Capítulo 26: Reunión (Parte 2).

"Gracias Deanna, como todos me conocen, Soy Jessie Anderson, mi esposo y mis dos hijos vivimos aquí, y mi pregunta es ¿Todos son bienvenidos en EDEN?" Jessie miró a Kai mientras hacía su pregunta.

"Esa es una buena pregunta Señora Jessie, la verdad es que no, no todos son bienvenidos en EDEN, pero antes de que alguien se ofenda, déjenme explicar…" Las personas que parecían estar por protestar, decidieron escuchar: "EDEN es un lugar que necesita buenas personas, buscamos calidad sobre la cantidad, en la actualidad, hay más personas que solo quieren buscar una pequeña esperanza de donde aferrarse para sobrevivir, no importa lo que tengan que hacer, pero también hay otras personas que estarían dispuestas a contribuir en una comunidad, con todo lo que tienen, solo por un futuro mejor…"

"Eso es lo que yo busco, eso es lo que busca EDEN, en EDEN todos contribuimos" Todos los escucharon esto se pusieron a pensar, pero también hubo personas que parecían no tener ni una pizca de cerebro.

Y no tardaron en alzar la voz.

"¡Eso es una mierda! ¿¡Qué te da derecho a escoger entre las personas!? ¿¡Acaso no somos todos iguales!?" En este momento Deanna se sintió avergonzada, quien había levantado la voz no era otro que su hijo Aiden, le dio una mirada de disculpas a Kai, quien ni siquiera tuvo esto en cuenta.

Todos los que escucharon a Aiden no se levantaron a gritar, pero miraron a Kai como si lo estuvieran juzgando.

"Bueno, lo que me da derecho a escoger es que soy el líder de EDEN y todos han puesto sus esperanzas para un futuro en mi" Kai se encogió de hombros mientras su rostro no mostraba ninguna emoción mientras hablaba, al mismo tiempo le dio una mirada a Lyra que se encontraba presente, recostada contra una pared, para que se calmara, ya que por la mirada que tenía en su rostro, ya estaba lista para quebrar el cuello de Aiden: "Y la verdad es que no, no todos tienen el mismo valor" Le dio una mirada a Aiden que le heló la sangre, ya que era como si Kai le estuviera diciendo con la mirada "Tú no tienes ningún valor".

"Verán, déjenme explicarles a todos, porque no todos tienen el mismo valor, pongamos un ejemplo que siempre se ha usado, gente buena y gente mala" Siguió hablando bajo la atenta mirada de todos: "En mi comunidad, todas las personas buenas son bienvenidas y sobre todo que sean útiles, personas como maestros, electricistas, doctores, y también se les dará la bienvenida a aquellos que estén dispuestos a recibir entrenamiento de combate para convertirse en soldados de la comunidad…"

"Pero la gente mala…" Por algún motivo, varios en la sala sintieron una extraña opresión en su pecho, y estaban temblando de forma inconsciente, unos de ellos eran el esposo de Jessie, Aiden, Spencer, y una rata cobarde llamada Nicholas.

Kai había activado la intención asesina, irradiando su sed de sangre a ciertos individuos.

"La gente mala, en mi comunidad no tiene derecho a existir, los pedófilos, violadores, psicópatas, etc, no importa si antes eran doctores, o algo por el estilo, serán asesinados cuanto antes, el futuro no necesita gente como ellos" Todos se quedaron en silencio, nadie sabía que decir ante las palabras de Kai.

"¿Qué hay de los asesinos?" Con una mirada, Kai giró su cabeza y notó que quien había hecho la pregunta, era un hombre blanco, con cabello castaño corto, ojos marrones oscuros, y a simple vista se veía muy amable, estaba vestido con un pantalón marrón de gala, así como con zapatos negros de gala, y una camisa a cuadros azul que estaba abotonada hasta el último botón de arriba.

Tenía los dedos entrelazados con otro hombre.

Solo con esto, Kai ya sabía que se trataba de Aaron.

"En la actualidad, me atrevería a decir que muchos somos asesinos, incluyéndome, ya que a pesar de que solo he matado personas malas, matar es matar" Kai se encogió de hombros, a el no le importaba lo que la gente pudiera pensar de él, no iba a mentirles y decirle que sus manos estaban limpias de sangre, eso lo convertiría en un hipócrita.

