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Capítulo 92: Bijū

-Hace siete años-

"Hola…"

Esa fue la primera vez que hablo con el, con el mejor amigo de su hermano menor Sasuke. La primera impresión que tuvo del hijo de Kyoko fue la de un niño tímido y callado, quien sólo decía pocas palabras, sin mirar a las personas a los ojos.

Itachi sonrió levemente y le devolvió el saludo al pequeño Toru.

"Hola, pequeño Toru. ¿Está Kyoko-nee-san en casa?"

"Si…"

"Ya veo. ¿Entonces puedes llamarla? Tengo unas cosas de las que hablar con ella"

Mantenido su sonrisa amigable, Itachi miró al pequeño Toru, quien asintió con la cabeza en respuesta, para después entrar a la casa sin cerrar la puerta. Para el, la apariencia de este niño era muy parecida a la de Kyoko, con un poco de Kenji. La forma en la que miraba a los demás y su cabello negro eran muy parecidos a los de su madre, sin embargo, físicamente se parecía a su padre. Esto lo hizo sonreír levemente, después de todo esto era como tener un segundo hermano menor.

-En el presente, en algún lugar de Amegakure-

Pero al ver esto solo pudo entrecerrar los ojos y suspirar suavemente. Aquel niño que solía verse inocente y tranquilo, ahora se mostró ante el con una sonrisa sombría en la boca, sus ojos brillaron con la luz de la muerte en ellos mientras se quitaba el sombrero.

Toru había crecido, ya no era un niño. Sin embargo, a Itachi le sorprendió bastante que ese niño ahora se parezca a Kyoko, era como un clon de sombra de esa mujer.

"Hola, soy Asahi Toru, de donde vengo me llaman Shinigami. Espero que podamos llevarnos bien" Presentándose ante todos los Akatsuki, Toru miró directamente a los ojos de Itachi, quien a la vez le devolvió la mirada, tan fría como un gran témpano de hielo.

Esto lo llevo a dejar salir un largo suspiro cansado, antes de que de las mangas de su capa surgieran dos dagas con forma de espina. La luz en los ojos de Toru se intensificó y desapareció a la vista de todos.

'¡¿?!'

Itachi abrió los ojos y rápidamente sacó un kunai de las mangas de su capa. En ese momento…

¡Clang!

El sonido metálico, seguido de pequeñas chispas iluminó sus rostros. El Shigan miró al Sharingan, dos ojos extraños mantuvieron el contacto visual por un segundo mientras ambos ninjas forcejeaban sosteniendo las armas afiladas en sus manos.

"Dos años pasan rápido, Itachi"

"Toru…"

La sonrisa sombría en la cara de Toru hizo que Itachi sintiera ganas de irse del lugar, sin embargo, se mantuvo ahí solamente porque tenía una misión que cumplir.

"Toru, contrólate"

Sin embargo, Pain interrumpió este encuentro con un pequeño suspiro mientras miraba a estos dos ninjas. Su rostro era inexpresivo, pero esto fue suficiente para que Toru, con una pequeña sonrisa, guardara las dagas en las mangas de la capa negra.

"Lo siento, no pude contenerme"

Manteniendo su sonrisa y el brillo asesino en sus ojos, Toru dio un salto, regresando al dedo meñique izquierdo de la mano de la gran estatua. Una vez ahí, desactivo el Shigan y se volvió a poner el sombrero.

"¿Qué mierda fue eso? Jajaja"

De pie sobre el dedo índice izquierdo de la estatua, Hidan, un hombre de cabello medianamente largo de color plata, peinado hacia atrás, habló mientras se reía entre dientes. Sus ojos eran de color morado y tenía el cuello de la capa un poco abierto, demostrando que bajo la capa no traía una camisa. Además, atada a su espalda, podía verse una gran guadaña de tres hojas de color rojo. Esto hizo que Toru levantara una ceja con curiosidad. Esta era la primera vez que veía a todos los miembros de Akatsuki, sin tener en cuenta a Itachi, después de todo, los últimos días estuvo encerrado en ese enorme edificio metálico, esperando a que la construcción de su laboratorio este terminada.

Hace unas pocas horas, Konan llevó a Toru con Pain, quien le dijo que debían reunirse con los demás miembros de Akatsuki para que se conozcan, además de que al fin sabrá lo que Akatsuki esta planeando. Esto dejó algunas preguntas en su cabeza, ya que desde que llegó a Amegakure, Pain no había dicho una palabra de lo que Akatsuki se dedica a hacer. Pero teniendo en cuenta que Itachi intentó secuestrar a Naruto, quien tiene al zorro de las nueve colas sellado en su interior, ya podía imaginarse un poco de lo que estás personas se dedican a hacer.

'Ese tipo… sus ojos de alguna forma me hacen sentir enfermo'

Sobre el dedo índice derecho de la gran estatua, Deidara, un chico joven de ojos azules y cabello rubio, peinado con una cola de caballo y mechones sueltos los cuales le tapan el lado izquierdo de su rostro, puso mala cara al ver los ojos de Toru, los cuales le causaron una extraña sensación de asco que le recordaban a los ojos de Itachi. Por un segundo se acomodó la banda protectora en su frente e intento no pensar más en eso.

