webnovel

El comienzo de un gran viaje…

Defender el planeta, no era tan difícil como lidiar con su esposa, una de ellas.

"¿Y si no quiero que te vayas?"

"Pues tendrás que detenerme"

"Puedo hacerlo"

El no pudo evitar sonreír, sin duda ella era una mujer de carácter, por eso la amo desde el primer momento que la vio.

"Sé que lo harías, pero prefiero evitar borrar varias montañas y destruir ciudades por esta discusión, además, alguien tiene que quedarse a cuidar nuestro hogar, ¿No te parece?"

"No me gusta"

"Lo se… a mí tampoco"

Él podría verla todo el día y nunca se cansaría.

Su largo cabello negro como la noche, con dos mechones que enmarcaban su delicado rostro, piel un poco pálida, ojos más oscuros que su cabello, y una figura que era la envidia de todo un continente.

El cuerpo de una Kunoichi, especializada en la velocidad, cintura pequeña, unas curvas de encantadores pechos de copa C+, unas caderas anchas y un trasero que…

"Ahhh~"

El envolvió sus brazos alrededor de ella, para bajarlas y apretar sus nalgas, grandes y suaves, las amasó con lujuria, mientras la besaba con intensidad, metiendo su lengua dentro de su boca.

La última Uchiha del planeta, la heredera de la voluntad de Indra.

Ella era Satsuki Uchiha.

Una de sus esposas.

"¡Yo también quiero un beso?"

El apenas se movió al sentir un peso extra en su espalda, no tuvo que voltear para saber quién estaba encima de el.

Su cabello era durado como los rayos del sol, su propia sonrisa parecía iluminar el lugar, sus ojos eran azules como el mar, y tenía un cuerpo que definitivamente hacía que cualquier mujer la mirara con envidia.

Grandes senos copa E, una cintura pequeña y anchas caderas, todo ese voluptuoso cuerpo estaba apegado al cuerpo de su esposo.

Ella era una de las últimas Senju, la heredera de la voluntad de Ashura, y la Rokudaime de la aldea escondida entre las hojas.

Ella era Natsumi Senju.

"Ve hacer fila Dobe"

"Mo~ no seas mala teme, dijimos claramente en los votos matrimoniales que lo íbamos a compartir por igual"

"Yo digo muchas cosas, ahora shu~"

"¡Nop!" ella se abrazó más a él, apegando sus enormes senos detrás de la cabeza de su esposo, que ya podía sentir sus pantalones apretarse.

Algo que enojo tanto como emociono a la Uchiha, que podía sentir la dura erección de su esposo contra su estómago.

"¡Ya suéltalo!"

"¡Oblígame!"

"¡Naruto di algo!" dijeron las dos al mismo tiempo, de inmediato chillaron cuando fueron tomadas por sus cinturas, ellas jadearon por la forma que las manos de su esposo, toqueteo sus traseros, apretándolos y amasándolos.

Natsumi gimió feliz, cuando fue besada en sus labios, la forma tan feroz que reclamaba sus labios, frotaba su lengua contra la suya, mientras sentía sus dedos hundirse en la carne de sus nalgas.

Separándose de la rubia, fue el turno de la Uchiha, que feliz dejo que su esposo la besara, mientras sentía sus dedos entrar debajo de sus pantalones, y apretar sus dedos contra su húmedo y caliente coño.

"Que linda expresión teme" se burló la rubia, que sonrió aún más, cuando su chaqueta fue abierta, dejando que sus grandes senos cayeran en la mano derecha de su hombre, que los amasó con lujuria.

"Silencio" sonrojada la Uchiha bajo su mano, para frotar la dura erección de su esposo, con ayuda de su rival, desataron el nudo de sus pantalones, que cayeron a sus tobillos.

No hacía falta decir, que la sonrisa de ambas kunoichi era grande, al ver el largo, grueso y palpitante de su amago, que acarició el cabello de las dos, y aplicando un poco de fuerza, hizo que las dos cayeran de rodillas ante.

De inmediato, las dos empezaron a lamer y chupar toda lo que podían.

Este era otro gran día para Uzumaki Naruto.

Un jóven en sus 20 años, alto y con una musculatura abultada y marcada como solo las estatuas de los museos podían ser, su cabello era un poco largo de un color rojo e intenso, atada en una corta cola de caballo, y ojos morados.

Él tuvo… una vida interesante por decir poco.

Su madre fue Kushina Uzumaki, una Kunoichi que vino del país del remolino, buscando refugio en Konoha, que le dio un asilo.

Ella fue una mujer de carácter fuerte, una que no se dejaba intimidar ante nadie y siempre decía lo que pensaba, era el tipo de mujer que muchos podrían llamar indomable.

Era el tipo de mujer que su padre le gustaba.

El en sus propias palabras, era un hombre de las estrellas, un Viltrumita, una especie que viajaba entre las estrellas para traer paz y ayuda a los mundos que estaban en la ruina.

