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—Ren se sorprendió de que el último conejo restante, que de otra manera le habría concedido a Silvia la victoria tan ansiada, hubiera logrado invocar a la Reina de todos los Conejos Cornudos.
Ren no esperaba que Silvia durara tanto tiempo enfrentándose sola a las Hordas de Conejos Cornudos. Si tenía que ser sincero... Y ella le demostró que estaba equivocado cuando estaba a punto de derrotarlos sin ayuda de nadie —si solo la Reina del Conejo Cornudo no hubiera aparecido.
¿Cuáles eran las probabilidades de que la habilidad de bajo porcentaje [Chillido] del Conejo Cornudo se activara con éxito en el último minuto? ¿Y que realmente invocaran a la Reina de los Conejos Cornudos ni más ni menos?
La Reina del Conejo Cornudo era una bestia rara en este punto del juego, pero una bestia común en la parte final del juego que solo podía ser encontrada si sus críos activaban con éxito su habilidad [Chillido]. Para ese entonces, la habilidad [Chillido] del Conejo Cornudo ya alcanzaría el LV.7, por lo que naturalmente, la tasa de éxito para invocar a su Reina Madre también aumentaría.
En esta etapa temprana del juego, matar a una Reina del Conejo Cornudo seguramente daría mucha EXP y Gil. Además, su carne era ingrediente en muchas recetas de cocina y se vendía a un alto precio.
Pero matarla con solo un dígito en ATP era imposible.
Ren no sabía si la LCK de Silvia era buena o mala.
A este ritmo, ella seguramente iba a morir.
Sí. Iba a morir —pensó Ren cuando Silvia sufrió el estado paralizante.
A Ren le encantaba ver cómo la calma y arrogante cara de Silvia se resquebrajaba. La hacía humana y alcanzable.
De todos modos, Ren estaba contemplando si ayudar a Silvia o no. Pero con la aparición de la Reina del Conejo Cornudo, decidió ayudarla.
Había ventajas si la ayudaba. La carne de la Reina del Conejo Cornudo seguramente aportaría un excelente adicional de 5000 Gil a su dinero... Silvia le debería una deuda que seguramente pagaría en efectivo —pensó.
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—574 ¡Golpe Crítico!
[Reina del Conejo Cornudo sufrió de QUEMADURA
—5% PV cada minuto]
—40 (QUEMADURA)
Silvia se sorprendió por la cantidad de daño que el desconocido infligió a la Reina del Conejo Cornudo. Parecía ser de la clase Cazador o Animista basado en la mascota similar a una bestia sobre su hombro. Pero él lanzó un daño mágico como si fuera un mago.
Ningún jugador era capaz de eso a menos que...
—¿Eres... un PNJ?
Ren se enfrentó a Silvia con una expresión seria, aunque todo lo que la mujer vio fue una oscuridad neblinosa y difusa dentro de su capucha.
—Eso no es importante. ¿Quieres vivir y ganar una cantidad enorme de EXP?
Silvia estaba confundida con las palabras del PNJ. ¿Era esto un evento? ¿Había activado algo? Pero, ¿dónde estaba la opción que debería haber aparecido en su pantalla? ¿O era activado por voz?
—Apúrate.
Silvia seguía confundida y asintió sin pensar. Todavía estaba tratando de adivinar la clase de Ren y si él era un PNJ o no. Estiraba el cuello para ver si podía ver dentro de la capucha de su capa sin éxito alguno.
A Ren no le importaba y preguntó:
—¿Cuánto?
—... ¿Eh? —Silvia se confundió aún más.
Ren sonrió y extendió una mano—. ¿Cuánto por tu vida?
—... La mandíbula de Silvia se desencajó. ¿De qué estaba hablando? ¿Hablaba de Gil? ¿Es ese el pago por su ayuda? ¿O era parte de un evento?
—Y por si te lo preguntas, estoy hablando de dinero real —dijo Ren y evitó el ataque de los Conejos Cornudos—. Con su AGI, fue pan comido.
Ya que los ataques de Ren eran más altos que los de Silvia, el [Agresión] de los enemigos estaba en él, y se convirtió en el objetivo prioritario de los dos Conejos Cornudos.
