Tres personas entraron a la casa de los Bai.
Madame Bai pidió a la niñera que les sirviera té y luego condujo a los tres visitantes a una habitación en el primer piso.
Madame Bai tenía un comportamiento gentil: el temperamento tranquilo de Bai Shanshan era heredado de ella, era visible mientras miraba a los visitantes y decía lentamente —En dos días, será su día conmemorativo.
Después de hablar, empujó la puerta de la habitación.
Solo entonces los tres visitantes entraron.
Shen Bijun notó inmediatamente la fotografía en blanco y negro colgada en la pared. Father Bai parecía gentil y refinado, con cierto parecido a Bai Xiaojiu; era fácil ver que era de los Bai.
Su mirada se dirigió entonces a Bai Xiaojiu, quien parecía casi congelado, sus ojos fijos en la fotografía. Su rostro estaba lleno de emoción, los ojos brillantes, como si estuviera a punto de abalanzarse sobre ella.
Parecía que, en efecto, este era el segundo hijo de los Bai.
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