CAPÍTULO 16- Día de descanso.

CAPÍTULO 16- Día de descanso.

—¡Bien, hoy es nuestro día de descanso, Yuik! ¡Debemos disfrutarlo!

Los días de descanso en un trabajo aburrido se sienten muy relajados y tranquilos.

Debemos disfrutarlo.

Saqué una hoja de papel y comencé a leerla.

—Según lo que investigué en internet, los compañeros de trabajo acostumbran a pasar su tiempo libre con sus familias y beben por las noches… Pero nosotros no tenemos familias, así que omitiremos eso… ¿Bebes alcohol, Yuik?

Ella asintió y escribió en su libreta: "Nunca lo he bebido, pero me interesa conocer su sabor".

—Entonces beberemos en la noche.

El alcohol no tiene efectos en mí, pero le haré compañía a Yuik para que no beba sola.

—También descubrí que los amigos normales van a los parques de diversiones, al karaoke, al cine y a las piscinas públicas… Ya hicimos lo del cine, así que omitiremos esa.

Yuik asintió.

—Bien…

Piscinas públicas… No… Yuik es demasiado tímida y no le gusta atraer las miradas… Y es hermosa… Mejor no. No es buena idea que use un traje de baño.

Karaoke… No tengo tanta experiencia con eso… Fui algunas veces en mi vida pasada con mis novias, pero siempre terminaba aburrido y acosado sexualmente.

Solo queda el parque de diversiones. Afortunadamente, siempre hay uno disponible en esta ciudad.

—¿Quieres ir a un parque de diversiones?

Yuik asintió.

—Perfecto. Vámonos.

•

•

Llegamos a la parada de autobuses.

Las personas normales usan el autobús... Aunque también podría comprar un auto... Pero me da flojera darle mantenimiento.

Ahora debemos esperar.

—Na... Na... Mmm... Esperar es aburrido.

—Oye, que linda chica.

—¿Cómo te llamas, preciosa?

Yuik comenzó a temblar de miedo... Esos dos idiotas son los típicos chicos que se creen fuertes... Delincuentes.

Tienen el cabello rubio y piel bronceada... Sí, son un cliché.

... Hay dos personas por la zona que pueden verme... Debo usar eso otro.

—Oigan, idiotas, no intenten coquetear con ella.

—¡¿Eh?! ¿Y qué harás para evitarlo, chico lindo?

—¡Podemos hacer lo que queramos!

Uno de ellos estuvo a punto de tocarle los pechos a Yuik, pero le tapé los ojos a Yuik y le corté las manos a ese idiota con mi propia mano.

—No mires, Yuik.

—¿Eh...? ¡¿Eh?!

Él cayó al suelo y comenzó a gritar.

—No abras los ojos.

Le di un fuerte golpe en la cara al segundo y cayó al suelo.

—Ustedes tienen un alma malvada, pero no han cometido crímenes tan graves que merezcan el castigo de la muerte. Lo más malvado que han hecho creo que sería el acoso sexual... Pero cometieron el error de molestarme... Y eso es un gran error. ¿Por qué? Porque mataría a cualquier persona por el simple hecho de molestar a mis amigos, sin importar género, edad o estatus social.

Puse mis manos en sus rostros y fuego comenzó a rodearlos.

Sus gritos de dolor son satisfactorios.

En menos de 30 segundos, se volvieron polvo y guardé la basura en mi [Almacenamiento mágico].

Limpié el aire y el suelo... Bien, ya está todo listo.

Me senté y desactivé el campo de insonorización que puse para evitar que Yuik me escuche.

—Listo, ya puedes abrir los ojos.

Yuik abrió los ojos y me sacudí las manos.

—No te preocupes por las dos personas que podían vernos, usé magia de ilusión para que pareciera que esos dos se fueron de aquí... Ahí viene el autobús.

El autobús llegó y subimos... Hay un asiento disponible... Qué suerte la nuestra.

—Yuik, me duele el trasero, no puedo sentarme. Siéntate tú.

Le dije eso porque sé que trataría de negarse si le decía que se sentara. Prefiero evitar discutir.

