Capitulo 23

Tercera persona Pov.

Ernest estaba con algunas gotas de sudor cayendo por su rostro y atrás de él había un gran montículo de troncos perfectamente cortado.

No sé podía ver en sus manos ninguna clase de herramienta, él solo colocaba un tronco echado para luego hacer un movimiento con su manos.

Sus dedos rozaron el tronco, pero este se corto perfectamente en la mitad.

El touki era algo bastante versátil, no tanto como la magia. Pero también podría profundizarse para llegar a algo asombroso.

Y Ernest seguía practicando sin falta, en realidad él formuló muchas teorías sobre lo que el touki podría hacer. En realidad lo que más le interesaba a Ernest era saber que era el maná.

Dónde estaba?. Ya que el pesó de Ernest no parecía aumentar ni un poco respecto a su maná.

Rudeus también parecía tener una gran cantidad de maná pero su peso coincidía con un niño de seis años.

Y aunque podía sonar tonto para las personas de este mundo la pregunta de dónde estaba el maná, era muy importante para Ernest.

Las implicaciones físicas podrían ser sorprendentes, siendo la primera teoría de Ernest que el maná no tenía masa y era energía pura.

Eso podría explicar cómo alguien podría hacer ataques que se acercaban a la velocidad de la luz. Y dependiendo de lo que Ernest descubra él podría idear formas más asombrosas de usar el touki. Él no era un mago, así que esa era su única forma de volverse más fuerte. Pero para experimentar sería importante el lugar adecuado.

Así que Ernest puso en su mira la academia mágica de Ranoa. Era un lugar para la magia, pero Ernest podría aprender algunas cosas para mejorar.

En la tierra santa de la espada todos son una cabezas de músculos, y solo sabían mover de un lado a otro sus espadas. Ya era un milagro que el maestro de Ernest supiera leer. En realidad el Emperador de la Espada Timothy solo extendió sus horizontes cuando él entendió que nunca podría superar al actual Dios de la Espada. Y por eso él se volvió aficionado de libros antiguos.

Suerte para Ernest, aunque él todavía seguía formulando teorías mientras él entrenaba.

Ya era bastante tarde y casi todos se habían ido a dormir, pero la energía de Ernest era bastante grande así que ciclos de tres días sin dormir constantemente se habían hecho una rutina.

Pero el trabajo había terminado y el pelirrojo se había quedado sin troncos que cortar.

Desde atrás llegó una voz amable. "Use esto para limpiarse el sudor". Lilia llegó con un paño húmedo al lado de Ernest.

El pelirrojo agarro el paño antes de volverse a dirigir a Lilia. "Que haces despierta tan tarde, deberías descansar". Ernest sabía que Lilia siempre se levantaba más temprano que nadie para hacer sus labores, por eso hacerla tener trabajo extra era incómodo para Ernest.

Pero Lilia respondió perfectamente, "Ya me voy a descansar, solo le vine a avisar que ya prepare su baño. Y recordarle que usted también tiene que descansar". Con una respuesta que también aliviaría a Ernest, Lilia respondió con su familiar tono tranquilo. Y con una ligera reverencia Lilia se alejo dejando solo a Ernest en la oscuridad.

El pelirrojo se refresco con el paño, pero lo que él pensaba era la forma de convertir en Lilia en doncella personal. Aunque lo primero en la lista de Ernest era una doncella con orejas de gato, alguien tan profesional como Lilia era perfecta para esa tarea, y que ella tuviera un cuerpo tan caliente solo era la cereza del pastel.

Pero el pelirrojo decidió aplazar su solicitud. Zenith estaba embarazada, y Lilia no seria Lilia si ella abandonaba a Zenith en este momento.

Así que Ernest solo calmo sus pensamientos mientras él se dirigía al baño.

...

Tercera persona Pov.

Ernest paso una semana de forma bastante tranquila, desde desayunar con la familia hasta ayudar a repeler algunas bestias con Paul.

Rudeus le había pedido a Ernest que le enseñará a usar la espada, pero el pelirrojo solo le dio uno de sus antiguos libros. El nivel de detalle era asombroso, todo estaba cuidadosamente explicado y comprobado.

