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Persecución

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—Ya pueden salir, no necesitan esconderse— después que Jin se alejara de goblin general, en el camino sintió que un grupo de personas lo seguía muy de cerca, deteniendo sus pasos espero que ellos lo alcanzaran.

—No nos hagas daño por favor— saliendo de los arbustos, dos mujeres hablaron en un inglés rustico mientras su cuerpos temblaban por el frio.

Revisando los alrededores con su aura, Jin encontró que varias presencias aún se mantenían ocultas detrás de los árboles —Si tienen problemas en usar el inglés pueden hablar en alemán— Jin reconoció el acento que ellas usaban, en el pasado tuvo que aprender todos los idiomas para poder comunicarse con sus compañeros.

Con el rostro fruncido, una de ellas dio un paso al frente y extendió su mano mientras hablaba en alemán —Mi nombre es Victoria y mi amiga se llama Daisy, ambas somos profesoras de primaria— asintiendo mientras tomaba el borde su ropa, las cejas de Daisy temblaron cuando ella intento mirar hacia atrás.

—Un gusto, pueden llamarme Jin— mientras algunas presencias intentaban rodearlo, Victoria trato de atraer la atención de Jin ampliando la abertura de su camisa.

—Ambas son muy bonitas no lo niego— tomando el brazo de Victoria, Jin encontró que marcas de moretones se escondían bajo su ropa —Daisy, podrías acercarte, no les hare daño, solo necesito comprobar algo—

Sin soltar el brazo de Victoria, Jin envió una corriente cálida de energía a través de su cuerpo para que ella se sintiera mas segura a su lado, sin bajar su guardia en el momento que Daisy estuvo a su lado Jin las abrazo y desapareció del lugar.

—Shh! No se atrevan a realizar ningún sonido o tendré que callarlas a mi modo— apareciendo sobre la copa de un árbol, Jin espero que las presencias que detecto hicieran su aparición, no paso mucho tiempo cuando un grupo de 4 hombres con hachas de piedra salieron de los arbustos.

—Como te atreves a perderlo, si hubiéramos robado esa espada nada en este bosque podría hacernos frente— un hombre rubio de 40 años comenzó a gritar mientras revisaba el lugar donde Jin desapareció.

Uno de sus compañeros, sacando una gema amarilla de su bolsillo dijo algunas palabras en voz baja mientras revisaba los alrededores.

—Oye, respóndeme cuanto te hablo, esa habilidad tuya es inútil si no puedes seguir a una presa tan débil—

Poniéndose de pie, el hombre con la gema amarilla miro al que parecía ser su líder y sin previo aviso le dio un golpe en la cara —Ya te dije desde el inicio, no me grites otra vez o sino tendré que eliminarte—

Tomando su rostro, el hombre tendido en el suelo se sintió agraviado por el ataque de su hermano, en el ultimo momento ambos se encontraban en el ascensor de un edificio, lo ultimo que supieron fue que uno de ellos tuvo una habilidad que le permitía seguir a cualquier objetivo siempre que tenga algún rastro de él.

—Ustedes dos dejen de pelear— ayudando para que su compañero se pusiera de pie, un hombre negro de casi dos metros de alto tenia una cuerda en una de sus manos —Responde, ¿has perdido su rastro?—

Mirando con odio a su hermano, Alan guardo la gema en su ropa mientras señalaba el árbol donde estaba Jin.

—Oh, así que ese era el lugar donde se escondía la rata escurridiza— elevando su voz agrego —Oye tú, sabemos que estas en ese árbol, será mejor que salgas de tu escondite antes que incendiemos todo el bosque—

Mirándolos desde el cielo, Jin sintió curiosidad por la gema en las manos de Alan, un objeto como ese era algo que tenia mucho valor en el mercado.

—No hablen, solo asientan si estoy en lo correcto, ¿ellos fueron los que les hicieron esas heridas?— temblando de miedo al escuchar las palabras de Jin, Victoria mordió su labio tratando de contener su voz mientras asentía con la cabeza.

Luego que Jin descubriera que el cuerpo de Daisy tenia moretones por todo su cuerpo, la ira en el interior de Jin se fue acumulando, si el no hubiera estado al lado de sus hermanas era posible que una bestia como ellos las hubiera tratado como basura.