Vaya mentira, en realidad pertenecían a una especie de locos homicidas, con complejos de dioses que creían que ellos debían de estar por encima de todos.

Pertenece al imperio Viltrumita y muere.

Naruto tuvo que tomar una decisión, el no dejaría está mundo sea invadido por gente como su padre, aun cuando él fue un buen hombre, que lo entreno, e incluso pudo sentir su cariño hacia el.

¿Dejarlo tomar el planeta como suyo?

¿Esclavizar y tomar todo lo que les pueda servir del planeta?

NO

Esa fue la rotunda respuesta de Naruto, que desafío a su padre, tuvo que hacerlo para proteger su mundo, y todo lo que habían logrado.

Tuvo que… matarlo.

No estaba orgulloso de ello.

Pero tampoco se arrepentía.

No serviría al imperio Viltrumita.

Tampoco tomaría el papel de Kage que le habían ofrecido las aldeas, por ser la base fundamental de la paz en todos los continentes.

El solo hacia lo que quería, nada más.

Y no dejaría que nadie arruine su estado de ánimo.

Nadie.

Tenía que irse, buscar a las únicas personas que ponían en peligro su felicidad, y asesinarlas a todas.

Sin embargó, por ahora solo quería darles a sus dos esposas, la despedida que merecían.

"Hm." Natsumi gimió guturalmente, sus suaves manos recorrieron su camino arriba y abajo del lado izquierdo de su cuerpo, acariciando con sus dedos el palpitante miembro, "Ah pesar de todas las veces que la vimos y nos divertíamos con él, me sigue impresionando, ¿No lo crees Satsuki-chan?" Pregunto sonriente, mirando a su amiga/rival que también lo estaba acariciando.

"Hmmm" Ella gimió en respuesta, demasiada caliente como para dar una mejor respuesta, su cálido aliento golpeó la sensible glande, haciéndo que palpitara aún más, "Parece que ya quiere algo te atención" La última Uchiha notó las gotas de pre-cum que brotaba de la punta.

"Creo que quiere que la lamamos, Satsuki-chan. ¿Deberíamos?" La rubia bromeó con una sonrisa, rosando sus labios contra la punta de la polla, sacando un gruñido a su esposo.

El pelirroja se dejó caer sentado en la cama, para darle más comodidad a sus dos esposas, sus fuertes manos ya estaban sobre la cabeza de las dos, resistiendo el impulso de clavar su pene en alguna de las dos bocas que veía.

Al ver la expresión de su esposo, la Senju se rio entre dientes, tal vez estaban jugando demasiado con él, esto les podría salir el tiro por la culata.

"Es hora Satsuki-chan"

"Hai"

Extendiendo lentamente su lengua, la Uchiha se movió de su lado derecho, mientras que su rival del lado izquierdo.

La lengua de las dos jóvenes tetonas finalmente alcanzó su premio, las dos gimieron felices cuando gotas de semen salpicaron sus caras.

"¡Apenas empezamos!" chilló la Senju tetona por las gotas de pre-cum disparadas por su esposo, que enterró sus manos en la madera de la cama.

"¡Carajo! ¡Chicas no prueben mi paciencia!" Gruño con una voz grave, pero termino dando un largo suspiro de placer, por las sensaciones de las dos lamiendo su polla.

Las lenguas de Natsumi y Satsuki se turnaron para lamer y chupar la punta hinchada, no podían evitar gemir alrededor de su eje, frotando sus cuerpos con el de él, haciendo que el calor en la habitación se volviera infernal.

Ellas sabían muy bien como complacer a su esposo, y cuáles eran sus puntos débiles, las dos chicas tetonas usaron sus manos y jugaron suavemente con las bocas que colgaban entre las piernas del Uzumaki.

"Ya puedo sentirlo..." murmuró la Uchiha entre besos y lamidas, el semen que su amado almacenaba en sus bolas, que saldría en cualquier momento para cubrirlas.

"¡Oye!"

Natsumi puso mala cara, cuando su rival tomo la delantera, y sin previo aviso, engulló la longitud de una sola vez, moviendo la cabeza hacia arriba y hacia abajo varias veces, ella lamió y chupo la cabeza y tronco, llevándolo hasta su garganta.

"¡Ggkkkk! ¡Hhmmmm! ¡Hggkkkk!"

Satsuki se aseguró de hacer tanto ruido como podía, hacer sentir lo apretado que era su garganta.

"Pensar que todos en la aldea piensan que eres elegante y perfecta, solo mira como chupas su pene de una forma tan sucia y ruidosa"

Las palabras de la Senju, hicieron que la Uchiha fuera más rápido, mientras la rubia voluptuosa jugaba y apretaba las bolas de su esposo, que disfrutaba de la garganta profunda de su esposa más sombría.