—G-gracias.

¿Eh?

Yuik se sentó en el asiento.

... Las maldiciones son muy poderosas... Una persona normal no podría pronunciar ni una letra.

Pero Yuik dijo una palabra completa.

... ¿Qué tan poderoso soy como Vampiro? ¿Yuik se volvió poderosa?

Eso es bueno, pero solo espero que el poder no la haga cambiar.

•

•

Bien, ya llegamos.

Un parque de diversiones... Hace mucho tiempo que no vengo a uno.

Compré las entradas VIP. Nos permitirán subir a cualquier juego mecánico sin tener que esperar.

Son muy, muy caras, pero el dinero no es problema.

Creo que las entradas que compré solo las compran las personas ricas, pero no me importa el dinero.

Y valió la pena venir a este lugar. Yuik está muy emocionada.

Hemos hecho un gran progreso con su estado mental.

Cuando la conocí, no dejaba de temblar de miedo y evitaba mirarme.

Ella dejó de tenerme tanto miedo y hasta puedo acariciarle la cabeza sin que se asuste.

Todo el tiempo que pasé con ella valió la pena. Ya podemos considerarnos amigos reales.

—Yuik, ¿te dan miedo las alturas o las velocidades?

Ella dijo no.

—Fufu. Ven conmigo.

•

•

Yuik levantaba los brazos, imitando a las personas que estaban delante de nosotros en la montaña rusa.

Pensé que se asustaría, pero sigue con la misma expresión.

No está asustada, está muy emocionada... Emocionada de buena manera... Se está divirtiendo.

... Tal vez le pasó lo mismo que a mí... Es poco probable, pues no creo que hubiera razones por la cual sonreír cuando ella era una esclava sexual.

Pero debo asegurarme.

•

•

Bajamos de la montaña rusa... Fue divertido, pero es momento de confirmar mis sospechas.

—Yuik, ¿te divertiste?

Yuik asintió rápidamente.

—Me alegra escuchar eso... Yuik... ¿Por qué no sonríes?

—...

Ella escribió en su libreta: "Lo siento".

—Creo que fui malinterpretado... Ven conmigo.

Nos sentamos en una banca y suspiré.

—Mi madre me golpeaba cuando me veía sonreír. Le daba asco mi sonrisa... Es por eso que yo tenía la misma expresión que tú tienes... Me acostumbré a no sonreír... Y cuando intentaba sonreír, recordaba lo que mi madre me hizo y no podía sonreír...

Volteé a verla y sonreí.

—Como puedes ver, ya superé ese trauma... Y también tenía un trauma con el sexo... Cuando tuve sexo por primera vez con mi primera novia, no podía evitar recordar cuando era violado... El miedo invadió mi cuerpo y quise llorar... Pero sabía que debía superarlo, así que seguí adelante e ignoré esos recuerdos... Con el tiempo ya no me importó mi pasado... Yuik, yo tampoco sonreía, pero logré superar mi trauma... Así que quiero ayudarte a superarlo... ¿Te duele sonreír también?

Yuik se quedó inmóvil por 10 largos segundos, pensando.

Comenzó a escribir y después me enseñó lo que escribió.

Decía: "Nunca hubo razones por las cuales sonreír en mi antigua vida. Me acostumbré a no sonreír... Lo siento... ¡Pero puedo sonreír si tú quieres!"

—... Yuik...

Ella intentó sonreír, pero puse mi mano en su boca y la detuve.

—No, Yuik. No lo hagas. Como te dije antes, eres mi amiga, no mi esclava. A mí no me importa que no sonrías. Pensé que era por un trauma, pero solo es porque te acostumbraste a no sonreír. Solo sonríe cuando realmente quieras hacerlo.

Me levanté.

—¡Bueno, no perdamos más tiempo!

Yuik asintió y se levantó.

Comenzamos a caminar juntos.

Bueno, supongo que no debo preocuparme por su rostro inexpresivo. Se acostumbró a eso.

Entonces solo faltaría que ella supere su miedo de hablar con las personas y de ser vista por otros.

Eso es lo más difícil, pero creo que puedo lograrlo.