En realidad esos libros fueron los verdaderos maestro de Ernest, ya que Paul nunca explico nada concreto. Pero el pelirrojo decidió guardar eso para él

Después de eso Ernest ayudaría en la tareas a Lilia, siendo reprendido como siempre. Pero el pelirrojo se movía más rápido de lo que Lilia podría exclamar.

Y en las noche el pelirrojo terminaría su cabaña. Y después de esa semana Ernest termino el segundo piso. Y ahora se le podría llamar una casa apropiada.

Así que está vez Ernest quería comprar unas cosas así que él decidió pedir la ayuda de Lilia.

Por eso los dos caminaban hombro con hombro por el pequeño mercado.

"Quiero la mejor bebida". El encontrar una buena bebida era algo que Ernest puso en sus prioridades. Un pequeño deseo de su corazón.

"No creo que encuentre algo de su agrado Lord Ernest. Las únicas bebidas de este lugar son bastante toscas". Con la experiencia de Lilia trabajando con la realeza ella más que nadie podía decir lo simple que eran las bebidas de este lugar.

"No es por el sabor, solo quiero relajarme un poco". Pero Ernest no quería el agua rancia que tomo con Soldat, cualquier cosa de mejor calidad serviría. Y por eso Lilia era la mejor opción, más caro no significaba mejor. A veces conocer era una herramienta mucho más valiosa.

Lilia suspiro por los comportamientos de Ernest, aunque emborracharse y buscar mujeres era el comportamiento habitual de los nobles de Asura. La cara de ella se calentó con solo imaginar lo que podría planear Ernest. Pero Lilia se calmo, después de ver durante a una semana a Ernest mostrando sus fuertes músculos se estaba volviendo un tortura para Lilia.

Aunque Ernest no estaba pensando demasiado en eso, "Solo dime la bebida que sepa menos mal. Eso es suficiente".

Recuperándose Lilia guío a Ernest para comprar algunas bebidas, aunque ella se sorprendió cuando ella vio la cantidad. "Está seguro Lord Ernest". Sin querer ser indiscreta Lilia pregunto levemente.

El pelirrojo había alquilado una carreta para llevar todas las botellas. Y aunque era exagerado el pelirrojo quería relajarse un poco. Él no sabe cuándo habrá otra oportunidad para relajarse así que era una pequeña escapada.

"No tomaré todo, solo es una reserva".

Lilia acepto, aunque ella estaba lista para detener a Ernest di él se excedía.

También fue un buen momento para comprar varias cosas para su casa, todo fue relativamente barato, y con solo algunas monedas de plata todo fue comprado.

Así que se podía ver a una hermosa maid de grandes pechos junto a un apuesto hombre de cabello rojo que llevaba una carreta al máximo de su capacidad.

Ernest había comprado todo para poder pasar el resto de su tiempo en la aldea con comodidad. Y como esto podría repetirse en el futuro no había ninguna perdida.

"Déjeme acomodar todo". Una vez en la propiedad Lilia se ofreció para acomodar y limpiar todo.

"Ya terminaste tus otras tareas?". Aunque algo de ayuda para acomodar todo sonaba bien, el pelirrojo ya había tomado mucho de la doncella de cabello violeta.

"En realidad hoy es mi día libre, así que no es ningún problema".

Ahora Ernest se sentía mas culpable por hacer trabajar a Lilia en su día de descanso, "Puedes descansar, yo puedo con todo".

Pero Lilia negó tranquilamente, "No es ninguna molestia, es mi trabajo".

Ernest se preguntaba si Lilia era una adicta al trabajo, pero era una perdida de tiempo disuadirla. "Entonces hagámoslo rápido".

Lilia asintió tranquilamente cuando los dos entraron a la casa recién terminada de Ernest.

.....

Primera persona Pov.(MC).

Esta casa se veía mucho más hogareña, y la mayor parte era gracias a Lilia. "Gracias otra vez, supongo que el toque femenino era lo indicado". Me senté en el nuevo sillón para también invitar a Lilia a sentarse.

Lilia hizo una ligera reverencia antes de sentarse cerca mío. Ella se veía un poco cansada, trabajamos por varias horas y su ropa de veía un poco ajustada por las pequeñas gotas de sudor que se filtraron por su cuerpo.

Sus pechos se veían todavía más grandes, y la ropa ajustada lo hacía ver más erótico. Lilia también parecía notar el calor ya que ella desabrochó unos botones para liberarse un poco.