"Ustedes saben que hacer para hacerme llegar a mi límite" Naruto respiro de forma entre cortada, más que feliz por la forma que su pene era chupado por tan intensidad por parte de Satsuki.

Que hacía que su largo cabello oscuro se sacudiera, por el movimiento de su cabeza de arriba hacia abajo.

"Esto es… tan caliente" pensó entre cada movimiento de su cabeza hacia abajo, forzando su garganta a aflojarse ante el invasor, ella gimió más fuerte, cuando metió sus propios dedos en su coño, empezando a masturbarse casi de forma frenética.

Naruto gruño al sentir una lengua rozar sus bolas, apenas pudo ver el cabello dorado de Natsumi, asomarse debajo de Satsuki, y tener al alcance las bolas del Uzumaki, y empezarlas a chupar con hambre.

"¡Ya… viene!" El pelirrojo rugió de placer, estaba en su límite y las dos chicas lo sabían.

Satsuki sacó la punta de su miembro de su boca, para que su rival y ella pudieran lamer sensualmente de arriba a abajo su polla.

"¡Sí ~!" Desesperada por saborear la semilla de su esposo, Natsumi empezó a lamer más, frotando su rostro contra esos grandes testículos, "¡Cubre a tus putas con tu leche! ¡Vamos Naruto-kun~!"

Esas palabras fueron el detonante.

Ellas dos empujaron sus lenguas juntas, justo contra la punta de la polla palpitante, que termino estallado en un geiser.

"¡Chicas!" Gritando con una voz grave, el esperma del medio Viltrumita se disparó alto, antes de llover sobre las dos mujeres que esperaban, con la lengua fuera, las madres fueron recibidas con el increíble sabor de la semilla de su esposo.

Para ellas, el sabor solo hizo que su lujuria aumentara, tanto que ellas sentían sus jugos derramarse, y deslizarse por sus muslos.

Después de un minuto completo de correrse, sus caderas se levantaron en el aire, Naruto finalmente dejó escapar un suspiro de felicidad y bajó su trasero de nuevo a la cama.

"Increible, como siempre chicas… gracias" agradeció el pelirrojo, mirando hacia abajo, sus ojos morados se deleitaron con la vista más ardiente con la que solo había soñado desde adolescente.

Mientras el Uzumaki apreciaba la vista, la Senju tetona noto que había recibido menos de la semilla de su esposo, y el ver la sonrisa goloso y arrogante de la Uchiha.

Lanzándose sobre su rival de toda la vida, tomo sus labios en un beso apasionado, su lengua paso fácilmente entre sus labios, y jugó con los suyos.

Intercambiando semen aún caliente entre los dos, el ardiente beso lésbico hizo que las dos Kunoichi gimieron eróticamente.

Podían sentir los ojos del Viltrumita sobre ellas y ellas las puso más calientes.

"¡Mmmmm! / ¡Mmmmmm!"

Después de besarse por un tiempo, las dos se separaron lentamente, con un hilo de saliva conectando sus lenguas.

Sus cuerpos aún se apretaron la una contra la otra, haciendo que sus pechos se frotaran entre ellos, aún si la diferencia de tamaño era notoria, poco le importaba Naruto, que ya sintió que su lujuria se estaba saliendo de control.

Con un gruñido silencioso, empujó a ambas chicas sobre la cama.

"¡Oye!"

"Eres muy rudo… me encanta"

Aunque Satsuki quería parecer molesta, estaba igual se excitada que Natsumi.

"Y esto les encantará más" dijo con una sonrisa, al ver cómo las dos se juntaron una junto a la otra, apuntando sus grandes y redondos traseros contra la palpitante erección del medio alienígena.

"Ahhhh~"

"Oh~ que fuertes manos"

Las dos chicas jadearon, cuando su esposo uso sus manos para tomar sus nalgas, y amasarlas con fuerza, para que ellas sintieron como los dedos se hundían en sus nalgas.

"Tienes los mejores culos del mundo..." Frotando suavemente esos maravillosos traseros, hizo que las dos gimieran ante su toque. "No sé por dónde empezar"

"No te pongas arrogante, me estoy enfriando" Gruño entre dientes Satsuki, que miro sobre su hombre, dándole una mirada peligrosa a su esposo, que la compenso, frotando su pene entre sus nalgas, "Mmm~"

"Que fácil de tratar eres Satsuki-chan"

"Callate-e" El intento de la Uchiha por parecer amenazante, era nada cuando ella misma empujaba su culo contra la polla del pelirrojo, "Follame duro Naruto, o jamás te lo perdonaré"

"Ya la escuchaste Naru"

Naruto tuvo un escalofrío, cuando sintió unos grandes senos apoyarse en su espalda, no tuvo que mirar hacia atrás para ver a uno de los clones de sombra de la Senju, que seguía acostada frente a él, con una sonrisa sucia en sus labios.

"Eres una sucia Natsumi… ¿Me alientas para que me coja duro a tu mejor amiga?"