Todos se sorprendieron por esta respuesta de Kai, ya que confirmó que había matado personas, y no dijo caminantes, dijo personas.

El temor parecía haber comenzado a aflorar, en el corazón de todos. Kai vio esto, pero la verdad no le importó.

Pero no esperaba que personas de su grupo salieran a defenderlo.

"No se atrevan a ver a Kai como si fuera un monstruo…" Los presentes en la sala voltearon la cabeza hacía un lado, para que habían hablado dos voces al mismo tiempo, y las dueñas de estas voces eran un par de gemelas rubias y hermosas.

"Kai ha matado, pero mató para salvarnos a mi hermana y a mi" Esta fue Angelica que tenía una mirada fría dirigida hacía estas personas que ya le habían caído mal, solo por la manera en la que vieron a Kai: "Estábamos en nuestra granja, a punto de ser violadas por un grupo de 14 hombres, amarraron a nuestro padre e iban a forzarlo a ver todo, pero en el momento en que ya solo faltaba que nos quitaran la ropa interior…"

Angelica pareció tomar un pequeño respiro, ya que recordar todo ese día aun hacía que el pecho le doliera un poco, y con esto también evito que sus ojos se pusieran rojos y pudo seguir hablando: "Fue cuando Kai apareció, como un héroe, saltó por la ventana de nuestra sala, rompiéndola en el proceso, y al ver la situación, no dudó en tomar un arma y disparar… es algo chistoso ¿No?, era una situación de catorce contra uno, donde todos los demás habrían escapado por sus vidas, el no lo hizo, ¡Él se quedó, peleó y ganó!..."

"No salvó a mi hermana y a mí ese día, desde ese día lo seguimos, y nos quedaremos con él hasta el fin de los tiempos si es necesario, por eso… ¡No dejaremos que lo miren como un monstruo! ¡Los monstruos eran esos catorce hombres! ¡Kai sin duda alguna es un héroe!"

Al notar que su cara de poker estaba por romperse, Angelica salió caminando muy tranquila del lugar, iba de regreso a la casa, necesitaba calmarse.

La gente de Alexandria al escuchar lo que dijo Angelica, se quedaron mudos, sus miradas hacia Kai cambiaron mucho, ya que, si ellos se pusieran en el lugar de Kai, en la misma situación, sin duda alguna, hubieran escapado.

Kai al ver el arrebato de Angelica, se sintió cálido, era lindo pensar que había personas que lo consideraban un héroe, cuando él mismo estaba seguro de que no era uno.

El no salvaría a todos, solo salvaría a quienes el importan y ya.

Mientras el tenga a la gente que le importa con él, el resto del mundo podría joderse.

Incluso ese día, él no las salvó porque fuera alguna clase de héroe, las salvó porque la situación lo enojó, hasta el punto de la furia, el ya no veía a esos tipos como hombres o personas, las veía como cerdos, no los cerdos son mejores, eran cosas peores que la basura misma.

"Bueno, creo que ya es bastante tarde, y todos tienen cosas en que pensar, la oferta del señor Kai estará lista para todo aquel que desee acompañarlo, pero también deben saber que Alexandria estará en una alianza con EDEN, a partir del futuro, y que la oferta siempre estará en pie" Deanna que notó que el humor ya no era el mismo, decidió dar por terminada la reunión, y despidió a todos.

-Tiempo después-

De regreso en su habitación.

Kai se encontraba acostado contra el espaldar de la cama, mientras Maggie lo estaba abrazando por la cintura, ya profundamente dormida.

En serio, Kai desearía que hubiera una manera de apagar temporalmente esa función del cuerpo de jugador.

[¿Desea desactivar la restauración de estado temporalmente?]

[Si/no]

"¿¡Ahora es que me dices que puedo activarlo y desactivarlo!?" Kai preguntó enojado en su mente, pero no recibió respuesta alguna.

Solo desactivó la opción, de todas maneras, puede activarla cuando de verdad la necesite.