Levantando las cejas, Jin sintió que una pequeña hebra de energía salió de sus piernas —Maldición, necesito irme de aquí ya— elevándose en el aire, la hebra voló a la velocidad del sonido llegando a su maestro.

Goaaar!!!

Terminando de devorar todos los cadáveres a su alrededor, la piel del goblin general se volvió mas oscura y resistente. Devorando la hebra de luz, las pupilas en sus ojos se dividieron a la mitad mientras dos runas aparecían en el centro de ellas.

Parado sobre el árbol, un par de ojos viciosos apareció sobre Jin vigilando cada uno de sus movimientos, del otro lado del bosque, el goblin empezó a reír como un cerdo al imaginar el momento en que devoraría a tan jugosa presa.

—Tienen un segundo para decidir, me seguirán o se quedaran en este lugar— preparándose para escapar de los ojos en el cielo, Jin busco en su memoria que tipo de criatura tenía tal habilidad, al encontrar que ellas no dijeron una palabra Jin no espero un segundo mas y las libero, él no seria su salvador si ellas no tenían intención de hablar, si él se quedaba esperándolas lo mas probable era que todos murieran sin dejar rastro de sus cuerpos.

Al ver que Jin las iba a abandonar, Daisy se aferro al brazo de Jin y hablo en japones dejando sin palabras a Jin —Por favor no culpes a Victoria por tratar de engañarte, es solo que…— mirando a su amiga ella continuo —ellos tienen secuestrado a varios niños, como maestras no podemos abandonarlos y esas escorias nos amenazaron con asesinarlos si no seguíamos sus órdenes—

Resolviendo sus propios pensamientos, Jin la aparto de su lado —Esperen aquí, no se atrevan a moverse un centímetro, comprobare sus palabras—

Desapareciendo del lugar, Jin rodeo a los hombres que estaban juntando ramas secas para encender las llamas y camino hacia el lugar donde sintió las presencias restantes.

Guiado por una cuerda que atravesaba los árboles, Jin encontró a dos hombres que tenían amarradas a cuatro mujeres y al menos 10 niños con mordazas en sus bocas.

—Oye, ¿escuchaste algo?— girándose para ver a su compañero, el hombre sintió que el mundo se dividía en dos, sin sentir dolor el trato de sostener su cabeza, pero en el momento que intento levantar sus manos, la conciencia que mantenía vivo su cuerpo desapareció en la oscuridad.

Sacando la espada del cadáver, Jin no corto las cuerdas que rodeaban a las mujeres y los niños, ellos estaban temblando de miedo mientras las lagrimas caían por sus ojos al ver la figura del ángel caído que asesino a sus captores, ellos pensaron que serian los siguientes en morir.

Negando con la cabeza, Jin trajo a Victoria y Daisy, ordenándoles que calmaran a sus compañeras les señaló una dirección y les indico que no se detuvieran por nada en el mundo.

No importo la forma en que Jin trato de moverse, los ojos sobre su cabeza siempre lo siguieron, bloqueando cualquier tipo de escape.

Apretando la empuñadura de su espada, Jin culpo a los hombre por tratar de engañarlo, si el no se hubiera detenido tal vez el goblin general no lo habría encontrado.

—Oye Alan, estas seguro que están ahí— escuchando las palabras de su hermano, Alan saco la gema y canto las palabras que activaban su habilidad de detección, recordando el hechizo que apareció en su memoria cuando llego al mundo, Alan pensó que estaba en un juego maldito y todos los demás eran solo una parte de él, fue solo gracias a su hermano que mantuvo la cordura y no cometió locuras indiscriminadamente.

—Esto esta mal— luego que la gema reaccionara, Alan corrió hacia el árbol mas cercano mientras grito —Esta detrás de nosotros—

No creyendo sus palabras, el hermano de Alan se giro para burlarse de lo tonto que parecía.

Swish!

Con un destello de luz, los brazos de todos cayeron al suelo mientras la figura de Jin aparecía observándolos con sus ojos fríos. En un principio Jin decidido dejarlos con vida mientras permitía que los demás escaparan, pero lo que vio detrás de los arboles era algo que él nunca podría perdonar.