"Mmm… no recuerdo que te hayas cogido a Hinata, ¿Lo has hecho?" tanto la original como la clon sintieron la mirada fulminante de la Uchiha, una mirada que prometía mucho dolor, "¡Es una broma! ¡Eres tú Satsuki-chan! Ahora dale duro cariño"

Sus pezones duros contra él le dijeron que estaba muy excitada ante la exhibición.

"¡Espera-a!" La última Uchiha gimió al sentir la cabeza del pene de su esposo, presionando contra la entrada de su trasero, "¡Ese-e es mi…" los jugos de la peli negra gotearon por la forma, en que el quería entrar en ese agujero.

"Vamos Naru~, empuja a ese monstruo dentro de su apretado culo" murmuró la clon de sombra a los oídos del Viltrumita, ansiosa de ver igual a la original, el como el culo de su rival se abría ante sus ojos.

No tenían que decirlo dos veces, alineando su erección contra el trasero de la Uchiha, empujando la cabeza hacia adentro suavemente, el agarró sus caderas femeninas con un firme agarre.

"¡Prepárate Satsuki!" Con un gran empujón, el hizo que su pene se hundiera dentro del apretado culo de la Uchiha.

"¡AHHHHHHH! ¡NARUTOOOOOO!"

Las dos Natsumi se estaba sonrojando, al a su mejor amiga tomar la gran polla de su esposo, fue más excitante de lo que pensó que sería.

"Wow…" Susurró con asombro mientras observaba, como el culo de la Uchiha se abrió a su máxima capacidad, con tal de poder dejar pasar al invasor que se hundía en ella.

"Eres tan apretada cariño" el se dejó caer para besar con cariño el cuello de la Uchiha, que respiraba de forma entrecortada y sus ojos nublados por el dolor y el placer.

"Oh… dios"

La última Uchiha apenas sentía que podía pensar, por la larga y gorda longitud de su esposo dentro de su trasero, sus ojos se volvieron hacia atrás en su cabeza cuando el dolor finalmente se desvanecía y el placer era lo único que quedaba en su lugar.

"No Dios Satsuki, solo soy yo"

Sintiendo que la chica se relajaba un poco, empezó a moverse, bombeando lentamente su miembro dentro y fuera de las apretadas paredes anales de la Uchiha.

"Esto es tan caliente* la Natsumi original empezó a tocarse, recostada en la cama disfruto el ver cómo su rival era follada por el culo, mientras que su clon besaba y tocaba a su esposo.

"¿Te gusta esto cariño?" Preguntó con un susurro seductor la clon, sus delgados dedos se arrastraron hacia arriba y hacia abajo por sus duros abdominales, actualmente en acción empujándose más y más profundamente dentro del trasero de la rival.

"Sí..." Naruto gimió, demasiado caliente por toque de la clon, que frotaba su cuerpo con el suyo, "Pero… me gusta más jugar contigo" ni bien dijo eso, el pelirrojo hundió dos dedos en el coño ardiente de la rubia voluptuosa.

"¡Oh si~!" La clon chillo de felicidad, el cómo sus dedos se movían los labios húmedos de su coño con cada caricia. "Si… tócame, mientras coges el culo de Satsuki-chan, y ella mira" Sus gemidos sucios hicieron que el Viltrumita gruñera, y hundiera su polla más y más fuerte en la Uchiha que se retorcía debajo de él.

"¡No te deje cogerme el culo!"

Se quejó como pudo Satsuki, que tenía una expresión que solo demostraba el placer que sentía, la sensación de la polla hundirse en su culo, las embestidas que sacudían sus nalgas, fue una sensación maravillosa para ella.

"¡Ahora no pares! ¡Y cógeme fuerte! ¡Jode mi culo!"

Gritó de nuevo, negándose a mirar la sonrisa divertida de su rival, que seguía jugando con su coño a su lado, disfrutando del show.

"¡Carajo! ¡Sí!" Naruto gimió, a una velocidad que solo se podría llamar sobre humana, el movió sus dedos tan rápido dentro de la clon, que sentía qué tenía un vibrador en su interior.

"¡Ahhhhh!" La clon no pudo soportarlo, termino estallando en un duro clímax, que la hizo desaparecer en una explosión de humo.

Recostada en la cama, Natsumi quedó con los ojos en blanco, las memorias y sensación llegaron a ella, e hicieron que su coño estallara en un río de sus jugos, que se derramaron sobre la cama.

Ella se quedó tendida en la cama, con una sonrisa boba en su rostro.

En cuanto a Satsuki, sintió un escalofrío que sacudió hasta sus huesos, cuando las dos manos de su esposo, la tomaron de su delgada cintura y fue levantada con facilidad de la cama, "Oh oh"

Con una mirada oscurecida por su cabello rojo, Naruto le do una sonrisa juguetona a la Uchiha, que sabía lo que se venía.

