3. Asesinatos

POV HUGO

Estaba cansado de trabajar. Llevo un par de meses intentando encontrar al asesino, pero es tan bueno que no deja rastro, ni siquiera las balas. Todo lo que sabemos es que es un profesional y que está matando a gente que trabaja en mafias o pequeños camellos, pero a pesar de eso, no se merecen morir a manos de otra persona.

Mi compañero, Derek, y yo llevamos investigando estos asesinatos durante meses, y no habíamos descubierto nada sobre el asesino o asesina. Empezaba a desesperarme un poco no encontrar nada, pero esto no era todo. Había rumores de que los líderes de la mafia rusa vendrían a Italia a hacer un negocio de contrabando de armas, y no se sabe con quién aún, algunos piensan que es con el Titano di Ferro, pero yo no estoy tan seguro de eso, si algo que he aprendido en estos años que estoy detrás de ese tipo, es que no hace negocios con los rusos, no sé el motivo, pero es lo que hace.

Justo en ese momento se acerca mi compañero a mí, y por su cara sé que no hay ninguna prueba del asesino en nuestra nueva víctima.

"Seguimos sin tener nada." Dijo sentándose y llevando las manos a la cabeza. "Lo sé, se te puede ver en la cara." Pasé a mirarlo en vez del informe que estaba terminando.

"Esto me empieza a desesperar, y no quiero cerrar los casos, por mucho que sean delincuentes no se merecen morir así." Suspiró y pasó a mirarme. Me crucé de brazos e intenté pensar algo que pudiésemos hacer que nos ayudase a encontrar al asesino que estaba acabando con todos los delincuentes, pero como es lo normal con este asesino, no se me ocurre nada, lo que hace que me frustre más si es posible.

"Lo sé, pero realmente son buenos sea quien sea los que está matando." Derek asintió y pasó a mirar a su pantalla, probablemente metiéndose en los casos para ver si encontraba algo, lo cual no haría, repesamos muchas veces esos informes como para encontrar algo nuevo en ellos.

"Por lo que sabemos, es solo una persona." Dijo moviendo el ratón por la pantalla y yo seguí haciendo el informe que estaba haciendo antes de que Derek llegase. "No podemos dejar por sentado nada, y desde mi punto de vista una persona no puede ser tan cuidadosa y no dejar ninguna prueba."

No me hacía falta levantar la mirada para saber que el estaba conmigo, porque ya habíamos ido por esa teoría y era la que menos probable parecía de todas. "Lo sé, pero cabe la posibilidad."

"Yo creo que hay algo detrás de estas muertes. Todos presentan golpes y después disparos. Es como si intentasen sonsacarle información y cuando la obtienen lo matan para no dejar prueba." Todos los casos que nos pasaban a Derek y a mi no tenían ni rastro de pruebas y todos presentaban golpes y disparos, lo cual nos llevaba a pensar que se trataba de la misma persona o personas.

"¿Crees que la mafia italiana está detrás de esto?" preguntó, pero no tenía sentido que fuese la mafia italiana. Llevaba años detrás de la mafia italiana y nunca hacían un trabajo tan perfecto. Es más, dejaban pruebas para que supiésemos que eran ellos, pero nunca podíamos atraparlos porque no sabíamos quién lo había hecho de la mafia,

"No, ellos no son tan cuidadosos, no dejan pruebas, pero sabes que son ellos. En cambio, con todas estas víctimas no tenemos ni idea de quien ha sido ni la razón del por qué lo esté haciendo." Dije acabando el informe y enviándolo.

"¿Alguna nueva mafia?" negué, porque eso era imposible. Una nueva mafia dejaría más que claro que habían sido ellos y estaríamos alertados de antes por nuestros contactos de las calles. "De ser una mafia, dejarían claro que fueron ellos, y ese no es el caso, estos se esconden."

"Tenemos que encontrarlos cuanto antes para poder centrarnos en los rusos. Según mis fuentes aparecerán aquí en unos días, y parece ser que la mafia del Titano di Ferro está detrás de todo esto." Eso no era posible, porque algo que no hacía el Titano desde hacía años, era asociarse con los rusos. No sabemos la razón del por qué, pero sabemos que no hace negocios y que al parecer los odia.

