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—¿Qué dices, Akira? ¿Cómo podría hacerme pasar por otra persona?

—Tiene sus ventajas, lisa. Para que entres desapercibida a este mundo, debes tener una reputación intachable y empezando de cero es imposible, más tardará demasiado. Para ganar la confianza de todos, debes ser alguien cien por ciento confiable.

—No entiendo, ¿Qué ganaría con eso?

—Muchas cosas, podrás progresar a tu gusto y si logras acostumbrarte a esto, más adelante podrás ser independiente; vas a generar mucho dinero sin necesitar de mí, nuestros hijos estarán totalmente seguros, ya que en este país nadie más conocé tu verdadera identidad que las personas de tu trabajo y Kanji. Si cambias tu apariencia no estarás en riesgo por estar conmigo. Serás una mujer de negocios, respetada, inteligente, tendrías mucho poder, y lo mejor, vamos a poder pasar más tiempo juntos.

—Sería difícil, como bien dijiste, Kanji sabe mi identidad, ¿Cómo podríamos hacer para que no se dé cuenta?

—Ahí es donde entro yo, lisa. Tú serás la intermediaria entre Kanji y yo. Vamos hacer un trato con el enemigo.

—¿Un trato? ¿Estás diciendo que planeas usar a Kanji?

—Podemos matar varios pájaros de un tiro,  princesa. El enemigo es mejor tenerlo de cerca. Si Kanji hubiera querido vengar la muerte de su familia, ya me hubiera matado a mí y te hubiera matado a ti ese día. Está más que claro que sus intenciones no son vengarlos. ¿Crees que si alguien está resentido va actuar de esa forma tan tranquila? No, mi amor. Actuaría exactamente de la misma forma que Carter hizo.

—Esto es difícil de entender, Akira.

—Dijiste que querías ser otra persona, ¿No es así? ¿Qué mejor que proponerte esta meta y tratar de alcanzarla? No es difícil, yo estaré ayudándote en todo momento.

—Si, pero es todo tan complicado de entender. ¿En qué podría ayudarte Kanji?

—Kanji tiene mucha influencia en el negocio también. Si es la misma persona que estuve investigando, puede servirme de mucho para encontrar a la familia de mi padre.

—Veo que aún no vas a desistir de esa idea, supongo que no tengo de otra que aceptarlo de una vez.

—No te pongas así, princesa.

—Lo siento, sé que esos planes estaban desde mucho antes de conocerme. Quiero ayudarte, Akira. ¿Puedo servir de algo?

—Cuando te pones de esa forma tan obediente, me dan ganas de besarte y hacerte muchas cosas. Si estuvieras así de dispuesta para todo, sería tan delicioso.

—Deja de estar pensando en ese tipo de cosas ahora — Akira sonrió maliciosamente—. Regresando al tema de la identidad, Akira. Tienes muchos enemigos, no solamente Kanji. Si aún con esa identidad estamos juntos, van a buscarme a mi sea quien sea.

—Me salió inteligente mi princesa. Efectivamente solo seremos socios ante los ojos de los demás. Dejarás de ser Lisa Xiao, para convertirte en alguien más, preciosa.

—¿Eso que significa?— Akira se acercó.

—No serás más Lisa Xiao, alguien más lo será.

—¿Alguien más?

—Si, querida. Alguien se hará pasar por ti. Eso va a distraer a mis enemigos. La venganza no iría contra nuestros hijos, ni mucho menos contra ti.

—Pero la persona que escogas estará en riesgo, Akira.

—¿Y eso qué? Debes de pensar primero en tu seguridad. Empieza por dejar de sentir lástima por los demás, ¿Crees que puedas hacer eso?— puso su  pulgar en mi mentón y me obligó a mirarlo—. ¿No sería nuestra relación más exitante con algo de adrenalina y tensión?

—¿Cómo te voy a ver, si alguien más será lisa?

—Vamos a seguir viéndonos, al igual que estaremos juntos al ser socios. Ante los ojos de los demás solo seremos buenos socios, pero detrás de las puertas será otro el caso — lamió sus labios.

—No pasaremos mucho tiempo juntos y con nuestros hijos.

—Claro que si, iré a la casa como de costumbre, pero tendríamos que mudarnos a otra. Que esté a nombre de tu nueva identidad. De todo lo demás me encargo yo, no te preocupes, todo será mejor que antes. Confía en mí, reina. ¿Puedes hacerlo?

—Esta bien, confiaré en ti.

—Buena chica— me besó y puso sus manos alrededor de mi cintura acercándome a él.

—Akira.

—¿Mhm?

—¿Tú estarás satisfecho?

—Si, ¿Tú lo estarás?

—Aún no sé.

—Por el momento voy a necesitar que hables con Kanji. Para la próxima vez que te busque habla con él para que nos encontremos, mientras tanto iré buscando a quien será tu nueva identidad. Sabes que esto será algo complicado, pero si realmente lo deseas y te lo propones, vas a poder hacerlo. Confío en ti, princesa.

—Haré todo lo que pueda, Akira. Por nuestros hijos, por ti y por mi, lo prometo.

—Me encantas — Akira me subió en sus brazos.

—Y tu a mi — mordió sus labios, antes de robar los míos.

No sé si está sea una buena idea, pero todo sea por salvar nuestra familia y nuestro matrimonio.