La esfera de luz se convirtió en un portal, que aparentemente llevaba a otra dimensión llena de estrellas y planetas flotando en medio del espacio.
Una monstruosa criatura emergió del portal montada en una bestia ardiente, convirtiendo la alegría de los adoradores en terror.
El jinete medía poco más de dos metros de altura y estaba cubierto de gruesas escamas negras curvadas. Sus manos y pies terminaban en afiladas garras envueltas en llamas negras. Un par de alas membranosas invertidas sobresalían de su espalda, produciendo una ráfaga de viento lo suficientemente fuerte como para rivalizar con la tormenta exterior a cada aleteo.
Su cara era una tabla negra sin nariz ni orejas, pero sus siete ojos hacían que todos lo reconocieran al instante. Cada uno de los seis ojos en su cara ardía con un color diferente de mana que resaltaba sus pupilas verticales negras.
El séptimo en su frente era azul profundo y sin pupila.
Apoya a tus autores y traductores favoritos en webnovel.com