"Son los rusos, por lo que lo dudo." Dijo "Hace años si hacían negocios con ellos, pueden volver." Negué, porque algo me decía que lo que había pasado entre la mafia italiana y la rusa no se arreglaba y menos haría negocios con ellos. "No sé qué razones tendrá para no hacer negocios, sólo sé, que ya no lo hacen."

"No tengo ni idea, pero he oído otra cosa y que, si es cierto, no será bueno para nosotros ni para la ciudad." En cuanto dijo eso, me enderecé en la silla y miré en su dirección, porque eso no sonaba para nada bien. "¿Qué escuchaste?"

"En la calle se habla de que se va a empezar una guerra entre mafias. Se están armando." Esto no era bueno, pero solo esperaba que no fuese las que estaba pensando que fuesen, porque como fuese la italiana y la rusa, teníamos un gran problema encima. "¿Qué mafias?"

"La del Titano di Ferro y otra. No sé cuál, pero se dice que estos van contra los italianos." Puse las manos sobre la mesa, porque esto tenía pinta de ser obra de los rusos. No había nadie tan estúpido ni tan poderoso para desafiar a los italianos. "Por eso te digo que tenemos que acabar cuanto antes con esto del asesino misterioso, porque si no, vamos a tener un gran problema."

"Sí, por eso, terminemos con esto o dejémoslo para más tarde. Creo que más importante es evitar que esa guerra pase a que descubramos a ese asesino pronto. Estoy seguro de que lo pillaremos pronto." Asintió y se levantó para irse supongo a no sé dónde.

"Entonces, ¿vamos a dejar el caso del misterioso asesino de lado?" Asentí y me levanté para ir a ver si mis informantes habían escuchado algo de lo que se avecinaba, porque en este momento no me importaba una mierda el asesino misterioso, teníamos problemas más grandes que un asesino de delincuentes peligrosos.

POV ALEXANDRA

En este mismo momento estábamos en mí habitación para meter todo ropa en las maletas, bueno, lo estaba haciendo yo sola ya que Megan estaba sentada mirando para todos lados en la habitación. Habíamos pasado toda la tarde jugando con Alison, y debo admitir que hace mucho tiempo que no me lo pasaba tan bien.

"¿Por qué hace tiempo que no entro en esta habitación?" dijo Megan, siguiendo mirando para todos lados. No es que cambiase demasiado mi cuarto desde la última vez que entró, básicamente está como cuando me lo dieron, no es donde pasaba demasiado tiempo digamos, o me dormía en la habitación de Alison o no quedaba dormida e iba a entrenar o a buscar información de los rusos.

"Pues no lo sé, eso deberías de preguntártelo a ti misma." Doblé la camiseta y la metí en la maleta. Cuando terminase con la mía tenía que hacer la de Alison y a este paso tendría que acabar haciendo la de Megan. Siempre fue algo que odio y a mi no me importaba hacerle la maleta a pesar de sus veinte años.

"Pues la verdad, no tengo ni la menor idea del por qué. Se ve que no cambió nada desde la última vez que estuve aquí. Es más, no cambió prácticamente nada desde que nos vinimos a vivir a la casa" dijo dejando de mirar para todos lados y centrar su mirada en mí.

"Es porque es así, sabes donde me paso mi tiempo, y no es precisamente en una cama" Asintió y se cruzó de brazos poniendo se seria, dándome a entender que hablaría de lo que quería descubrir.

"Me da la sensación de que las dos hemos estado trabajando en lo mismo, pero por separado" asentí y cerré la maleta, acabando por sentarme en la cama a su lado mirando por la ventana. "Sé de qué estás hablando, pero de todas maneras te dejare que me expliques a que te refieres por tu parte"

"Vale, pues te explico. El último par de meses he estado investigando en donde podemos encontrar a esos cabrones que nos tuvieron encerradas durante años y he descubierto cosas." Dijo levantándose y empezando a andar de un lado para otro en la habitación. "¿Qué cosas?"

