Capítulo 156: Los peligros del alcohol

(Perspectiva Luis ebrio)

¡Maldita mierda!

Primero el bastardo de mierda que es mi padre logra escapar, luego mi estúpida madre resulta ser una idiota incestuosa que se masturba mientras piensa en mí, y por si eso no fuera suficiente, ahora ni siquiera tengo control de mi propia vida amorosa.

¡MIERDA!

Lo que sea. Ya sea una mierda profunda o una mierda descomunal, estoy acostumbrado a que mi vida sea una mierda así que esto no importa, nada importa…

Bueno, tal vez algunas cosas importan.

Las mujeres con las que realmente me encariñé me importan, pero todo lo demás puede irse al jodido infierno…

"Señor, creo que usted ya ha bebido suficiente…" – Un camarero se me acercó con una expresión de incomodidad.

¿Soy Luis?

Ah, no, ahora mismo soy el imbécil de Seiji así que puedo actuar como el imbécil que realmente soy.

"¡Cállate! ¡Tráeme más vodka y tequila!" – Grité furioso al ver que mi botella estaba vacía.

"S-Señor, esa era la última botella" – El camarero me miró con miedo.

Así es imbécil, soy un jodido yakuza así que debes temerme… Espera… ¿Se acabó el alcohol?

Estar vivo es una mierda.

Me puse de pie, y saqué mi tarjeta de crédito para pagar lo que bebí.

"N-No es necesario que usted pague señor…" – El camarero parecía ansioso.

"¡Cállate imbécil! ¡¿Crees que soy un jodido patán que se aprovecha de los imbéciles incompetentes como tú?! ¡Voy a pagar lo que consumí ya que no soy un jodido animal que se aprovecha de personas trabajan de forma honesta!" – Grité mientras me masajeaba la frente.

Estoy rodeado de idiotas…

El camarero se apresuró a recibir mi pago.

Este idiota no es tan incompetente… Le daré una buena propina, de todas formas, no es mi dinero.

Ah, espera, en Japón está mal visto dar propinas… Lo que sea, me importan una mierda los modales así que le daré propina.

Caminé hacia la puerta para buscar otro bar.

A pesar de que estoy jodidamente ebrio y apesto a alcohol, mis sentidos funcionan a la perfección así que noté cuando una mujer humana sin habilidades especiales me estaba siguiendo.

Me detuve y miré al cielo, ya es de noche…

Bueno, antes de embriagarme le dije a Umaru que hoy no llegaré a casa así que da igual, solo espero que esa mocosa coma la cena que le dejé o se enfermará si sigue comiendo comida chatarra…

"Espera…" – La mujer que me estaba siguiendo se acercó para hablarme.

Miré a la mujer, es atractiva, pero he visto mejores y ya he abandonado las aventuras de una noche.

"¿Qué pasa? ¿Soy tan estúpidamente guapo que te enamoraste de mí?" – Sonreí como un imbécil arrogante.

La mujer me miró gentilmente. – "Parece tener problemas… ¿Necesitas hablar?"

¿Por qué mierda todos creen que soy una persona amable y lamentable que necesita ser salvada?

Literalmente soy un genocida, mujeriego, manipulador, hipócrita, esquizofrénico y alcohólico. Recibir tanta gentileza me hace sentir asco hacia la estupidez humana.

Me masajeé la frente. – "Mira, si quieres hablar conmigo esto terminará contigo gimiendo en mi cama y cuando se me pase la ebriedad me daré cuenta de que todo se fue a la mierda por lo que tendré que hacerte una de mis esposas, así que mejor déjame en paz"

Dios, esta migraña de mierda va a matarme…

A pesar de que mi actitud era absolutamente desagradable, la mujer no se alejó y me sonrió. – "Podemos hablar para que te desahogues"

Mierda, otra persona idealista con el cerebro lleno de flores y estupideces.

Estoy cansado de este mundo, quiero volver a un lugar donde todo se resuelve con violencia sin sentido…

Ignoré a la mujer y me dirigí a otro bar.

Cuando llegué al lugar, el encargado me reconoció ya que el imbécil de Seiji es famoso en esta región ya que este lugar se volvió estable después de que asesiné a cada imbécil problemático en este lugar… O bueno, Kuro lo hizo, yo solo soy el idiota que sonríe y se acuesta con mujeres.

¿Tengo crisis de identidad?

Genial, otro trastorno mental para la lista…

"Por aquí señor" – Un camarero me llevó a una mesa privada.

"¿Enserio me seguiste?" – Miré a la mujer que me había seguido sin la menor cautela. – "¿No tienes miedo de que yo sea un degenerando o algo así?"

