¿¡¿Estás diciendo que soy una rana?!?

—Porque… hay una cosa escrita allí que puedo leer fácilmente… —El rostro de Sara cambió. Y en lugar de la mirada afligida en su rostro, obtuvo una mirada que le demostró a William cuán determinada estaba—. ¡Dice: Elemento de Espíritu Latente!

—¿Qué…?!!! —William recibió un impacto instantáneo por sus palabras. Simplemente tropezó accidentalmente con ella, se encontraron por pura coincidencia. Que él descubriera su elemento espiritual latente era algo que no fue ideado o planeado por nadie o nada, sino por el destino.

Y aún así lo que encontró coincidía exactamente con lo que decía el extraño pergamino. William solo podía pensar en una explicación tras superar su shock y duda.

«¿No me digas que corre por la línea espiritual de la familia de su madre?» Esta era la única explicación que tenía sentido para él. Y sin embargo, sabía que esto no era posible.