La encontré...quizás

—¡Es como perseguir a un fantasma, señor! —La persona miraba las dos señales en el rastreador GPS y estaba tentado de tirar de su cabello. La primera señal se movía de manera impredecible mientras que la segunda señal se mantenía quieta. Sus equipos ya se habían dividido en dos. Uno rastreaba a través del bosque mientras que los otros se sumergían en el lago.

Quería decirle a Demetri Frost que quizás los secuestradores habían descubierto ambos rastreadores GPS y, por lo tanto, se habían deshecho de ellos, pero el hombre parecía insistir en que su esposa estaba aquí. No tenía ni idea de cómo podría estar en medio del lago. Pero decirle eso al Demonio Frost sería una pérdida de tiempo. Según su criterio, sólo había una manera en la que Nora Williams podría estar en el lago. Y eso sería si ya estaba muerta. Sin embargo, no se atrevía a decirle eso a ese hombre.

Justo entonces, escuchó el sonido de camiones grandes retumbando y miró al hombre con una pregunta difícil.