Esto no quiere decir que sus esposas no hicieran lo mismo. Ellas se enfocaban más en educarlos para que crecieran con el conocimiento adecuado para seguir aquellos sueños que eventualmente tendrían. Por eso nunca les impedían hacer cosas. Después de todo, las esposas de Blake eran las que más tiempo pasaban con ellos.
Blake, Destiny y Joy comenzaron a examinar las runas y lo que cada una hacía. Empezaron a escribirlas en la pizarra que Joy había preparado, y en tan solo unas horas, la pizarra estaba cubierta de papel con cada runa y una información detallada sobre lo que hacía y cómo se podía usar en un círculo mágico.
Incluso cuando Lillia y las otras esposas llegaron, seguían trabajando en las runas, y pronto, con tantas personas en ello, las paredes de la habitación de Joy estaban cubiertas de inscripciones rúnicas.
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