"Que los estaba persiguiendo la policía y que se tuvieron que ir. Adivina a donde fueron." Se giró mirando para mi con un brillo en los ojos. "A Rusia, eso no es nada nuevo."

"Entonces espero que esto lo sea. En las calles se habla de que volverán en un par de semanas para cerrar un negocio de armas creo." Se paró en frente mía esperando mi reacción, pero no iba a ver ninguna porque no estaba para nada sorprendida.

"Te lo confirmo, vienen, y es menos que en un par de semanas, más bien, es dentro de un par de días." Fue en ese momento en el que le cambió a ella el rostro de sorpresa, pero eso ya lo sabía yo desde hace un par de días y por eso algo me decía que era por eso que Francesco nos quería enviar a la otra punta del mundo, para evitar que Megan y yo vayamos a la caza de esos mal nacidos. "¿Qué?"

Asentí y ella se sentó en la cama mirando para mí que me había levantado hace poco más de un minuto. "Lo que escuchaste, y de no ser por este viaje que quiere hacer papá, los hubiera pillado y acabado con lo que teníamos pensando hacerles." Dije cerrando los puños, porque es algo que me molestaba. "¿Te ibas a vengar sin mí?" Me senté a su lado y puse mi mano sobre su rodilla. "No querida, no me iba a vengar sin ti. Te iba a avisar en el momento que los tuviésemos en mi poder."

Una sonrisa apareció en su rostro y puso su mano sobre la mía, pasando a mirar por la ventana. "Eso me gusta." Asentí "Lo sé, pero ahora no puedo hacerlo porque papá nos quiere lejos de aquí por alguna razón, o al menos me puedo hacer una leve idea de por qué nos quiere lejos."

"He oído que se está armando una guerra." De nuevo, asentí, porque eso también lo había oído yo. "Algo así he escuchado yo, y eso mismo es lo que iba a confirmar esta noche." Sacó su mano de sobre la mía y me miró con el ceño fruncido. "Y no me lo ibas a decir." Negué, porque era algo que no iba a hacer. "¿Sabes, al parecer hay un asesino por las calles que va matando a personas que tienen que ver con el narcotráfico y todas las cosas a las que se dedica papá y gente que conoce y que no deja ni una sola huella" asentí

"¿Sabes quién es?" dijo sorprendida de que supiese quién era, pero realmente no me quedaba remedio saber quién era. "Sí no lo sé malo." Una de sus cejas casi le llegó a la línea del pelo de la pregunta silenciosa que me estaba haciendo, pero no tenía ganas de hablar de esto en este preciso momento. "¿Tenemos que hablar de esto en este momento Megan?"

"Sabía que tenías que ser tú, no hay nadie tan buena como tú en eso." Dijo ni lo más mínimo sorprendida. Ella me conocía mejor que nadie y sabía todo lo que hacía cuando quería saber información de los rusos, o al menos se podía hacer una idea.

"Lo hice con los primeros para dejar claro como quería el trabajo hecho, ahora no lo necesito y es raro que haga la parte de limpieza" dije mirando al frente "Para eso tendrás gente a tu disposición." Asentí, pero que eso realmente no tenía que ver en nada.

"¿Tienes gente y andas con la gente de papá? Sobre todo, con el estúpido de Adriano." Sabía que a Megan no le gustaba Adriano para nada, y no la culpo, porque no era ni la mitad de bueno en su trabajo, pero al menos sabía que podría conseguirme todo lo que necesitase a pesar de sus pegas últimamente. También sé que ella pensaba que me estaba acostando con él, lo que me hacía preguntar por qué pensaba que me acostaría con alguien después de todo por lo que hemos pasado, pero tampoco se lo negaba.

"Primera de todo, no tiene nada que ver que ande con la gente de papá para que así esté más tranquilo, de ellos me puedo escaquear cuando quiera, y segundo, puede ser que Adriano sea un inútil en su trabajo, pero es la persona en la que confío y sé que puede hacer el trabajo" se giró para ver si decía la verdad, lo cual estaba haciendo, y cuando lo confirmó, enmascaró su cara de asco.