"¡AHHHHHHH~!" Ella gritó en estado de shock cuando sintió la primara estocada que sacudió su cuerpo entero, sus nalgas se tornaron rojas, y su mente nublarse, por el comienzo de unas embestidas frenéticas, que romperían los huesos de una mujer civil.

Uzumaki + Viltrumita = El rompe perras definitivo.

"¡Más! ¡Más Naruto! ¡No pares! ¡Rómpeme el culo!" suplicó con potentes gritos la Uchiha, que ya no podía tener su lengua dentro de su boca, y esa expresión fría y arrogante que siempre la caracterizo, se rompió para dejar ver un rostro de éxtasis, por ser follada a velocidades inhumanas.

Satsuki podía sentir sus paredes anales retorciéndose, alrededor de la hombría de su esposo, la follada anal hizo que sus jugos mojaran sus muslos y testículos del Uzumaki, que por cada embestida hacía que estos chocaron contra sus sensibles labios inferiores.

Naruto aún se estaba conteniendo, sabía que literalmente podría romper los huesos de su esposa si no se controlaba, aun así, disfrutaba el follar su culo como si no hubiera un mañana, sosteniéndola en el aire por sus caderas, embistiéndola con tanta fuerza y velocidad, que la misma habitación parecía sacudirse.

Satsuki no podía describir lo bien que se sentía en este momento, siempre fue increíble desde que tuvo su primera vez con él a sus 17 años, luego se volver a la aldea, después de su largo camino fuera de la aldea.

No era la primera vez que follaba su culo.

Y aun así se sentía como la primera vez, igual de placentero e increíble.

"¡Joder! ¡Naruto! ¡Corre ya! ¡Quiero tu semilla en mi culo!"

"¡Lo pides! ¡lo tienes!"

El pelirrojo estaba cerca, su miembro palpitaba dentro del culo de la bella chica, con un poderoso rugido, dio una última estocada.

"¡SÍ!" La Uchiha gritó a todo pulmón, mientras experimentaba otro clímax increíble causado por la máquina sexual que era su esposo. "¡SIIIII~!" Su voz se volvió torpe y aguda, ante la sensación de ser llenada durante un minuto completo.

"Ufff"

Después de que finalmente su clímax se termine, se deslizó fuera del culo de su esposa y la dejó caer en la cama, con una sonrisa de orgullo, el vio como semen brotaba del culo abierto de la Uchiha, que tenía mirada perdida.

"…" Satsuki apenas dio un gemido, cuando sintió unos labios besar su culo, y una lengua que entraba dentro de ella.

Natsumi le dio un oral al culo de su rival, saboreando la semilla de su esposo, y haciendo que los jugos de la peli negra gotearan más de su coño.

Naruto disfruto de la vista, algo que sería hasta mal visto por ser demasiado 'sucio', la verdad poco le importaba, lo que sucedía en la intimidad de la habitación con sus dos esposas, era solo asunto suyo.

Con pene volviendo a ponerse erecto, siguió disfrutando la vista.

"¿Natsumi?" apenas recuperando sus sentidos, luego de ser jodida, ella gimió por la lengua que entraba en su culo, mientras unos labios se envolvieron alrededor de los bordes, ella le estaba chupando el culo, sacando la semilla de su esposo en ella, "¡Natsumi!"

Fue una sensación tan sucia como increíble.

"Hmm ~." La rubia voluptuosa gimió de placer, el sabor de la semilla de su esposo nunca dejaba de excitarla. "Pruébalo" Girándola en la cama, ella no le dio tiempo de responder a su rival, cuando reclamo sus labios en un beso, se aseguró de abrir la boca y dejar que la Uchiha se probara a sí misma.

"Esto… es tan sucio" Satsuki no podía creer lo bien y caliente que la hacía sentir, algo que podría hacer que muchas mujeres de inmediato rechazarían hacer.

Las mujeres no habían dejado de jugar entre ellas, mientras se besaban por segunda vez en la noche, frotando sus cuerpos desnudos y sudorosos contra la otra.

A Naruto no le gustaba ser ignorado.

Con facilidad tomo del trasero a Natsumi, y al arrastró hasta el borde de la cama, con un agarre de hierro, empujó el rostro de la rubia voluptuosa contra el coño de la peli negra, mientras que, con su otra mano, acomodada a la chica.

Para penetrarla de una sola estocada, que dejó sin aliento a la rubia, que tenía sus labios pegados al coño de su rival, que gemía y jadeaba por la hábil boca de la Senju.

"¡Mmmm! ¡Mmmm! ¡Mmmm!" al no poder hablar, Natsumi solo dio gemidos ahogados, chupando y comiendo el coño de su mejor amiga, mientras sentía su mundo sacudirse por las duras embestidas de su esposo.

"Solo mira como tú vagina aprieta tanto, ¿Es por chupar el coño de Satsuki o por mi pene?"

