webnovel

Pecado 160: Suegros del infierno (3)

"Sigh..." Haru suspiro relajando su tenso cuerpo, finalmente podía respirar con tranquilidad y liberarse de un problema que estaba arrastrando desde hace un tiempo, bajo mesa pudo sentir el agarre de Rías en su mano, estaban tomados de la mano y ella tenia una tímida sonrisa en su rostro.

"Por ahora el compromiso solo quedara entre nosotros y no será oficial hasta cuando Haru demuestre ser tan o mas importante que nuestra familia" en cuanto lord Gremory dijo aquello, Rías se levanto de golpe pero lord Gremory mantuvo la compostura "esto es un tanto exigente teniendo en cuenta los orígenes de Haru pero es la misma razón por lo que hago esto. El infierno, las noblezas y todas las otras familias deben entender que estamos manteniendo nuestro prestigio entregando a la heredera de nuestra familia a una persona digna, y creo que lord y lady Sitri estan pensando en lo mismo, espero esto no sea una ofensa para ti Haru"

"La verdad esperaba algo así, solo soy un humano con trucos extraños pero no saben nada concreto sobre mi" Haru lo comprendía completamente. Su sistema de habilidades es algo que no se había visto nunca antes, una situación muy diferente a la que su hermano Issei tendría que afrontar si estuviera en su posición. El dragón emperador rojo es uno de los dragones celestiales conocido por todas las facciones, solo despertar ese poder ya te convierte en una figura importante a tener en cuenta.

"¿y bien?" pregunto Sirzechs mirando a Haru "¿tienes un plan para hacerte mas importante?"

"el plan ya esta en marcha, mis fuerzas aumentan a cada minutos, solo tengo que buscar compañeros ideales" Haru recordó a sus compañeros, Kokabiel por si solo era tan importante como un rey demonio.

"eso es bueno" sonrió Sirzechs con total gentileza hacia el shinobi "en el futuro puedes llamarme hermano o cuñado"

"¡Hermano!" exclamo Rías avergonzada pero eso solo hizo reír a la familia

La cena ya había terminado, Haru decidió quedarse en el territorio Gremory para pasar la noche luego de la invitación de quien seria su suegro en el futuro, la verdad no había razones para negarse.

El cielo era oscuro y Haru estaba de pie en el balcón mirando hacia el exterior cuando apareció aquella pequeña figura que lo había estado guiando desde hace un tiempo.

"tu mente parece mas tranquila ahora, mocoso" Shukaku pronuncio mientras tomaba asiento en el balcón y miraba hacia el exterior "fue una buena decisión"

"¿tu crees?" pregunto Haru mirando al Bijuu

"si no eres tu, entonces nadie mas esta calificado para esta relación" Shukaku batió su cola un par de veces mas antes de volver al cuerpo de Haru sin decir ni una otra palabra dejando a este ultimo bastante consternado pero sus sentidos le dieron una respuesta rápida.

Solo unos metros detrás de Haru estaba una figura, la silueta de aquella mujer a la que había decidido ayudar en muchas ocasiones, la mujer que le entrego sus sentimientos y ahora él mismo había pronunciado sus propios sentimientos.

"Rías" dijo Haru haciendo que la cara de la joven se ruborizara

"que digas mi nombre con tanta seriedad es realmente vergonzoso" dijo ella en voz baja pero pronto calmo su respiración "yo no sabia nada de esto, pudiste haberlo dicho antes" dijo ella

"habría arruinado la sorpresa" las palabras de Haru parecían casuales pero realmente tenían bastante peso "además no estaba seguro si todo esto saldría bien, no quería arruinarlo pero tampoco quería mantener esto en un secreto y estoy seguro que Sona tampoco querría lo mismo"

Rias se acerco lentamente "¿estas seguro de esto?" pregunto ella

Haru quien tenia la cabeza hacia abajo la levanto y miro directamente a Rias, puso su atención en la expresión de la mujer frente a él "estar al borde de la muerte me hizo sentar cabeza supongo. No hay nada que asegure mi supervivencia ante los enemigos mas poderosos, soy un simple humano después de todo y creo que debería vivir mi vida lo mejor posible sin dejar remordimientos atrás..." Haru rasco su cabeza incomodo "la verdad no es muy propio de mi hablar sobre sentimientos-"

En el momento que termino de hablar sintió como Rías se abalanzaba sobre él, pudo sentir como los grandes pechos de la pelirroja lo aplastaban y pudo sentir el aroma de su mujer "No puedes morir" dijo ella con un tono molesto "no tienes el derecho de morir, no ahora que finalmente decidiste dejar de escapar"

Haru pudo sentir como Rías temblaba levemente, dio un largo suspiro y decidió acariciarle el cabello "entiendo"

"tendrás que entrenar mucho"

"como siempre lo hago" rio Haru hubo silencio entre ambos hasta que Rias volvio a abrir su boca.

"¿estás seguro de lo que dijiste antes?" Rías se quedó mirando directamente a Haru "tú sabes que yo... soy complicada"

"¿complicada?" pregunto Haru mirando a la pelirroja

"si"

"¿quizás un poco excesivamente caprichosa?"

"¿es necesario decirlo de esa manera?" pregunto ella con el ceño fruncido

Solo al ver la reacción de Rías, Haru no pudo evitar sonreír con bastante orgullo "No creo tener más sorpresas en este momento, realmente estoy decidido, aún no tengo la fuerza suficiente para respaldar mis palabras, pero esta vez no quiero vivir una vida llena de arrepentimientos, el primer paso para lograr esta vida ideal en mi mente es aceptar mis propios sentimiento"

Haru estaba de pie justo frente a Rías, solo un par de centímetros los separaban. El largo cabello rojo de ambos revoloteaba en el aire mientras el ambiente se hacía cada vez más serio "Lo dire una vez más, Rías Gremory" Haru puso la mano de Rías sobre la suya "¿me concederías el honor de permitirme ser parte de tu vida?"

"¿no crees que es un poco tarde para formar parte de mi nobleza?" pregunto ella arruinando el ambiente

"Lamento informar que no soy compatible con ninguna de tus piezas en este momento y de ser posible no puedo reencarnar, soy una especie de dios menos raro" Haru alzo sus hombros sin tener en cuenta su situación, no terminaba de digerir la conversación con Sirzechs.

Entre las sonrisas confiadas de ambos hubo un breve silencio que fue destruido cuando Rías se abalanzó entre los brazos de Haru, "es una pena, pero no podre tenerte solo para mí, pero creo poder compartirte con Sona"