"Cállate, Hidan…"

Sintiéndose cansado por la molesta risa de su compañero de equipo, Kakuzu, un hombre alto y de piel oscura, el segundo más alto de todos los presentes, fulminó con la mirada a Hidan. Llevaba una capucha blanca y una máscara negra en la cara, y sus ojos eran la única parte de su cuerpo visible.

Toru abrió los ojos levemente, después de todo su Shigan detectaba más vidas en Kakuzu, más vidas de las que una persona normal tendría. Esto hizo que inclinará un poco la cabeza, después de todo, sintió como la curiosidad comenzaba a picarle en el cerebro, por lo que no pudo evitar hacer preguntas innecesarias.

"Tu cuerpo tiene más vidas de las que debería. ¿Cómo lo haces? ¿Le arrancaste el corazón a otras personas o naciste así?"

Todos en el lugar miraron a Toru, después de todo, lo vieron como a un niño curioso que acababa de encontrar algo entretenido.

"Me gustaría saberlo. ¿Acaso es un algún ninjutsu especial? ¿Me dejarías verlo con mis propios ojos? Mis dagas son bastante afiladas, tan solo un corte me permitirá verlo todo. ¿Entonces me darías permiso para ver todas las vidas que tu cuerpo resguarda?"

Pero después de escuchar esto, todos dejaron de considerarlo un niño. Es más, las palabras de Toru hicieron sentir incómodo a Kakuzu, quien se quedó callado y con los brazos cruzados. No quería involucrarse con él, ya que pensaba que podría matarlo en un arranque de ira.

Mientras todo esto pasaba, justo sobre el dedo anular izquierdo de la estatua, un hombre piel azul pálido, con unos ojos blancos y pequeños, y teniendo en las mejillas unas extrañas marcas que parecen agallas, sonrió levemente al ver la reacción de Itachi después de todo lo que este nuevo integrante estaba provocando. Era un poco gracioso ver la mirada de ese chico, pues parecía alguien impredecible y extraño, como un libro sellado con cadenas. Aunque pronto descubrirá que es todo lo contrario.

"Jajaja… que bastardo tan divertido. Eres interesante, niño. ¿Te interesaría oír sobre el Culto de Jashin?"

"¿Jashin [Corazón Malvado]?"

Ante la pregunta de Hidan, Toru levanto una ceja al desconocer del tema. Sin duda sentía que era algo aburrido y sin importancia, al final no se equivocaba, después de todo las religiones no eran lo suyo, pero decidió oír a Hidan, después de todo el también es un miembro de Akatsuki, por lo que ahora son compañeros de trabajo, así que llevarse bien y conocer un poco de los demás estaba dentro de lo que podía hacer en esta organización.

"Así es, deberías volverte parte del culto. Yo ya lo soy, ¿Por qué tu no?"

"No veo la necesidad de estar en un culto. Tengo cosas más importantes que hacer, me parece ilógico desperdiciar tiempo en algo tan ridículo"

"¿Ridículo? Maldito hereje, en serio me haces enojar. Pensé que podríamos llevarnos bien, pero parece que al final terminaras convirtiéndote en un sacrificio para Jashin-sama. Jajaja… vas a morir y disfrutaré tu dolor"

Tomando la guadaña de tres hojas en sus manos, Hidan miró a Toru con una sonrisa arrogante. Preparándose para matar a este niño, intento dar un salto para llegar a donde el, sin embargo, todos suspiraron al sentir la presión de chakra de una persona en especifico.

"Silencio…" Dijo Pain, lo cual hizo que todos lo miraran en completo silencio.

Hidan por otro lado, chasqueo la lengua, insultó a Toru y Pain con susurros y devolvió la guadaña al mismo lugar de donde la saco, atada a su espalda.

"Debido a que eres nuevo en Akatsuki, no se te han explicado algunas cosas. Así que, escucha con atención…"

Pain dio un paso adelante y miró a los demás Akatsuki, los cuales simplemente se mantuvieron callados, ya que lidiar con este hombre era difícil, así que preferían ahorrarse los problemas.

"El objetivo de Akatsuki, nuestro objetivo… se divide en tres etapas. La primera es conseguir dinero, etapa la cual ya hemos logrado. La segunda sería reunir el ejecito shinobi mercenario más grande y feroz que el mundo haya conocido"

Escuchando esto con atención, Toru no pudo evitar pensar que esto era algo que todas las aldeas ninja hacían desde hace mucho, sin embargo, pronto se daría cuenta de que esto es completamente diferente. Después de todo, recordó que Itachi y el hombre con apariencia de pez quisieron secuestrar a Naruto, el cual tiene al Kyūbi sellado en su interior. Es por esto que continuo escuchando la explicación de Pain, pues ya había pasado algunos días desde que se unió a Akatsuki, había muchas cosas que no sabia de esta organización.