"¡Mmmm! ¡Mmmm!"

"Tomare como si a las dos cosas"

Naruto sonrió con lujuria, mientras jugaba con la carne cremosa del culo de la chica rubia.

La forma en que la carne de su culo se ondulaba con cada embestida, mientras seguía martillando su coño con fuerza, fue una sensación celestial.

"¡Me vengo!" Natsumi separo su boca de la vagina de su rival, al sentir su interior arder y paredes internas apretar con fuerza el pene de Uzumaki, que no dejo de moverse, haciendo que el clímax para ella sea legendario.

Naruto le dio un respiro a la Senju, sacando su pene de su coño palpitante, que seguía filtrando sus jugos por sus muslos, ella se dejó caer aún lado de Satsuki, tratando de recuperar el aliento.

"Joder…" riendo entre dientes, Natsumi paso sus manos por su coño, abriéndolo ante los ojos del Viltrumita, "Me hiciste llegar muy rápido, eres un desgraciado, pero…" la chica ganó un brillo en sus ojos.

Naruto tuvo que cerrar sus ojos un segundo, por el intenso brillo dorado que iluminó la habitación.

En todo su esplendor, estaba Natsumi Senju, en un estado legendario dado por el sabio de los seis caminos, con marcas negras formándose en sus mejillas, y otras partes del cuerpo, cada parte de ella brillaba en un intenso tono dorado, hasta podría decir que sus medidas crecieron.

Ella le dio una sonrisa juguetona y traviesa.

"¿Quieres empezar?"

~~~~~~~~~~~~~~~ O ~~~~~~~~~~~~~~~

Ino paso a la siguiente página de su libro, se sentía cómoda en la sala de estar, leyendo uno de sus libros favoritos, en la compañía de su esposo, que estaba dibujando un cuadro en la esquina de la habitación.

Los dos dejaron de hacer lo que estaban haciendo, cuando vieron como varias cosas en la sala, empezaron a moverse, en especial el vaso de vino que tenía la Yamanaka en su escritorio, muchos habrían pensado que había un pequeño terremoto.

Aunque la realidad era otro.

"¿Naruto y Natsumi están cogiendo de nuevo?" Sai no se molestó en despegar la mirada de su cuadro, aún con los leves temblores, era algo que en Konoha ya estaban acostumbrados, no eran como si hicieran daño, solo un poco de movimiento.

Además… ¿Quién sería tan valiente o estúpido como para ir a casa de las personas más fuertes del planeta? Y decirles que paren.

Él no lo haría, quería vivir.

"Parece que, si" Ino le dio un sorbo a su vino y apretó sus muslos, su imaginación era muy gráfica, y siguiendo el ritmo de cada sacudida, podía decir que tan intenso estaban siendo esos dos, la estaba poniendo caliente, "¿Quieres ir a la cama...?"

"Si, ya es tarde, vamos a dormir"

Ino se quedó con una mirada en blanco, cuando su esposo le dio un beso en la cabeza, y paso de largo para irse a dormir, no sin antes tomar unas pastillas, para dormir mejor.

"Sabía que tenía que haber aceptado la ofertar de Natsumi, pero no, creíste que ser parte de un harem no era lo tuyo, eres una tonta Ino"

~~~~~~~~~~~~~~~ O ~~~~~~~~~~~~~~~

Volviendo al hogar del extraño trio, todo este se sacudía, siendo el centro de todos los temblores.

"¡SI! ¡DURO NARU~! ¡DAME DURO~!"

"¿Creo que ayer te hice gritar más fuerte? Quiero saber si podemos hacerlo de nuevo, o incluso mejor"

"¡OHHHHH! ¡MIERDA! ¡MIERDA! ¡ME VAS A PARTIR A LA MITAD!"

"¡Ese es el plan cariño!"

"¡NARUUUU~!"

Satsuki se quedó sentada en la cama viendo, hasta la misma cama parecía sacudirse por la forma en que esos dos estaban follando, ella observó con los ojos muy abiertos y un rubor gigante cuando vio a Naruto penetrar a su rival.

Haciendo que su polla entrara y saliera del apretado coño de la Senju, el la inmovilizo contra el suelo, sosteniéndola de sus tobillos y poniéndolos contra su cabeza, para seguía martillándola.

En su estado actual, Natsumi era la única mujer en el planeta, que podía resistir la naturaleza Viltrumita del Uzumaki, que estaba perdido en sus instintos, follando como una bestia a la Senju.

"¡AH! ¡AH! ¡AH! ¡AH! ¡AH! ¡JODER!"

La heredera de Ashura se retorció y gimió en voz alta, cuando sintió los labios y los dientes de Naruto en su cuello.

Sus grandes manos amasaban sus senos, apretando entre sus dedos sus duros pezones, sin nunca dejar de moverse contra ella, más fuerte y rápido a cada segundo que pasaba.