Literalmente el camarero me está mirando con miedo y respeto por lo que es obvio que soy un yakuza.

La mujer me sonrió. – "No pareces una mala persona"

…

Ya entiendo, es idiota.

Miré al camarero. – "Tráeme todo el vodka que tengas… En cuanto a ella… No sé, tráele lo que ella quiera, pero si descubro que adulteraste las bebidas tendrás que aprender a vivir sin tus brazos…"

"Yo quiero una margarita…" – La mujer habló con cierta compasión hacia el camarero.

El camarero asintió muchas veces y se apresuró a irse.

"¿Eres un yakuza?" – La mujer me preguntó con curiosidad.

"¿Yo? ¿El sujeto con ropa de mafioso que es temido por las personas que dirigen un bar en el territorio de los yakuzas?" – Pregunté de forma exagerada. – "Oye no lo sé, tal vez soy un panadero"

"Entiendo, no necesitabas ser tan sarcástico" – La mujer bajó la mirada con tristeza.

"¿Y tú que eres? ¿Profesora?" – El camarero trajo un par de botellas por lo que abrí una y la bebí de golpe.

"Realmente puedes beber demasiado…" – La mujer miró con sorpresa y luego sonrió. – "Sí, soy profesora"

"Oh, ya veo, seguro eres popular entre tus estudiantes" – Me encogí de hombros.

Conocí a dos profesoras atractivas en un solo día, esto me hará despertar un nuevo fetiche…

"No lo creo" – La mujer sonrió con amargura. – "Soy un poco torpe y me falta experiencia…"

"Los errores nos hacen crecer, por eso vivir nos hace mejorar, vivir es un error" – Me encogí de hombros y bebí otra botella.

"Eso suena deprimente" – La mujer sonrió con amargura mientras bebía su margarita.

"No tanto, es deprimente si te rindes, pero si estás dispuesto a seguir adelante, entonces nada es deprimente" – Seguir adelante… Se siente nostálgico.

La mujer miró en silencio un largo tiempo mientras yo seguía bebiendo.

Seguí bebiendo hasta que se terminó el vodka del bar.

De nuevo pagué la cuenta y me puse pie para buscar otro bar.

"¿Estas bien? ¿No deberías detenerte?" – La mujer me sujetó del brazo como si ella temiera que yo pudiera desmayarme.

Puse los ojos en blanco. – "Tengo dinero, tiempo y estoy frustrado, puedo embriagarme toda la maldita noche"

La mujer parecía querer decir algo, pero un hombre se nos acercó.

"¡Hina! ¡¿Qué haces sujetando el brazo de ese idiota?!" – El idiota me llamó idiota, increíble…

"Kengo…" – La mujer frunció el ceño.

Mierda, me acabo de involucrar en una telenovela.

Mi cerebro se negó a procesar las estupideces que escuché así que no entendí porque el hombre dejó salir intención asesina mientras sacaba un cuchillo.

"¡Te mataré como la perra que eres!" – El hombre se apresuró para apuñalar a la mujer.

Repentinamente el hombre estaba en el suelo con la nariz destruida y sus dientes frontales totalmente rotos.

Miré mi puño, esta cosa se movió por instinto… Buen puño.

El idiota aun respira por lo que miré hacia un callejón donde estaba uno de mis subordinados. Con un sutil gesto le indiqué que se encargara de este idiota y luego me alejé para buscar otro bar.

"¿Por qué todavía me sigues?" – Me detuve y miré a la mujer que me seguía como un perro abandonado siguiendo a un desconocido que le ofreció un hueso de pollo.

"Y-Yo…" – La mujer estaba temblando, parece que esta asustada ya que casi fue apuñalada.

Lo que sea.

De alguna manera terminé llevando a la mujer a otro bar donde empezamos a conversar.

Su nombre es Hina Tachibana, una profesora de 23 años que da clases a adolescentes idiotas de la misma edad que mi hermana.

Ella parece tener problemas ya que tiene una aventura con un hombre casado o algo así, sinceramente no le presté mucha atención ya que esto era tan aburrido como una telenovela.

"Y entonces mi madre se volvió a casar y ahora uno de mis estudiantes es mi hermanastro…" – Hina terminó de contarme su vida mientras yo seguía embriagándome.

"Ya veo" – Me cogí de hombros. – "Pues si estas tan preocupada por tu aventura con tu exprofesor, solo encáralo, hazle saber que quieres una relación real y debe divorciarse, o puedes madurar como persona, dejar estas estupideces y conseguirte un novio que no se avergüence de tener una relación oficial contigo"

"…" – Hina me miró con amargura. – "¿Te han dicho que eres cruel con tus palabras?"