Sintiendo la perdida de sangre en sus cuerpos, los hombres comenzaron a gritar mientras intentaban parar el sangrado. Alan, mordiendo sus labios trato de aguantar el dolor, mirando como Jin no había hablado en ningún momento el trato de acercarse mientras clamaba por ayuda.

—Ayúdame por favor, no quiero morir así!—

Al mirar el rostro de los hombres, un destello carmesí en sus ojos amenazo con hacerse el control de su cuerpo, antes que su juicio se nublara Jin levanto su espada y les quito la vida, no podía permitir que su sed de sangre fuera la fuerza impulsora de sus acciones.

Goaaar…Goaaar!

Mirando con locura los cuerpos tendidos en el suelo, la baba en la boca del goblin gigante cayo en el suelo mientras extendía sus manos para devorar los cadáveres.

En el momento que Jin sintió que el goblin había llegado, ya no había forma de escapar, por el tiempo que se demoro en llegar, él no dudaba que podía alcanzarlo si lo quisiera.

Aprovechando que el goblin se distrajo, Jin ataco a la espalda del goblin logrando penetrar unos centímetros sobre la carne.

Sacando su espada, Jin retrocedió unos metros evitando que el goblin lo atrapara con sus manos. Vigilando cada movimiento de la criatura, cuando este levanto su hacha Jin corto un poco de su piel, sin que el mostrara signo de dolor.

Goar Goar Goar

Riéndose de su presa, el goblin dio un salto que no correspondía a su apariencia y golpeo su hacha contra el suelo.

Levantando una nube de polvo, Jin se escondió en uno de los arboles y trato de encontrar alguna abertura en la posición del goblin.

—Allí!— lanzando un corte hacia sus piernas, la espada pudo penetrar un poco mas que antes, provocando que el goblin tropezara.

Sin perder tiempo Jin volvió a esconderse, un instante después el lugar donde estaba fue remplazado por un gran agujero.

Gruñendo con enojo, el goblin soltó su hacha y comenzó a fortalecer su cuerpo con diferentes runas.

—Maldición!— saliendo de su escondite, el goblin sediento de sangre destruyo el suelo arrojando a Jin contra los árboles.

—Estas buscando tu muerte!— levantando su espada, Jin bloqueo el puño que amenazo con impactar su cuerpo, sintiendo como sus huesos se fracturaban por el rebote del impacto, Jin no se atrevió a soltar su espada.

Goar!!!!!

Sin perder su oportunidad, el goblin atrapo una de las piernas de Jin y lo arrojo hacia el suelo, vomitando un bocado de sangre.

Utilizando toda su experiencia acumulada, Jin logro cortar en varias ocasiones al goblin.

—AHHH!!— con su brazo izquierdo seriamente dañado, Jin se levantó apoyándose con su espada —Gracias, no pensé que había olvidado algo tan importante— concentrando toda la energía en su cuerpo, Jin levanto su espada mientras una serie de rayos aparecieron en su superficie.

Revelando sus dientes afilados, el goblin camino lentamente hacia Jin al notar lo débil que se encontraba, acercando su brazo, sus dedos estuvieron solo a una aguja de distancia cuando el cielo cambio de color.

En un instante, una llama azul cubrió la espada haciendo hervir la tierra alrededor, cortando hacia el cielo, el olor a carne quemada se esparció por todo el aire cuando un gran trozo de carne impacto en el suelo.

Goaaar!!!

Tratando de conectar su brazo, el goblin miro con furia a su presa, ni en sus más loco pensamientos creyó que una criatura como él podría dañarlo de esa forma.

Conteniendo la respiración, Jin sintió como su cuerpo estaba a punto de colapsar, su mente en todo momento trato de buscar la forma de salir con vida, pero en todas las situaciones posibles solo la muerte quedaba como resultado.

Luego de devorar su propio brazo, el goblin rugió con locura mientras su brazo restante tomaba el hacha en el suelo preparándose para terminar su cacería.

Revelando una sonrisa en su rostro, Jin levanto su espada y enfrento al goblin sin miedo —Ah, que sentimiento tan nostálgico—

Cortando con su hacha, el goblin rugió con fuerza mientras Jin hacia lo mismo con su espada.

En el momento que ambas armas chocaron, las llamas azules se elevaron en el cielo mientras los cuerpos de dos guerreros cayeron inmóviles en el suelo.

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