"¡Cogeme Naru!" Ella suplicó, su cuerpo brillaba con intensidad, rebozando de placer y alegría, moviendo sus brazos detrás de su cabeza, tirando de su propio cabello con fuerza.

"Eres tan perfecta Natsumi, estás tan apretada y caliente, te amo tanto" murmuró Naruto que beso los labios de la chica, dando una estocada profunda, que hizo que la madera del suelo debajo de sus pies, se fuera rompiendo.

"¡Y yo amó tus labios contra mi piel! ¡Tú gran pene gran profundo en mi coño, llenándolo! ¡Golpeando mi útero! ¡Te amo! ¡Te amo!"

Mientras continuaba embistiendo a su esposa a velocidades y potencia que mataría a cualquiera, no pudo evitar sorprenderse de lo húmedo, apretado y caliente que estaba su coño.

Se sentía como si lo estuviera tratando de succionarlo y masajearlo de la manera más erótica. "¡¿Ah?!" Naruto gimió con fuerza cuando sintió un par de dulces labios calientes envolverse alrededor de sus bolas, y una dura mordida.

Eso había sido inesperado.

"No me gustan que me ignoren" Murmuró Satsuki que se inclinó detrás de ellos dos, rosando sus dientes contra las bolas de su esposo.

Sabía que, aunque lo mordiera con todas sus fuerzas, no lo lastimaría, en cambio le daba una sensación de placer y dolor, que hacía que el se estremeciera.

Viendo lo que su rival hizo, la Senju sentía que no podía quedarse atrás, haciendo que unos brazos de chakra dorado surgieran de su espalda, hizo que las posiciones cambiarán.

Y que ahora ella está encima de su esposo, para empezar a cabalgarlo, cuando que su longitud se hundiera deliciosamente dentro de ella, de inmediato empezó a mover su enorme trasero hacia arriba y abajo, haciendo que las bolas del Viltrumita golpee varias veces su culo.

"Oh sí, eres increíble cariño" Naruto se sentó en el suelo, disfrutando de ver los senos rebotar de la Senju, que le dio una sonrisa lujuriosa, mientras seguía rebotando encima de el.

"¡S-Sí! ¡Lo soy!" Ella gimió sin aliento, sus pezones pesaban mientras rebotaba arriba y abajo de la polla gigante de su esposo como una ninfómana sedienta de sexo, "Me encanta... Me encanta tener tu pene metida en mi coño, no dejes de follarme mientras Satsuki-chan mira…"

Echándose hacia adelante, comenzó a besar el rostro del Uzumaki y susurrar suaves palabras a su oído, su cuerpo ardía como el chakra dorado que la cubría, por la excitación de rebotar con tanta fuerza, haciendo que en la habitación se pudieran escuchar los claros sonidos del choque de ambos.

"Eres una puta sucia" Los ojos legendarios de la última Uchiha brillaron, su Rinnegan y Mangekyou Sharingan brillaron, al ver el bulto en el estómago de su rival, producto de la longitud y grosor del pene de su esposo, "Mejor apúrate, que sigo yo"

En un parpadeo, ella dejó caer, para darle una dura nalgada a su rival, y levantara su culo, dejando espació para que la Uchiha empezara a chupar y morder las bolas del Uzumaki, que dejó escapar un grave gruñido, haciendo que el placer se incrementará.

"¡Dices eso-o! ¡Cuándo tú le chupas las bolas!" grito Natsumi que envolvió sus brazos alrededor del cuello de su esposo, y mover sus caderas con tanta fuerza, que toda la caza empezó a sacudirse de nuevo, "Vamos Naru~ quiero que me llenes con tu semilla, quiero que ella vea cómo mi coño desborda de semen, ¡Ya no te contengas!"

Ella le rogó, con la cara más erótica que jamás había visto, los ojos de la mujer estaban rodando hacia la parte posterior de su cabeza, su cabello despeinado, las tetas rebotando con sus manos masajeando, y su lengua yacía impotente contra su cara con baba bajando por su rostro.

Lagrimas felices comenzaron a fluir por sus ojos cuando las manos de su esposo bajaron, para tomarla, y mover sus propias caderas hacía arriba, empezando a penetrarla de forma feroz y brusca.

"¡Tómalo todo Natsumi!" Naruto rugió con una lujuria animal, ahora empujando a su esposa hacia arriba, golpeando la parte posterior de su útero con cada golpe de la punta de su pene.

"No te detengas, Naruto." Murmuró la última Uchiha, que todavía chupando sus bolas oscilantes que golpearon su cara. "Corre dentro de la puta de tetas grandes". Las palabras sucias de ella y la forma en que chupaba sus bolas, dándole mordidas ocasionales.

Todo lo que estaba sintiendo, hizo que el medio Viltrumita llegará a su límite.

"¡Aquí viene!" Con un fuerte gruñido, la cabeza de la polla de Naruto perforó el cuello uterino de Natsumi y explotó su enorme carga directamente en la zona más profunda de ella.