"La realidad es cruel, la aceptas o la evades" – Me encogí de hombros.

Hina se quedó mirando un vaso de jugo de frutas con bajo nivel de alcohol.

Me terminé el vodka del tercer bar así que me puse de pie para buscar otro bar mientras Hina me seguía.

"¿Vas a seguirme toda la noche?" – Alcé una ceja. – "¿No tienes que dar clases mañana?"

"Aún estoy un poco asustada por lo que pasó…" – Hina ciertamente se veía asustada. – "¿Puedes hacerme compañía esta noche?"

…

En mi infinita sabiduría y alto estado de ebriedad tomé la decisión más racional.

"Ah, Seiji ♥~" – Hina gemía mientras su cuerpo desnudo se balanceaba sobre mi cintura en la cama de un hotel.

A pesar de apariencia recatada, ella resultó ser bastante apasionada por lo que sostuve sus caderas para que le fuera más fácil mover hacer movimientos intensos.

Con cada movimiento, sus pechos bien formados se sacudían dame una vista agradable de sus curvas.

Definitivamente tengo un fetiche por las profesoras sexys.

Su posición favorita parece ser la de vaquera mientras que ella prefiere tomar el control del ritmo por lo que solo usé mis manos para darle ligeras estimulaciones a sus muslos y pezones.

Cuando Hina se acercó al orgasmo, quise burlarme un poco de ella por lo que puse un poco de fuerza en mi cintura y levanté mis caderas haciendo que mi entrepierna llegara a la entrada de su útero.

Hina se estremeció mientras su boca se abría para dejar salir un intenso gemido, pero incluso cuando estaba teniendo espasmos por el orgasmo, no me detuve de penetrarla.

Tras unos minutos, dejé de moverme ya que de continuar su cuerpo saldría lastimado.

Cuando me detuve, Hina se desplomó sobre mi cuerpo presionando sus suaves pechos contra mi pecho.

A pesar de que Hina jadeaba pesadamente, ella seguía despierta y de forma casi inconsciente ella acercó sus labios a los míos en busca de un beso.

Acerqué mis labios a los suyos y empecé a besarla. A pesar de que el beso empezó como un beso lujurioso de amigos sexuales, rápidamente se volvió un beso apasionado de amantes con una relación romántica.

Tras besarnos un tiempo, ella empezó a quedarse dormida.

Mientras sus parpados se cerraban, ella murmuró en voz baja. – "Gracias Seiji… Te amo…"

Suspiré, quiero seguir embriagándome…

Quise separarme de Hina para estirarme, pero antes de recuperar mi racionalidad y darme cuenta de que acabo de hacer una estupidez, mi teléfono recibió un mensaje del señor Ichijo para recordarme que mañana debo ir a un restaurante a las diez de la mañana para verme con Lin Ruoxi.

Miré a Hina y con Hamon comprobé su estado físico. Ella no despertará durante unas diez horas así que, si me quedo a su lado hasta que ella despierte, no podré llegar a tiempo a mi reunión con mi esposa legal…

Mierda, ¿Ya considero a esta mujer como mi esposa solo porque me la follé?

Me estoy volviendo demasiado blando… Estúpidas emociones de apego.

Suspiré y me quedé acostado mientras Hina me abrazaba cariñosamente con una sonrisa de doncella enamorada.

¿Acaso esta mujer tiene una fuerte dependencia emocional y está necesitada de afecto masculino?

Bueno, no importa, a partir de este momento ella es parte de mi harem así que cualquiera que sea su problema yo lo resolveré.

Miré fijamente al techo mientras mi mano acariciaba el largo cabello castaño de Hina.

Aunque no es la mujer más hermosa ni la más cariñosa de mi harem, tener a una hermosa mujer en mis brazos realmente me ayudó a disminuir mi frustración.

Toda la mierda que ha estado ocurriendo en mi vida desde que volví a este mundo es simplemente ridícula, pero bueno, la vida un protagonista está llena de estupideces.

Al menos no hice algo demasiado estúpido como acostarme con una entidad superior, aunque ahora que lo pienso, Hina comparte rasgos fasciales con una chica que conocí antes de obtener mi sistema…

Lo que sea, no voy a pensar en cosas sin importancia.

Por ahora dejaré que Hina duerma un poco más, luego purificaré el alcohol de su cuerpo y la llevaré a su casa para no llegar tarde a mi reunión con Lin Ruoxi.

Por ahora solo miraré al techo hasta que mi racionalidad vuelva a funcionar.

Extraño poder dormir…

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Nota del Autor:

Es difícil escribir con una sola mano ya que mi brazo izquierdo duele mucho…