Era difícil no perderse en ese escote, pero me mantuve tranquilo cuando volví a dirigirme a ella. "Si alguna vez necesitas un favor puedes pedírmelo, me ayudaste tanto que me siento en deuda".

Pero Lilia solo lo negó silenciosamente, "Es mi trabajo, aunque me siento halagada. Pero...". Ella se detuvo al final, su expresión era la de alguien que quería decir algo más, pero Lilia siempre se frenaba. "No es nada, pero aprecio sus palabras".

Tuve que suspirar, a veces yo no entendía a Lilia. Ella siempre se esforzaba al máximo pero ella nunca aspiraba a nada. A eso le puede llamar vida?. O acaso las mujeres de este mundo tenían estándares tan bajos.

"Solo dilo, y no te preocupes. Mientras no sea mas difícil que derrotar a un Emperador de la espada no es nada para mí". Un Rey de la espada sería todo un reto, pero yo todavía tenía algunas oportunidades de salir victorioso.

Una pequeña sonrisa se formó en el rostro de Lilia. "Eso parece que prácticamente puedo pedir cualquier cosa. Usted no debería decir eso tan fácilmente".

Lilia todavía se las arreglo para reprocharme por mis palabras. Aunque yo se que podían sonar como grandes palabras.

"Entiendo". No quería insistir en la veracidad de mis palabras. "Pero si quieres decir algo al menos puedo escucharte". Me acerque ligeramente a Lilia para acortar la distancia haciendo que su aroma fuera más fácil de saborear.

Aunque mis respuestas no lograron darle el último empuje a Lilia, ella parecía no querer hablar de eso.

Parecía que Lilia estaba muy tensa, así que se me ocurrió una gran idea. "quédate aquí".

Me levanté sin decir lo que yo estaba apunto de hacer, ella podría intentar hacerlo por mi.

Me moví bastante rápido por la casa hasta volver a aparece enfrente de Lilia junto a dos vasos y una botella con un líquido algo turbio.

"Acompáñame a beber un poco". Me adelante y llene un vaso para ponerlo en las manos de Lilia.

"No creo que sea correcto". Lilia estaba lista para rechazar mi oferta pero me adelante.

"Es una orden". Levanté ligeramente mi voz junto a una expresión de seriedad, si jugaba suave Lilia nunca se relajarse.

Pero parece que mis palabras fueron demasiado efectivas, ya que ella se estremeció un poco antes de agachar ligeramente su cabeza.

"Si es su orden". Lilia acepto tomando un poco del líquido turbio de su vaso.

Fue interesante el cambio de actitud tan dramático, pero no pensé en eso cuando también vacíe el líquido de mi vaso.

Era dulce, no se comparaba al amargo desabrido que probé. No estaba mal, pero todavía lejos de lo que buscaba.

Pero parecía que el sabor me engatuso ya que mi vaso estaba vacío cuando lo noté.

Todavía prefería el amargo del whisky, pero esto no estaba mal.

"Y que tal está?". Pregunté después de ver qué Lilia termino, su cara se había sonrojado un poco, pero su expresión todavía parecía impasible.

"Un poco fuerte". respondió Lilia algo avergonzada.

Levanté mi ceja por un instante antes de volverme a parar. Y de regresada yo traje una jarra con agua.

"Intenta de nuevo". Volví a servir, pero está vez la bebida fue mesclada con agua helada. Rudeus me hizo algunos bloques de hielo así que era la oportunidad perfecta de usarlos.

Lilia todavía se veía indecisa, pero cuando ella noto como mi ceja se levantó ella volvió a tomar de golpe.

No era mi intención, pero Lilia no me dio tiempo para decirle que ella podría tomarse su tiempo

"Y ahora?". Seguí con la charla después de notar la expresión de Lilia.

"Muy agradable, es la primera vez que veo a alguien usar hielo en una bebida". Lilia se veía algo extrañada de mis acciones.

En realidad la mayoría tomaba el alcohol caliente. Mucho más en el norte, lo cual no estaba mal para probar, pero yo estaba acostumbrado al sabor amargo que enfriaba mi garganta antes de llegar a mi estómago. Y que el hielo sea un lujo excesivo también fomentaba esa práctica.

