—¿Hmm? ¿Cuál es el problema aquí? —preguntó Nux con el ceño fruncido.
—¿Qué? ¿No te das cuenta? Ella podría intentar hacernos daño —habló Felberta con una mirada seria en su rostro.
—¿Realmente crees que él puede hacerle daño a Evane estando yo allí? —preguntó Nux de vuelta y todos guardaron silencio.
—Es cierto... Con Nux allí, mientras Riona no envíe a Amletus, dañar a Evane sería imposible sin importar cuántos Cultivadores de la Etapa de Rey ella envíe —Thyra asintió.
—Y ni siquiera ella tendría el poder de hacer mover a Amletus —Amaya asintió.
Las mujeres finalmente entendieron de lo que Nux estaba hablando. Una pequeña sonrisa apareció en el rostro de Amaya y dijo:
—Está bien entonces, no necesitamos pensar más en esto. Vamos a seguir con este plan. Al final, si esto tiene éxito, nos desharemos de algunas cosas molestas al mismo tiempo, y que Evane se convierta en la próxima Reina estaría entonces 100% asegurado.
Nux también sonrió.
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