" preguntó Yan, sobresaltado. "¿Este mundo se volvió real?" "Así es," contestó el sistema. "¿Hay alguna consecuencia?" "Sí, el conjunto de datos se volvió real de golpe, lo que ocasiona un posible choque con la realidad, es decir, el mundo real. A su vez, los seres de este mundo entrarán al mundo real, las leyes naturales cambiarán, dando paso al mana de este mundo al otro. En pocas palabras, un apocalipsis. Cualquiera de los mundos podría ser destruido. ¿Cuál es la posibilidad de que un mundo sea destruido

—según los cálculos un 50 por ciento por ambos lados desea ir al mundo real

Con una sonrisa Yan miró a su alrededor y dijo con júbilo alzo un sonido similar al sonido de vidrio roto resonó seguido de la ruptura del espacio tiempo un portal se abrió negro como la boca del lobo Yan se adentró en el portal esperando lo mejorque un mundo sea destruido

—según los cálculos un 50 por ciento por ambos lados desea ir al mundo real

Con una sonrisa Yan miró a su alrededor y dijo con júbilo alzo un sonido similar al sonido de vidrio roto resonó seguido de la ruptura del espacio tiempo un portal se abrió negro como la boca del lobo Yan se adentró en el portal esperando lo mejor