No hay suficiente maná

Después de una prolongada pausa, Aurora rompió el silencio con un susurro decidido —Localizaré al jefe de la región.

Cuando los demás escucharon su decisión, asintieron en silencio.

Los demás asintieron al unísono al llegar a la conclusión de que su máxima prioridad en ese momento debía ser determinar la ubicación del jefe de la región antes que Raydon. Se quedaron asombrados por sus misteriosas habilidades, y les faltaba el poder necesario para mantenerse al ritmo de su extraordinaria velocidad. Por lo tanto, encontrar primero al jefe parecía el curso de acción más razonable a tomar en esa situación.

—¿Con qué tipo de hombre estamos tratando? —La voz de Nysora tembló ligeramente mientras intentaba calmar su acelerado corazón, contemplando el enigma que rodeaba a Raydon.