"No lo tengo yo tan claro que sea por todo eso que lo tienes contigo por eso, pero lo dejaré así por el momento" dijo. "Lo que tengo que hacer es encontrar gente por mi propia cuenta para hacer los trabajos sucios, para evitar que cuenten algo en caso de que papá les haga las preguntas" Asintió y volvió a centrar la mirada al frente.

"Te puedo ayudar con eso. Creo que es mejor que unamos fuerzas en vez de buscar cada una por nuestro lado" Asentí. "Estoy de acuerdo contigo, pero por el equipo no te preocupes porque tengo a la gente indicada en mente. Dame un par de días y consigo al equipo"

"Entonces, ¿nos unimos? Si por separado ya hemos conseguido información, juntas podemos conseguir todo lo que nos propongamos." Asentí y Megan acabó por coger mi mano. "Es lo mejor pero todo esto tenemos que mantenerlo entre nosotros. Que no se entere Francesco, porque entonces la tendremos jodida" Asintió y se levantó de la cama

"Tenemos que entrenar como hacíamos hace años, para prevenir lo que sea que venga, y espero que no me pongas ninguna excusa, porque entrenábamos incluso cuando estabas embarazada de Alison. No tendrás que quitarle tiempo a Alison, solo tendremos que encontrar el momento oportuno para hacerlo. No tenemos ni porque ir todos los días a la universidad, no es lo que nos hace demasiada falta" dijo, y la verdad, sabía que muchas veces ponía la excusa de que tenía que estudiar, porque si algo era mi hermana, era inteligente, prácticamente no necesitaba ni estudiar, al igual que yo.

"¿No es a ti la que te costaba estudiar y que las cosas se te quedasen en la cabeza?" la vacilé con una sonrisa en mi rostro. Se giró en mi dirección y con una sonrisa que prácticamente no le cogía en el rostro. "Eso es una tapadera para, en teoría, pasar más tiempo en la biblioteca…"

"Lo sé, no hace falta que me lo digas. Ahora vete a hacer tu maleta que esta vez no te la pienso hacer yo" Hizo un puchero y se cruzó de brazos. Sé que no le gustaba hacer la maleta, pero ni mi hija de seis años hacía eso para conseguir que hiciésemos lo que ella no quería.

"Eres mayor bastante como para hacerla tu sola, asique ve a hacerla y descansa" Se acercó a mi y me dio un beso en la mejilla. "Espero que tu también lo hagas" asentí, pero era demasiado probable que durmiese un par de horas y luego me despertase con una pesadilla.

"Espera, antes de irme, ¿tú no ibas a ir a ver a un tipo que te iba a dar información?" dijo volviendo a girarse en mi dirección esperando que no me pidiese venir conmigo. Al final, no es que la necesitase allí, necesitaba dormir, y si algo hay que aprecia Megan más que a nada, es dormir.

"Sí, ¿qué pasa con eso?" se cruzó de brazos con una ceja elevada. "Que yo voy contigo." Negué, prácticamente sabiendo que no iba a escuchar nada de lo que le dijese. "No es necesario, me las apañaré sola." Negó "Ni de coña, me pienso ir contigo, además, ahora somos un equipo."

Suspiré y acabé por cerrar la maleta la cual había dejado abierta. "Está bien, pero tendremos que ir a por Adriano."

Asintió y volvió a darse la vuelta para dirigirse a la puerta. "Te advierto que como te vayas sin mí, avisaré a papá y haré que te busque por toda Italia si es necesario."

Con eso salieron de la habitación de Alexandra una para dirigirse a la habitación de su hija y otra para la suya propia y hacer las maletas para salir mañana temprano. Eran las dos de la mañana y su vuelo salía a las seis, por lo que tenían algo menos de dos horas para sacar toda la información a ese tipo y volver a casa para que nadie sospechase que habían salido, y mucho menos, que su padre se enterase de que habían salido.