Los ojos de la heredera de Ashura, estaban completamente en la parte posterior de su cráneo en el momento en que sintió que el semen de su esposo inundaba su útero.

"…" Su voz y sus gritos se convirtieron en un susurro por el poderoso clímax, todo lo que podía sentir era la increíble sensación de tener su útero lleno de su semilla, "¡Sí ~!" Cantó de felicidad cuando sintió que la sustancia viscosa, cremosa y caliente desbordaban de su interior.

"Hfff… sería un desperdicio dejarlo caer" con una sonrisa sucia, Satsuki bebió el semen que salía de la vagina de su rival, aun cuando ella tenía la longitud de su esposo enterrada hasta el fondo.

Ella sintió su coño arder de placer, al probar los fluidos combinados de Naruto y Natsumi, amaba los jugos de ambos y la combinación era casi celestial, la sombría chica no pudo evitar que sus propios jugos mancharan el suelo y sus muslos.

Los orgasmos se detuvieron después de un minuto completo, Naruto finalmente fue devuelto a la tierra.

Sentado en el suelo, exhausto, sintió que su esposa rubia, apoyo sus suaves manos contra su rostro, para hacer que levantara la mirada, y ver esos hermosos ojos mirando hacia los suyos con nada más que amor.

"Naru..." Murmuró Natsumi antes fundirse con su esposo en un beso apasionado, las lenguas de ambos juegan suavemente entre sí mientras acarician ligeramente sus cuerpos, "Eso fue asombroso"

"Cierto" Satsuki abrazo a su rival por la espalda, y alcanzó a su esposa, para darle el mismo beso que el dio su otra esposa, dejando a esta última en un shamwich entre ellos dos, no es como si se quejara se sentir las tetas de su rival, y pecho músculo de su esposo.

Lentamente ellos se separaron, siendo la Senju quien apenas sentía su pierna y jadeo ante la sensación de vacío en su interior, cuando dejo que el pene del Uzumaki saliera de ella.

Para alegría de ambas, aún seguía duro como el acero.

No tuvieron tiempo de tocarlo, cuando fueron tomadas entre los brazos de Naruto, que llevo a sus esposas a la cama, cada uno se recostó de su lado derecho e izquierdo respectivamente.

Su descanso fue de solo pocos minutos, antes que las dos hermosas chicas, se deslizarían entre las piernas de su esposo, y usaron sus senos, para darle un masaje que todo hombre en la tierra mataría por tener.

La noche aún era joven.

~~~~~~~~~~ O ~~~~~~~~~~

Naruto le dio un último abrazo a sus dos esposas, que estaban fuera de casa, ya estaba atardeciendo, ellos tres rompieron su récord de tiempo en una maratón sexual de casi 12 horas, algo que los tres esperaban romper en el futuro.

Pasaron toda la mañana y tarde durmiendo juntos, disfrutando del calor de sus cuerpos.

Una gran manera de despedirse.

"Las amo"

"No te pongas sentimental, no te queda" se bulto Satsuki que se cruzó de brazos.

"Si, sabemos que te vas a follar cualquier chica atractiva que veas en otros planetas, sabemos lo que le hiciste a Samui, a la pobre aún le cuesta caminar" Natsumi dijo todo eso con diversión, aún recordaba la mirada atontada y complacida que tenía la embajadora de Kumo, que tuvo que tomarse el día para descansar, "Te la cogiste en mi oficina, estás loco"

"Lo siento"

"No te preocupes, sabemos que tienes… un libido muy alto, Uzumaki y Viltrumita, una combinación que hasta da miedo"

"No tenías miedo cuando estabas debajo de él chillando y gimiendo Teme"

"Silencio Dobe"

"¡En fin! Solo recuerda que tienes dos esposas aquí, así que no te emociones demasiado, si vas a tener amantes, será mejor que sean buenas mujeres, quiero que mis hijos crezcan con muchas tías"

"Eres rara Natsumi" con una sonrisa juguetona, el medio viltrumita tomo la cabeza de la chica y le dio un beso, no húmedo ni sensual, solo uno suave y tierno, algo que tuvo que hacer también con la Uchiha, que le dio una mirada penetrante.

Terminando las despedidas.

Naruto dio un paso atrás y le dio un último adiós a sus esposas.

Que vieron como su esposo, rompió la velocidad del sonido, para perderse en los cielos, entre las estrellas.

Las dos bajaron la cabeza y se miraron.

"¿Quieres ir por un ramen Satsuki-chan?"

"Si"

Envolviendo sus manos alrededor de la cintura de la otra, ambas se abrazaron demasiado cerca, apoyando sus manos en sus traseros, ahora que su esposo no estaba, tenían que mantener la cama caliente hasta que llegue de nuevo.

Fin del capítulo 1.

Siguiente capítulo