Ren, sin embargo, no se inmutó, ya que su DEF y AGI eran altas. Podría lanzar [Fuego] varias veces si quisiera y terminar la pelea antes de que los Conejos Cornudos pudieran moverse de nuevo, pero decidió no hacerlo.
Quería hablar con Silvia primero y hacer un trato con ella—. Apúrate. No tengo todo el día.
Silvia salió de su estado de confusión por la voz monótona y fría de Ren.
Era la primera vez que un hombre le hablaba de esa manera. Estaba acostumbrada a la atención y afecto de todos. Todos los hombres que conocía se volvían dóciles e idiotas al enfrentarla. Sus voces duras se ablandaban, y sus fachadas frías se resquebrajaban al posar su mirada en su hermoso rostro. No tenía que hacer un esfuerzo. Sus encantos eran suficientes para hacer que todos los hombres se inclinaran ante ella—. Definitivamente era un PNJ —pensó Silvia—. ¿Eres un PNJ?
El párpado de Ren dio un tirón—. Pregúntame eso otra vez, y mataré a esas bestias yo mismo y tomaré toda su EXP y botín.
Los ojos de Silvia se abrieron en sorpresa, y reprimió un gasp que escapaba de sus labios—. ¡Era un jugador!
—¿Entonces un Probador Beta? Eso explicaría el alto daño y la bestia de aspecto extraño enrollándose en su cuello.
Los Probadores Beta tenían una ventaja injusta sobre los jugadores regulares. Ya conocían la mitad del juego antes de que se lanzara. Fue así como Silvia obtuvo parte de su información también, pagando una gran cantidad de dinero para poder adquirir el libro guía de los Probadores Beta de COVENANT. No era mucho, pero contenía más información que la guía en el sitio web del desarrollador.
Si eso era así, ¡entonces la LCK de Silvia no se había agotado! ¡Todavía podía salir de esta situación! —¿Cuánto quieres? —Silvia ofreció de inmediato—. Si esto se iba a resolver con dinero, entonces no era un problema para ella.
La sonrisa de Ren se ensanchó.
—¿Cuánto puedes dar?
Con una mujer arrogante y dominante como Silvia, seguramente no aceptaría nada menos. Y con su fortuna, el dinero no era un problema.
Y a Ren no le gustaría tener a Silvia de ninguna otra manera. Rica, arrogante, orgullosa cliente que no permitiría que nadie cuestionara sus capacidades y poder.
Por eso Ren adoraba a la gente rica y dominante.
La sonrisa de Ren se amplió cuando la fría fachada de Silvia se resquebrajó. Se mordió el labio y lo miró con mejillas sonrosadas y cara enrojecida.
De hecho, era hermosa, y Ren era uno de esos hombres que secretamente estaba enamorado de ella.
Lástima que el único y verdadero amor de Ren es el dinero.
Silvia apretó los dientes y siseó a través del espacio de sus dientes apretados.
—¿Qué tal diez mil de dinero real? Estoy segura de que es más que suficiente.
Ren no se inmutó y dijo con voz monótona,
—La recompensa de EXP por las Hordas de Conejos Cornudos es de aproximadamente 700. Pero ya que uno de ellos llamó con éxito a la Reina del Conejo Cornudo, entonces la EXP que recibirás se duplicaría. PERO...
Si murieras, entonces tu ATP seguro sufriría un tremendo golpe suficiente para que consideres recrear tu cuenta. ¿Estás dispuesta a renunciar a tu ventaja y empezar de nuevo?
El rostro de Silvia se oscureció.
Los labios de Ren se contrajeron en un lado.
—La tienes —dijo—. Seguramente la hija de un multimillonario podría ofrecer más que eso. Si no, entonces los dejaré que te maten antes de que los derrote y tome toda su EXP y botín.
. . .
—¿¡En serio?! —exclamó Silvia.
N/D
La próxima actualización es la próxima semana o el SÁB. Tengo mucho que hacer en los próximos días. Por favor, sean pacientes y esperen mi regreso.
—¡Regresaré pronto! ¡SALUD!