"Con las primeras dos etapas completas, aceptaremos todo tipo de conflictos, guerras, masacres, aunque de bajo presupuesto. Aquí es donde entra en acción la tercera etapa, la captura de los Bijū (Bestias con cola). Usaremos a cada una de estas Bestias para provocar conflictos globales, guerras a gran escala contra las naciones enteras. Si esto se lleva a cabo, estas cinco grandes naciones colapsarán y se verán obligadas a rendirse ante Akatsuki. Con todas las etapas completas… el resultado será… la dominación mundial"

'¿Dominación mundial? Esto… no era algo que yo esperaba. Aunque era una de las opciones posibles. Si Pain quiere alcanzar la dominación mundial, yo creo que eso sería extremadamente difícil, aun si tengo en cuenta a las otras naciones, de las cuales conozco muy poco. Incluso si estuve huyendo por todo el continente, la información que logré recabar de todas las naciones es muy poca… Bueno, lo único que me importa ahora es matar a Danzo, después de eso tal vez termine abandonando Akatsuki e intente buscar una vida tranquila'

Negó con la cabeza mientras pensaba. Ahora sabía que Akatsuki está tras los Bijū con la única intención de adquirir poder militar. Eso quería decir, que en algún momento tendrá que ir en busca de Naruto debido a que el tiene al Kyūbi sellado.

'Ha~ no se en que me metí… esto me hace sentir cansado'

Toru entendía que este ahora era su trabajo, y que si negaba, posiblemente Pain termine matándolo. Él tiene ese poder extraño que le impide acercarse, por lo que pelear contra el sería estúpido y básicamente un suicidio. Es por eso que debía fortalecerse en el tiempo que dure estando en esta organización.

"Bla, bla, bla. Guerras, dolor, poder… Es la segunda vez que escucho ese discurso ridículo. Ya terminemos con esto de una vez, no quiero estar en este lugar lleno de herejes"

"Hidan, cállate antes de que me den ganas de matarte"

"¡Aunque lo intentes no podrías, maldito imbécil!"

"Tu…"

"Fufu, ahí van de nuevo…"

Mirando a Kakuzu y Hidan, Zetsu, un ser que tiene la mitad de su cuerpo desde la cabeza hasta los pies de color negro, mientras que la otra mitad mantiene un color blanco pálido, se río entre dientes. Alrededor de su cuello, parece tener extrañas ramas de color verde que adoptan la forma de una planta atrapamoscas. Al igual que las ramas alrededor de su cuello, su cabello conserva el mismo color.

"Hm… ahora que he explicado esto, vayamos con el tema principal. Itachi…"

"Si. Kisame derrotó al Jinchūriki del Bijū de cuatro colas. De hecho, el ya esta en posición para iniciar la extracción de la bestia"

Mirando hacia abajo, donde un anciano de baja estatura con un bigote y barba de color rojo se encontraba, Pain cerró los ojos y asintió levemente con la cabeza. Después de eso, levanto la palma de su mano y… "Entonces comencemos con la extracción del Bijū, el proceso durará tres días y tres noches, así que, Zetsu, usa los clones para vigilar la entrada. Toru, prepárate…"

"Entendido, Pain-san" Toru miró al hombre tirado en el suelo. Estaba atado de pies y manos, esto hizo que simpatizara un poco con el, pero como este mundo es cruel y hermoso, una sonrisa se formó en su boca. 'Tres días y tres noches… todo para arrancarle un demonio a un anciano. ¿A que me recuerda esto? Como sea, será interesante"

Sentándose, se cruzo de brazos y suspiro de forma relajada, pues no quería estar de pie durante tres días.

"Comencemos…" Dijo Pain.

-Cuatro días después-

Mirando la placa con el emblema de Konoha en ella, Toru cerró los ojos y tomó una bocanada de aire. Al mismo tiempo, usando la daga, trazó una línea en medio del emblema, todo esto… para demostrar que ya no tenía lazos con su aldea natal. Ahora solo quedaba Toru, el Shinigami de Konoha, aunque este último pensaba que este apodo era demasiado exagerado.

"Bien… entonces, vamos"

Saliendo de la habitación, miró a Deidara y se volvió a poner la bufanda. Después de eso, tomando el sombrero de paja cónico en sus manos, lentamente lo puso sobre su cabeza.

"Date prisa, no me gusta que me hagan esperar"

Justo al lado de Deidara, un persona con el mismo sombrero habló. Estaba encorvado y la capa le cubría la mayor parte del cuerpo, solo dejando a la vista aquel rostro que de alguna manera se veía falso.

"Lo siento, tenía cosas que preparar antes. Pero ya he terminado, así que, vámonos de una vez"

"No hagas estupideces o te haré explotar" Dijo Deidara.

"Estoy seguro de que no haré nada parecido"

"Eso espero…"

Y así, estos tres ninjas caminaron lentamente por los pasillos de ese gran edificio metálico. Ahora ellos tenían un objetivo que cumplir en el País de las Llaves, un objetivo… que involucraba guerras.

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