Caputlo 12

Viernes, 7 de enero de 2019

Paulina

Y entonces son las 4am y Hunter está dormido y yo estoy cansada de dormir. Dudo que Alex esté despierto a esta hora, pero todavía no puedo creer que dormí un día entero y solo salí para comer. Decido levantarme sin que Hunter se de cuenta, abro la puerta un poco para ver si Alex no estaba cerca. Afirmativo, la puerta de su cuarto está abierta.

Cierro la puerta, y me entro al baño para ducharme. Pasan diez minutos y salgo de la ducha, entro a mi closet y sacó lo más cómodo. Unos sweat pants, unas medias y una camisa de Hunter que estaba ahí. Es ancha así que me gusta. Salgo del closet y abro de nuevo la puerta de mi cuarto, no veo señales de Alex por ninguna parte.

Salgo silenciosamente, y bajo las escaleras. Podía ver a Alex en su habitación dormido. La casa está oscura, me traen recuerdos que quisiera borrar pero no puedo. Entro a la cocina, siento como alguien me mira, no hay nadie cerca de mi ni por los alrededores de la casa. Saco la leche y un cereal. Me siento en la barra del comedor.

Todavía puedo sentir que hay alguien mirándome. Pero no hay nadie, nadie esta cerca. No hay nadie, Paulina reacciona. No hay nadie, y si hubiera alguien le das una patada en donde no da el sol y ya, okey, cálmate Paulina. Estas sola no pasa nada, Hunter esta arriba y Alex también. Si hay alguien solo grita y ellos llegan.

Okey, Paulina solo cálmate... pero no puedo, tengo esos recuerdos de esa noche. Es como si tuviera una maldición. No quiero comer, no me quiero parar, esos recuerdos no paran de fluir, puedo sentir como una lagrima baja por mis pómulos. No siento mi cuerpo, estoy paralizada mirando a una ventana.

Puedo ver como el está mirando, mis recuerdos me atormentan. No puedo hacer nada, solo llorar mientras lo miro a través de la ventana. No puedo gritar, necesito ayuda. No paro de mirar a la ventana, el está ahí, está ahí. Lo puedo ver, puedo ver como me señala, como su respiración empaña el cristal. Temo por mi vida una vez más, una vez más necesito a alguien que me ayude. Solo a alguien, por favor.

No paro de llorar, y solo puedo a Joel en esa ventana. Los recuerdos me inundan, como abuso de mi, como me utilizo, como me patio hasta vomitar sangre. Todavía siento esos dolores al el darme. Me señala, siento como sus manos me agarraban y me tiraban contra el piso. Necesito ayuda, no me puedo mover, no puedo hablar estoy paralizada.

Paro de verlo en la ventana, creo que eso era mi mente jugando conmigo... siento la presencia de alguien. Era Hunter cierto... no, no, no, no, no. Es Joel.

-Aléjate! Joel! Aléjate de mi!- ahí caigo al piso llorando. - Solo aléjate, aléjate...-

Escuche unas pisadas no pude reconocer quien era de tanto llorar.

-Pau, soy yo, soy yo. Estoy aquí-

- Aléjate...- susurraba -Hunter... ayúdame, por favor. Aléjalo, por favor...- ahí me fui, no recuerdo nada más.

Alex:

Escuche a Paulina gritar, se escuchaba desesperada. Me levante lo más rápido posible, veo a Hunter que está corriendo bajando las escaleras. Jamás pensé que el se preocupara por ella tanto. El la odiaba hace unos días y ella también. Que pasó que ahora se aman?... bajo las escaleras y llegó hasta la puerta del comedor. Veo como Hunter tiene a Paulina en sus brazos. Tanto egoísmo en una persona, y decide dejar lo todo por ella.

Escucho a Hunter hablar -Pau, soy yo, soy yo. Estoy aquí.- mi hermano dejo todo su orgullo por ella. Como una mujer puede cambiarlo tanto.

Paulina solo estaba en sollozos en sus brazos lo único que susurraba era "Aléjate, Hunter ayúdame, por favor aléjalo, por favor." Pude ver como se fue, se desmayó. Hunter me mira, la coge en sus brazos y se para. Cuando se acerca para salir me mira a los ojos y me susurra -Yo sabía lo que le había pasado, todos lo sabíamos. Ella estuvo desaparecida por una semana, te crees que no lo iba a saber?- y ahí bajo una lágrima. Mi hermano, Hunter, Christopher estaba llorando.

