Ataques unilaterales

—¡Mierda! ¡Ya he tenido suficiente! —Cansada de ser manejada a voluntad por Roy, la serpiente con cuernos soportó la bala de maná con su cuerpo y enroscó su cola alrededor de un árbol grueso y alto y, con un tirón hacia arriba, lo arrancó antes de lanzarlo hacia Roy.

¡Zumbido!

Un gran árbol de 10 pies de alto y 5 pies de ancho se cayó hacia él.

Su sombra le cubrió antes de que siquiera le alcanzara.

—¡Esquívalo! —Arlo comunicó mentalmente a Roy, sin saber que la fuerza bruta de Roy ya era igual a la de un monstruo con aura.

Los labios de Roy se curvaron hacia arriba mientras pensaba con arrogancia, «¿Por qué debería?»

Avanzó hacia el árbol que estaba en el aire, superando las expectativas de todos.

En lugar de salir disparado fuera de su trayectoria, saltó hacia él.