Capítulo 1037 - Mujer demente

Las palabras de Shi Feng causaron una gran conmoción en la sala.

Ninguno de los representantes esperó que tuviera tales intenciones desde el principio. Ese repentino anuncio realmente los tomó por sorpresa.

Los diferentes representantes, que originalmente estaban sentados juntos, inmediatamente empezaron a mirar a las personas que estaban a su lado con expresiones de desconfianza en sus rostros. Al mismo tiempo, también se contactaron en secreto con los directores de sus empresas, con la esperanza de obtener una respuesta rápida de su parte.

Ninguno de los presentes era un tonto. Sabían cuánto estaba en juego en ese momento.