Capítulo 5.

Capítulo 5.

Ha pasado una semana de lo sucedido aquella noche, mi vida a estado normal, con la rutina de siempre. Estoy trabajando y falta poco para terminar mi turno, hoy a sido un día agobiante por la cantidad de clientes, estos días han estado viniendo muchas personas, por lo tanto, más trabajo para mi.

Me dirijo hacia mi última mesa del día, y no puedo creer lo que ven mis ojos, es que la mala suerte me pisa lo talones y se burla en mi cara. Delante de mis ojos esta Black men y los pijos, y yo pensado que me había librado de ellos para el resto de mi vida.

-Buenas tardes, bienvenidos a Sweet Home, que desean?.- Hablo lo más cortes que puedo, es mi trabajo al fin.

-Queremos dos hamburguesas, un plato de pasta, y tres gaseosas.- Su voz hace que se me erice la piel, sigue siendo igual de profunda que la última vez.

-Algo más?.- Estos simplemente hacen seña que no, así que me marcho de ahí, lo más rápido que mis pies puedan.

Luego de eso, les entrego su orden y me toca esperar a que terminen para marcharme. Unos 20 minutos después, pagan y se van, libre al fin. Cierro mi jornada, creo que iré primero a la casa de Sara, después a la mía.

Salgo de ml restaurante, cambiada con mi ropa de llegada, y voy directamente al auto, pero no llega gracias a una intercepción frente a mi. Frunzo el seño al no ver quien es, solo veo una camisa negra, doy varios pasos hacia atrás para observar mejor el obstáculo de mi camino. Y sigue la mala suerte riéndose de mi, el chico que tengo en mi cabeza desde dias y que ahora tiene cara de cómo decirlo...¿furioso?...¿Pacífico?....tal vez...¿tranquilo?. No lo sé, sus ojos y facciones no demuestran nada.

-Quítate de mi camino.- lo miro directamente a los ojos, se lo dije sin ningún tipo de temor, por que no me da miedo en lo más mínimo.

-La princesa tiene agallas, acaso no sabes respetar y encima tener a tus superiores?.- Y este quien se cree, el rey del mundo? Más idiota y se le cae la personalidad.

-Que sepa yo, no eres mi jefe, ni mi superior, ni mucho menos mi padre, para decirme que hacer y no hacer, te lo digo por última vez-. Doy varios pasos hacia el hasta quedar a una altura suficiente para captar toda su atención.- Quítate de mi jodido camino, y vete a ser tu cosas de mierda lejos de mi.

Diciendo esto, pasó por su lado rozando un poco los hombros, con mi cabeza en alto y mi pecho lleno de orgullo. Por no dejarme intimidar y encima de eso, dejarle claro con quien jodido habla.

Mi personalidad y mi forma de defenderme fue gracias a clases, que hice voluntariamente, no soy ciega ni tonta del mundo donde vivo, y de lo que estoy rodeada constantemente. Y defenderme sin tener miedo es uno de mis mayores orgullos.

Entro a mi auto, enciendo el motor y me largo de ese lugar si siquiera mirar, no vale la pena tener ni el mínimo contacto con ese hombre y mucho menos algún tipo de relación.

Pasadas más de dos horas, llegó a mi dulce hogar, de lo más agitada, visite a Sara, y ni le conté sobre lo sucedido, no vale la pena. Hablamos de trabajo y temas triviales en común, para luego marcharme.

Me desvisto, y tranquila empiezo a ducharme. Nada mejor que darse un baño luego de semejante día, y a pesar de ahora estar tranquila. Mi mente no deja de ser un remolinó de pensamientos, sobre ese hombre tan guapo y peligroso a la ves. Soy amante de las aventuras, de vivir sin tener cargo de conciencia de lo que sucederá, de ser justa y simpática con aquellos que lo ganan. Toda una persona difícil de forjar pero que al final de todo logré, mis padres son maravillosos a enseñarme valores, de cómo respetar la opinión y pensamiento de cada quien. De cómo poder darle una oportunidad a cada persona de rectificar sus actos, un sin número de cosas buenas que hoy en día agradezco mucho.

Salgo de mi duradero baño, para cambiarme y calentar una pizza precosida. No tengo ánimos de cocinar, solo quiero mi cama y mis dos peluches favoritos, son mi consuelo cada noche.

Cenó, para luego ir a cepillar mis dientes hasta poder caer rendida en mi cama. Mi celular suena a mi lado, por lo cual lo tomo y verifico que es un mensaje desconocido. Abro la App y leo:

Desconocido: espero volver a verte pronto princesa, eres toda una fiera.

Xx B.M

Eso dice el mensaje, me deja pensativa unos segundos hasta leer las letras finales, B.M y creo saber quien es, el protagonista de mis pensamientos constantes. Dejo mi celular a un lado hasta acomodarme en la cama y así poder quedar dormida pensando en el.

Nota: Si recibe apoyo esta novela con los 5 capítulos y me comentan que les gusta, seguiré actualizando. Muchas gracias por leer y darme tu apoyo!