—Luego de que mi hermano rastreó su ubicación en Australia, lo acorraló y puso una bala en su cabeza.
—Agradece a Lino de mi parte.
Qin Chu se sintió mucho mejor al confirmar que Wang Kun, la persona detrás de todo, estaba muerto. Al menos Huo Mian y el obtuvieron su venganza y no sufrieron para nada. Qin Chu decidió seguir otros caminos, ya que Gao Ran y la policía no podían cruzar la frontera fácilmente para arrestar a un criminal.
Su lema en la vida era: Si alguien lo traicionaba, él le devolvería el favor multiplicado por diez.
—Seguí lo que dijiste sobre la ciudad Dong Tao y removí a todos, ¿quieres continuar la investigación?
—Por supuesto. Pero he decidido hacerlo a un lado por el momento, lo investigaré yo mismo cuando me recupere.
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