Pero como yo no supe que ella se había desaparecido?! Sigo a Hunter hasta la habitación de Paulina, veo como el la pone en su cama. Se ve tan frágil, Hunter la arropa y cierra la puerta.

Hunter me mira y me dice para ir a hablar en la sala. Bajamos y el se sienta con sus manos en su cara.

-Hunter como es que estuvo desaparecida?- me mira y suspira.

-Una semana, una puta semana sin saber en donde ella estaba. Hace tres años, no le daban estos episodios, tuviste que llegar y arruinarlo. Alex, todos sabemos lo que le pasó, pero su familia decidió el decirle que nadie lo sabía solo ellos. Paulina no se acuerda, para ella solo despareció una noche. Pero fue una semana y cuatro días en el hospital. Por poco muere de una sobredosis. Y sabes quien fue el que la secuestró?-

Lo miro y esta serio -quién?-

-Tú mejor amigo, Joel. Paulina estuvo una semana entera siendo abusada, golpeada hasta vomitar sangre, cada día le inyectaban cosas para que no despertara. Solo se acuerda de él peor día. Por eso estaba pidiendo ayuda. Ahora te crees que rompiste su confianza?-

-Si, porque me preguntas?- me mira y es como si me quisiera matar.

-Porque, no fue solo su confianza fue la de todos...- se quedó callado mirando el piso. - ahora sabes que fue lo más fuerte? El yo alejarme de ella, cuando te fuiste ella te odio y después yo me tuve que alejar de ella por precaución. Y ahora tal vez todo el mundo me odie, porque soy el hermano del mejor amigo del que la violo. Pero aún así daría lo que fuera por ayudarla, ahora tu darías lo mismo?- ahí se paro y se fue a la habitación de Paulina.

Me quede paralizado con lo que me dijo. Mi hermano, daría lo que fuera por ayudarla y yo no daría nada. Yo soy el egoísta de todos, solo aparezco cuando necesito. Ya Alex para de pensar tanto. Me levanto del sofá y camino hacia la cocina, No era la imaginación de Paulina Joel estaba ahí con una sonrisa más amplia que mis ojos en estos momentos.

Cojo el plato de cereal de Paulina y lo lavo. Me acerco a la ventana y la abro. Lo saludo y me pregunta -Porque estas en esta casa? Esta es la casa de Paulina.-

Lo miro con seriedad -Y porque estas aquí si se supone que estes lejos de ella?-

-Escuche que estaba devuelta y decidí pasar para preguntarle a Christopher, pero vi a Paulina y fue como si los mejores recuerdos de mi vida volvieran.-

-Joel, eres un sucio, un cabron. Porque le hiciste eso, eh?-

-Tú te fuiste y ella no tenía quien la protegiera, pero ahora si. Ahora estas tu y Christopher. Y aunque sea la puedo atormentar sin tocarla.-

Escucho como lo llaman. Miro y era la policía. -Joel, solo te dimos un mes de libertad y lo primero que haces es ir a la casa de ella.- el agente los esposa y se lo lleva.

-Malditasea, Alex! Enserio?! Enserio tenias que saludarlo!- Solo escucho la voz de Hunter. -Paulina está aquí y tú decides saludar al que abuso de ella? Vaya me das vergüenza. Espero que hagas lo correcto.-

Vaya tantas cosas han pasado y ni se que hora es, miro el reloj de la cocina y son las 8:30am. Vaya, me voy a acostar.

Subo las escaleras y cuando paso por el cuarto de Paulina puedo verla recostada en el pecho de Hunter dormida con su frisa. Cierro la puerta de su habitación ya que Hunter me miro mal. Camino hacia mi habitación, más bien la de visita. Me recuesto y me duermo.

Hunter:

Verla, tan destrozada. Me acuerda a ese día cuando la vi salir del hospital. No tenía casi conocimiento, escuchar como su madre le decía que se había desaparecido por una noche y alguien abuso de ella me destrozo. Apenas tenía quince años, quince años! Y ella no podía. El saber que la vi en sus peores momentos me lastima más.

-Hunter?- bajo mi mirada.

-Aquí estoy-

-Gracias, gracias por salvarme...- se volvió a quedar dormida. Apenas son 9am y ella no para de llorar mientras duerme.

La odiaba tanto, nos odiábamos tanto y ahora somos inseparables. Si Alejandro tan solo supiera...

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