"Entonces disfruta, estás en tu día libre". Le recordé a Lilia, haciendo que ella tuviera una expresión pensativa. Pero al final ella se apoyo en el espaldar del sillón con una expresión relajada.

"Supongo que sí". Lilia uso sus dos manos para agarras el vaso, su mirada era indescifrable. Ella tenía algo en su cabeza, pero  lo único que yo podía hacer era volver a llenar su vaso.

"Déjame servirte de nuevo, pero tómalo con calma". Repetí mi acción pero está vez Lilia comenzó con tragos cortos y pausado.

No me quería quedar atrás así que yo también empecé a beber.

Lilia se veía algo enrojecida, sus párpados estaban ligeramente caídos y su mirada no tenía su expresión severa habitual. Ella empezó a resaltar por su expresión relajada que era bastante inusual.

Un pequeño rubor en su rostro junto a unos ojos algo turbios pero sin perderse totalmente, muy eróticos.

Pero parecía que Lilia todavía no quería hablar así que le acompañe con algunos tragos más, aunque ella era la que me estaba acompañando a mi.

El líquido de la botella había desaparecido, me sentía un poco mareado principalmente porque yo tomé la mayoría.

Pero Lilia se había acomodado completamente en el sillón, su mirada se veía relaja mientras ella miraba en mi dirección. Ella no dijo nada, siendo lo único llamativo el mechón de cabello que caía por su rostro mientras ella me miraba en silencio.

Los segundo se alargaron hasta que los labios se Lilia se movieron formando un oración. "Realmente está bien que te diga algo?".Ella se veía un poco incómoda, pero había destellos de esperanza en sus palabras.

"Ya te dije que si. No sé cómo olvidas que fui criado por prostitutas, deberías relajarte un poco más conmigo". Un origen común y algo extraño yo tenía que agregar, pero mis palabras fueron un poco efectivas.

Lilia me miró un momento para luego ver el vaso vacío en sus manos. Esto se repitió un poco hasta que ella exhalo algo resignada.

"Me preocupa mi padre, aunque le envió lo que yo gano. Él se hace viejo mientras él mira como el dojo en que puso su vida muere lentamente. Si mi madre no hubiera muerto cuando yo nací mi padre no estaría tan solo en este momento". Lilia se veía abatida, su expresión solo reflejaba remordimiento.

Olvide que la piedad filial era muy importante para algunos. Y supongo que ese es el destino de los hombres que no pueden engendrar un heredero.

"Un asunto sencillo, aunque no soy discípulo directo del Dios de la Espada, ser guiado directamente por un Emperador de la Espada me da un pequeño estatus. Dónde vive tu padre?". Si yo podía darme una vuelta por el pueblo del padre de Lilia no seria difícil usar mi fuerza para pensar en algo.

"Lo dice en serio?". La expresión abatida de Lilia fue intercambiados por una mirada completamente diferente. Ella se enderezó y se me acercó un poco. Sus ojos violetas se veía llenos de expectativas, parece que ese era un asunto que realmente la mortificaba a ella.

Hice mi mejor expresión de seriedad, ya que yo tuve una lucha interna para no bajar la mirada y ver su enorme femineidad que rebosaba de vitalidad no era simple si yo todavía quería guardar la última hebra de caballerosidad.

"Si lo dije lo haré". Acepte con convicción mirando directamente a los ojos de Lilia.

Ella se veía un poco sorprendida por mi aseveración tan directa, pero luego se avergonzó un poco al notar lo cerca que ella estaba de mi.

Unas palabras de gratitud parecían ser lo que quería salir de la boca de Lilia, pero ella no dijo nada.

Supongo que su posición le dificultaba expresarse libremente.

"Sigue brindando, recuerda que es tu día libre". Cambien el rumbo de la conversación para cambiar los ánimos.

Lo cual ayudo a Lilia a recuperarse lentamente, aunque ella seguía viéndose indecisa con el vaso lleno.

Pero en contra de mis expectativas Lilia se tomó de un trago todo lo que ella tenía antes de volverse a mi.

"Déjeme servirle a usted". Lilia empezó a llenar mi vaso,  acepte de buena gana además no había sentido en negarme.

Pero después de una hora tuve que detenerme, no era na sensación nueva para mí. Yo estaba borracho, no totalmente faltó de lucidez, pero si me descuidaba podría caerme.

