Claro, tú eres el normal aquí.

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—Ugghh… —El Rey gimoteó de dolor al abrir los ojos.

Su cabeza se sentía pesada, intentó agarrar su mano, sin embargo, pronto se dio cuenta de que no podía mover la mano, miró y finalmente notó que sus manos estaban atadas.

Sus ojos se abrieron de par en par, luego miró alrededor y notó que estaba arrodillado frente a Astaria, quien estaba frente a él con una sonrisa burlona en su cara.

A su lado estaban Keeve y Reeve, quienes lo miraban con expresiones impasibles en sus rostros.

—¡Canallas! ¿Cómo—Uggh! —Ricardus gritó con ira, sin embargo, Astaria le dio una patada en la cabeza.

—¿Cómo te atreves a subir el tono delante de mí, criminal? —preguntó ella.

—¿Criminal? —Ricardus tartamudeó.

—Ricardus Skyfall, por el crimen de matar a tus propios hermanos y hermanas por el trono, serás ejecutado en la noche de luna llena, justo después de que el próximo gobernante del reino sea coronado —Astaria sentenció.

Al oír estas palabras, los ojos de Ricardus se abrieron sorprendidos,