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capítulo 52

Tadeo lo miró fijamente con mirada seria y Eddy fue lo mismo.

-¿Por qué yo?- preguntó Tadeo.

-cada vez que apostaba por cosas y personas siempre termino ganando a lo grande.

Fue lo mismo con bien banda hace cinco años y ahora mira, toda argentina oscura es mía.

Nadie se atreve a venir acá por mi culpa, puede que no lo pasen por la tele pero hace cinco años, todo era un infierno.

Las bandas de estados unidos, Colombia, Venezuela, el Salvador, México, Rusia e incluso China no se atreve pisar esta tierra solo por el hecho de que estoy aquí.- dijo de forma arrogante pero segura mientras veía a Tadeo con muecas de burla.

-pensá en lo que te dije ¿Por qué yo?- preguntó nuevamente Tadeo.

-si apuesto por ti, se que voy a ganar, y por mucho.- dijo enfatizando las últimas palabras.

-¿Qué gano?- preguntó Tadeo.

-lo que vos quieras, autos, casas, guita, minas, reconocimiento.- dijo Eddy.

-¿y a estas apuestas como están?- preguntó Tadeo.

-viviendo bien y trabajando para mi como un igual.- dijo Eddy con firmeza.

-¿adonde estaría yo?- preguntó el niño.

-como un igual que yo, tranquilo todos tenemos una gran relación e incluso algunos están casados o en pareja.- dijo Eddy.

-¿y sobre el tema de reconocimiento policial o otras autoridades?- preguntó el niño.

Y Eddy al escuchar esto, escucho la afirmación de Tadeo de asociarse con el.

-hacemos público nuestra aparición en diferentes puntos del país, como joyerías de alto calibre, vehículos de importación o robando bancos.

En ningún momento fuimos atrapado o fichados, tenemos varios trabajos desde remuneración, concesionarios, lavado de dinero, drogas e incluso tenemos mecánicos.- dijo Eddy dándole la mano a Tadeo y sonriendo por su nuevo compañero.

-supongo que me ocupare con la música y la sastrería, pero te lo digo desde ahora Eddy.- dijo mirando con fiereza.

-ninguna palabra a mi familia, solo nos conocemos porque pediste ropas personalizadas. Si veo alguien de la banda cerca en donde vivo yo mismo lo mato.- dijo con ojo fríos.

-Tranquilo wachin, ya luego te diré que es lo que vas hacer y tendré en cuenta tu carrera musical y de diseñador.- dijo Eddy riéndose.

-es más, ahora el sastre de la banda, la ropa que me mostraste la usará toda la banda de la cruz, ya es hora de tener un distintivo como el resto del mundo.- dijo Eddy acariciando la cabeza de Tadeo.

Pero Tadeo le alejo la mano con fuerza mientras lo miraba fijo.

-muy bien Eddy, me voy, tengo una vida que vivir.- dijo Tadeo mientras se iba e se quedaba esperando a su padre afuera.

'no tengo nada que perder, y como se me dio la oportunidad, la aprovecharé'

Pensaba Tadeo, con mirada aturdida mirando al vacío.

Y en segundos se recupero y vio como que su padre llegaba y se subió al auto como si nada.

Como si no fuera personalmente invitado por el hombre más peligroso de argentina.

Tadeo miró por el retrovisor del auto y vio como Eddy lo miraba irse y cuando desapareció de la vista, Tadeo sintió como se enfrió.

Mucho más frío que el invierno del sur de la Patagonia.

Apenas llegó se preparo para tomar mate y lo llevo a su pieza, y cuando se sentó en su escritorio vio como su mano se puso un poco nervioso.

Aunque él o se sentía nervioso su cuerpo decía lo contrario.

'supongo que al final me puse nervioso'

Pensó mientas tomaba su mano fría con su otra mano para calentarla.

'solo espero que Eddy no sea un chupapija y me lleve al fondo'

Tadeo paso el resto del día pensando en lo que paso en el día, sopesando los pros y contras después de unirse.

'aunque supongo que será divertido hacer algo que hacía en los juegos'

Pensaba divertido mientras tomaba mate y imaginaba el futuro qué tenia por delante.

'Y si es así lo que dice Eddy, deberé tener cuidado, más que antes'

'Espero que no me pida cosas fuertes como acompañarlo o algo así, y espero que cuando me niegue no me pegue un tiro'

Y así siguió hasta que le dio sueño a Tadeo, y como antes los días pasaron.

De un momento a otro, el resto del año fluyó rápido y sin más contratiempos.

Desde ese día, Eddy desapareció de la vida de Tadeo y cuando fueron al vacaciones de su papá, finalmente se fue de viaje con sus padres.

Su primer destino era san juan, ullum, un departamento la mayor parte deshabitado pero aun logro tener una población gigantesca.

Con más de ciento ochenta y cinco mil personas (redondeado), vivían en el departamento de ullum.

Al bajar del aeropuerto provincial de san juan, fueron recibidos por uno de los doce hermanos de Leila.

Esta era Marcelo, mayor que Leila, al saludar a los tres, los ayudo a subir el equipaje a la camioneta.

Viajaron durante treinta kilómetros, Tadeo vio muchos edificios gigantes y muchas árboles, parques, museos de historia y demás.

Y al alejarse de la capital, Tadeo notó que había menos edificios pero notó un gran parque de animales, había ciervos, pavo reales, mulas y caballos.

E incluso notó a un águila enorme encerrada pero con un terreno para expandir sus alas.

Poco después vio un gran cerro y al notar sus formas notó que al parecer esta zona antiguamente era de agua.

Y como pensó, su tío Marcelo paso encima de una hidroeléctrica gigante, pasaron por esta y Tadeo miró por todos lados.