Lilia también siguió tomando conmigo, pero ni acercándose a la cantidad que yo termine tomando.

Mi visión estuvo un poco borrosa y por descuido tire el vaso que Lilia acababa de servirme.

"Disculpa". Me disculpe por mi error, pero mi mayor incomodidad fue porque un poco del alcohol cayó en Lilia.

Lilia vestía su usual vestimenta de maid, con consistía en una blusa blanca con un chaleco muy parecido a un corset negro que la envolvía cuidadosamente.

Pero por el calor Lilia ya había desabrochado algunos botones dejando a ver su delicada piel blanca junto a sus atributos.

Y mi error hizo que Lilia se quitará el corset negro, haciéndola liberar sus enormes pechos. Fue un glorioso balanceo que no logré evitar verlo sin disimular. Su ropa estaba mojada dejando a ver su brasier negro.

Mi boca se sintió seca por esta escena, Lilia estaba usando un trapo para secarse lentamente recorriendo sus propias curvas.

"No se preocupe, y también déjeme limpiarlo". Lilia se veía extrañamente sería cuando dijo esas palabras.

No tuve tiempo para contestas cuando Lilia se inclino enfrente mío para limpiar mi pantalón que también fue rociado con alcohol.

Mi cuerpo sentía los movimientos de Lilia, pero mis ojos no se alejaron de su escote. Mi pantalón empezó a sentirse muy apretado.

Con una mirada rápida note una furiosa erección por parte mía.

Pero Lilia seguí limpiando mis piernas sin inmutarse. No, ya tenía un gran sonrojo en su rostro. Pero ella aún siguió limpiando como si nada.

Me estaba provocando o ella era estaba siendo muy profesional.

Talvez en un momento de lucidez podría pensar mejor las cosas, pero Lilia estaba acariciando mi entrepierna mientras ella mostrando su escote de forma tan obscena.

Podría estar equivocándome, pero si en este momento yo daba un paso atrás no podría llamarme hombre.

Detuve la mano de Lilia haciendo que ella levantará da mirada haciendo que nuestros ojos de miraron directamente.

Lilia parecía querer decir algo pero yo puse un poco de fuerza haciendo que el cuerpo de ella cayera en el sillón.

Ahora Lilia me estaba mirando desde abajo, su ojos no parecían la de alguien asustada o alguien que estaba haciendo algo en contra de su voluntad.

Sus ojos se veían nebulosos con una expresión de lujuria, ya no había por ningún lugar la recta y responsable Lilia . Ella se veía complacida de como yo tomé la iniciativa.

No pude evitar mostrar una sonrisa arrogante, yo estaba en la posición dominante, y aunque parecía que yo estaba forzando las cosas, las acciones de Lilia ahora me parecían muy claras.

La personalidad que proyecte fue la de un buen chico, así que normalmente intentaría guardar las apariencias y yo actuaria de forma más reservada.

Pero Lilia quería esto, supongo que me metí tanto en el personaje que no vi las señales.

Así que decidí mostrar mis verdadero colores.

No tarde en mover mi mano para empezar a tocar el cuerpo curvilíneo de Lilia, mi mano empezó a amasar uno de su pecho recordándome que mi mano no era suficiente para sostener tal colosal objeto.

Lilia se estremeció con mi toque, ella no se resistió. Pero sus muslos empezaron a impacientarse solo moviéndose como si quisiera extinguir una picazón.

Mi mano libre recorrió lentamente la pierna de Lilia por encima de su largas medias blancas.

La temperatura de Lilia era bastante alta, y mientas mas subía más se calentaba.

"Hmmn".Lilia dio un grito sordo cuando mi mano llegó peligrosamente a su jardín secreto.

La expresión de Lilia no mostraba demasiado, pero su cuerpo era muy honesto.

Lilia había empapado mi mano con sus fluido, yo todavía no había hecho nada y Lilia no paraba de estremecerse. La maid del hogar parecía haberse contenido mucho tiempo.

Pero Lilia no era la única que podía divertirse. Con agilidad desabroché todos los botones de la blusa de Lilia, dejando solo a la vista su brasier de color negro. No parecía de los ella usualmente usaba, este era diferente. Del tipo que las mujeres usaban para provocar a los hombres.