Luego bajó su cuerpo hasta que su cuerpo se recostó por completo en la cama, sintió la funda del colchón que se pegaba contra su espalda, una sensación que había perdido hace mucho tiempo al dormir, se abrigó bien con la manta que lo cubría y se durmió en el abrazo de Maggie.

Que al sentir el cuerpo de Kai mientras dormía, lo abrazó de forma inconsciente.

-Día siguiente-

Kai y su grupo partieron a buscar el lugar conocido como el reino, aunque nadie más sabía de esto además de Kai.

Solamente estaba guiando al grupo en dirección hacia donde él creía que podrían encontrarlo.

Debía asegurarse de conseguirlo, tenía que saber si ya habían conocido a los salvadores, o si aún no se habían formado.

Ya que, en la historia, nunca se especificó en que momento se formaron los salvadores con exactitud, solo explican el origen la actitud tan despiadada que tenía Negan.

Y así comenzaron el viaje hasta las afueras de Washington.

Pero hubo algo que llamó la atención de todos mientras iban por la carretera.

Todo parecía ser igual, mientras andaban, igual que siempre, los árboles, las carreteras, los suelos de tierra a un lado de la carretera que conducían hacia el bosque.

Pero esta vez al costado de la carretera, había algo más.

Era una chica, tal vez de unos 12 o 13 años, con la piel blanca sucia llena de tierra, y sangre seca, así como su cabello atado en una cola de cabello, era castaño, y se notaba que llevaba mucho tiempo sin ser lavado.

El camión se detuvo al lado de ella, que pareció ni siquiera responder, solo se quedó quieta en su lugar mientras miraba al camión.

"Yo iré" Fue lo que dijo Theodore, ya que era el que estaba más cerca de la salida del camión, se puso de pie, y de un salto bajó de la parte trasera del camión.

Todos lo vieron como se acercó hasta la chica, que parecía haberse puesto en guardia.

Pero en ese momento se fijaron en algo, muchos caminantes comenzaron a salir del interior del bosque en dirección a los camiones.

Kai lo comprobó en su mapa, y vio que fácilmente, había mas de 1000 caminantes que venían en su dirección, la verdad es que le gustaría quedarse a pelear, pero si rodeaban al camión no podrían irse si algo salía mal.

"T-dog, vienen caminantes, debemos movernos" Esta fue una orden de Kai, que lo dijo a través de una de las ventanas de tela que se encontraban al costado de la lona que cubría el camión.

Esto llegó a los oídos de T-dog, e inmediatamente se acercó a la chica, que parecía no tener ninguna fuerza, probablemente llevaba días sin comer.

Incluso a pesar de que trató de alejarse, la levantó como si fuera un saco de papás y se subió con ella de regreso al camión.

Y ambos camiones inmediatamente arrancaron, dejando atrás un mar de caminantes que se estaba formando.

Lo bueno es que no iban en dirección a Alexandria, pero los venían siguiendo en la misma dirección en la que se fueron.

Nadie le prestó importancia, pero esto se convertiría en un pequeño problema en un futuro cercano, para cierta comunidad que se encontraba en la dirección en la que se fueron.

Esa es la magia de los caminantes, que se mueven con mentalidad de rebaño, los caminantes siguen la misma dirección en la que se mueva la mayoría.

-De regreso en el camión-

T-dog había puesto a la chica en medio del camión, y la sentó en el piso de chapa metálica.

Al verla más de cerca, y ver que tenía ojos verdes, junto con un jean ajustado, y una camisa gris de manga normal, y con zapatos deportivos, y con una mochila grande en su espalda, se le hacía muy familiar a Kai.

Fue Daryl quien sacó de su mochila, una ración de comida militar junto con una botella de agua, y se las entregó a la chica.

Los ojos de la chica se abrieron como platos, como si no hubiera comido y bebido en mucho tiempo, lo que era algo obvio y comenzó a comer con desesperación y a beber el agua en tragos grandes.

Parecía muy desesperada, como si sintiera que las cosas iban a desaparecer en cualquier momento.

Luego Kai miró el nombre de la chica que tenía encima de su cabeza y sorprendió. Jamás pensó que encontraría a…

Fin aquí.