Quién Prestó Ayuda Secretamente

—Si no fuera por la información que me enviaste justo a tiempo, incluso si quisiera ayudar a Qiao Nan, es posible que el director no estuviera de acuerdo conmigo. Ahora que el asunto está resuelto, Qiao Nan tiene que agradecerte.

Después de completar con éxito la tarea que el director le había asignado, lo primero que hizo el Profesor Liu al regresar a la escuela y sentarse a tomar aire fue llamar a la persona que le envió la información.

—¿¡Qué?! ¿Quieres ocultarle esto a Qiao Nan? Oh, te preocupa que Qiao Nan se distraiga. No afectará sus estudios... Oh, de acuerdo, no diré nada. Sí, lo más importante es que se concentre en sus estudios. Está bien, sé lo que debo hacer. De todos modos, tengo que agradecerte en nombre de Qiao Nan. Como su profesor titular, es mi responsabilidad ayudar a mi estudiante. Bueno, adiós.

Después de colgar el teléfono, el Profesor Liu se golpeó el pecho varias veces y suspiró aliviado.