Extensiones y extensiones de montículo de tierra, altas o bajas, ideales para andar en bici o moto.

Pronto llegaron a la ciudad de ullum, cientos de árboles, docenas de viñedos, y muchas cabañas para pasar en un fin de semana.

Tadeo vio muchos negocios de regalos, almacenes, bares, escuelas secundarias técnicas, jardines, y muchas plazas.

Y como era de noche, todo estaba bien alumbrado, vio a muchos niños jugando la pelota en la calle.

E incluso a muchas mujeres usar la ropa de verano que creo y esto fue lo mismo con los jóvenes.

Su tío condujo por muchas cuadras y finalmente llegaron a la finca de su abuela, al entrar su tío cerró el portón después de estacionar la camioneta.

Al bajar, los tres notación que había muchas personas, más de dos docenas de ellas.

Y estos los saludaron calurosamente, uno por uno, y Tadeo enfrente de todos se limpio los cachetes con su remera.

Esto sorprendió a algunas señoras y a los hombres no les importo, Tadeo acompaño a su papá ya que no quería ser interrogado.

Vio muchos caballetes para asar carneros y chanchos, una gran parrilla de hierro ocupado por completo con cortes de carnes y algunas verduras asadas.

Y no hacia falta decir que había dos mesones alargados, y arriba de estos manteles, vasos, gaseosas, platos, cubiertos y demás.

Y Tadeo de la nada fue invitado por sus primos a jugar a la pelota o las escondidas, y como eran más de una docena de niños, les dijo que si.

Y como era pleno verano, Tadeo se saco su remera ya que no quería llenarla de olor.

Los demás varones lo copiaron excepto las niñas que solo se arremangaron.

Jugaron por el viñedo, los establos y el corral de los chanchos y gallinas.

Pronto fue la hora de comer y todos los niños se fueron a lavar las manos.

Tadeo se sentó junto a sus padres y eligió lo que iba a comer, se sirvió gaseosa enfriada con hielo.

La fiesta de bienvenida duró hasta la mañana del otro día, y como todos vivían cerca, solo se fueron caminando.

Excepto su tío Marcelo y su familia que vivía en el departamento de chimbas.

Tadeo se despertó temprano al igual que sus padres, y esto fue lo mismo que su tío Marcelo y su tía Carina.

Leila le pregunto a Tadeo si la acompañaba para comprar tortitas (como el librito pero circular).

Al caminar por unos minutos, llegaron a un negocio que su madre venía de pequeña y Tadeo la espero afuera.

Y cuando menos lo espero alguien se sentó al lado suyo.

-quédate callado, esto viene de Eddy, el lado posterior de la cruz dice LCTL, demuestra tu rango en la banda.- dijo un joven de piel quemada y se fue caminando.

Cuando reaccionó, Tadeo solo observó el rosario, su cadena era de perlas de madera bordo, y una cruz y como dijo el hombre.

La parte posterior decía esas letras, el nombre de La Cruz y Tadeo Ledesma, sin pensarlo mucho, se coloco el collar y lo oculto con su remera.

Minutos después su madre salió del negocio con una bolsa de tortitas, y un kilo de pan.

Al volver, noto que se sentía observado y devolver la vista vio que un grupo de chicos lo observan.

Tadeo saco el collar y al ver esto, el grupo mostró sus tatuajes de una cruz cristiana.

El niño le dio la vuelta al rosario y estos quedaron sorprendidos, y rápidamente desviaron la mirada.

Devolvió la mirada al frente y siguió caminando con su madre, al llegar notó que su papá y sus tíos estaban tomando mate con una señora.

Y esta estaba rodeada de perros enormes y pequeños, estos fueron al grupo de madre e hijo.

Sin embargo como conocían a leila, fueron directamente a tadeo, y este sin miedo los acaricio.

Y los perros rápidamente lo rodearon y comenzaron a lamerlo y tirar su ropa.

El más grande de todos era el negro, que llegaba al pecho de tadeo a la cruz.

Y era el mas mansito en comparación del resto, pero tadeo al acariciarlo notó que bajo su pelo tenía muchas cicatrices.

Fue al baño y se lavó las manos, y fue a conocer a su abuela, tenía la vista ciega, un pelo blanco por las canas pero muy limpio.

Era bajita, tal vez por los años y la vejez la achicaron, pero de algún lado saco su altura su madre.

Y por lo que dijo su madre, ella tenía ojos negros hermosos como los suyos.

A ella le decían la abuela peta, tadeo no quería saber porque, solo quería pasar tiempo con ella.

En su otra vida, la conoció muy pocas veces, y cuando estaban a punto de visitarla, había fallecido durmiendo tranquilamente.

Pero después de su muerte, las señoras e incluso un hijo hombre, comenzaron a hablar mal de ella.

Que facellio por que hizo un trato con el diablo, o por culpa de las maldiciones que echaba por que era bruja.

Pero ahora solo ve una anciana apretando su mano, ella estaba fría pero tadeo hervía.

Peta levantó los brazos y tocó la piel del niño.

-ah… sos igual que tu mamá, encima estas hirviendo niño.- dijo ella con el acento sanjuanino.

Luego toco su rostro parte por parte e incluso paso sus dedos por su pelo.

-tenes la piel de tu mamá pero el rostro de tu papá, y mira el pelo que tenes, pareces una mujer por como esta cuidado.- Dijo la abuela peta.

Y al escuchar esto solo se rio y su abuela también.

-veni sentate acá en esta silleta que te voy hacer una trenza.- dijo ella mientras agarraba la silla qué estaba a su lado.

Tadeo se desató el pelo y en un instante desde su rostro y hombros fueron ocultos por su pelo.

El niño solo se mordió los labios mientras sentía como su pelo en enredado con fuerza por su abuela.

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