Me irritaba haber sido yo él que fue provocado, por eso con un movimiento rápido de mi dedo corte justo en la mitad del brasier negro de Lilia.

Enfrente mía había una imagen erótica a un nuevo nivel, los enormes pechos de Lilia fueron liberados mostrando su verdadero tamaño.

Eran suaves y grandes, sus piel era inmaculado y sus pequeños pezones  rosado era encantador.

La cara de Lilia estaba todavía más roza, ahora ella esquivando mi mirada. Verla avergonzaba prendía aún más mi fuego interior.

Mi dragón estaba en el punto máximo y ya no podía ser detenido. Levanté la larga falda de Lilia hasta que era visible una tela de color negro que hacía juego con su brasier.

Las largas piernas de Lilia que vestía  de seda blanca siempre daba la imagen de alguien recta e inmaculada. Pero eso solo ocultaba su interior pervertido. Sus muslos estaban empapados dejando poco a la adivinación sobre su deseo más primitivo.

"No me culpes si pierdes la cabeza". Seguí mis instintos y me volví más rudo.

Arranque la tela que eran la última barrera de lo que estaba apunto de suceder.

Los muslos de Lilia se apretaron cuando ella sintió la brisa fría golpear su zona más privada.

Pero yo no estaba para satisfacer a Lilia, ella tenía que divertirme a mi. Le di la vuelta haciendo que su gordo y burbujeante trasero estuviera en mis manos .

No podía ver la expresión de Lilia, pero así era lo mejor. Sus orejas eran rojas y aunque ella estuviera en silencio sus pequeños gemidos y convulsiones no podía ocultarse de mi.

"Uhhhnnnm💓"Lilia no pudo ocultar su voz cuando empecé a acariciar su gordo trasero.

Sus pechos casi parecían ubres por lo grandes que eran, desde atrás podía ver cómo sobresalían de su delgado cuerpo.

Y aunque me gustaría seguir molestando un poco a Lilia, la molestia en mi pantalón era insoportable. Así que deseche también mi ropa.

Lilia se estremeció cuando sintió algo tocar sus muslos. Ella dio un pequeña mirada hacia mi logrando ver mi hombría alineada con su vagina.

Sus ojos mostraron asombro, y eso fue la única expresión que ella mostró, su trasero empezó a moverse hacia adelante y hacia atrás acariciando mi hombría. Sus jugos  goteaban de deseo y su temperatura casi podía quemar.

Me sentía bien al estar en esta situación, así que decidí darle su deseo a Lilia.

Agarre la cintura de Lilia y la alinee conmigo. El tamaño lo hizo un poco dificultoso, pero Lilia empezó a devorar mi hombría lentamente.

"Unnn pooocc más💓💓". La respiración de Lilia estaba entrecortada, casi haciéndose irregular entre más profundo yo entraba.

Sus pliegues estaban muy apretados y cálidos, justo deteniéndose en la entrada de su útero.

El cuerpo de Lilia volvió a estresarse, pero está vez fue mucho más fuerte, hasta el punto que ella se derrumbo con los ojos perdidos. Ella se había desmayado.

Pero con un movimiento de cadera la luz en los ojos de Lilia regresaron junto a un aullido suplicante."Deespaciiiu💞💞".

Los llantos de auxilio no coincidía con la expresión en su rostro. Si alguien más viera a Lilia no podría reconocerla. Pero eso lo hacia más excitante.

Empecé a apretar los pechos de Lilia desde atrás haciendo que ella volviera a estremecerse. Pero solo la seguí castigando golpeando su gordo trasero sin descanso.

Pero después de veinte minutos Lilia recuperó algo de lucidez cuando ella sintió como el objeto que la estaba devastando se hacia más grande.

Lilia tomo la iniciativa cuando ella me empujó para que ella estuviera encima mío. Haciendo imposible retirarme en el último momento.

"uhhnnnmmmm💓".Lilia grito cuando pinte su útero de blanco. sus pliegues se apretaron con fuerza para no dejar escapar nada de mi esencia.

Después de unos segundo Lilia cayó encima mío aún con mi hombría dentro de ella. Se veía satisfecha llegando al éxtasis, pero la noche todavía era larga, así que tomando a una sorprendida Lilia volví tomarla muchas veces más.