Construir Buenas Relaciones

—Qiao Zijin no quería deshonrarse, no tenía intención de retrasarse en el pago de la matrícula escolar. Pero cuando se trataba de Qiao Nan, pensaba que estaba bien y era apropiado hacer eso.

—Qiao Nan, esa desgraciada chica se ha vuelto tan terca ahora, ya no es tan sumisa como solía ser. Podía llegar a decir esto, ¿y Qiao Nan no estaba dispuesta a obedecer? —Ding Jiayi tampoco era tonta, antes no le gustaba esta hija, por supuesto, ahora tampoco le tiene simpatía.

Pero en comparación, Qiao Nan se consideraba una hija muy obediente.

Si le ordenaba ir hacia el este, no se atrevería a ir hacia el oeste; si le ordenaba caminar, no se atrevería a correr.

Pero ahora, una frase de Ding Jiayi, y Qiao Nan le replicaba con diez frases. Incluso si Qiao Nan guardaba silencio y no replicaba, tampoco obedecería sus palabras.

—Mamá, Qiao Nan ha cambiado, no era así antes. ¿Por qué tiene un cambio de temperamento desde su fiebre la última vez? —Qiao Zijin frunció el ceño y gruñó.